La inteligencia emocional no es un término nuevo. Es una característica que tienen muchas personas y que, según los expertos en salud mental, nos puede ayudar a resolver conflictos, manejarnos con el estrés de una manera más constructiva y relacionarnos mejor a nivel personal, familiar, social y laboral. Esta cualidad se desarrolla desde la infancia y repercutirá en toda la vida adulta. ¿Sabrías decir si tú tienes un buen desarrollo de la inteligencia emocional? Puedes hacer este test de personalidad y, a continuación, podrás conocer cómo te beneficia y cómo puedes aprender a cultivarla.
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¿Qué es la inteligencia emocional?
El término fue acuñado por el Dr. Daniel Goleman, psicólogo, conferenciante y escritor que obtuvo su doctorado en la prestigiosa Universidad de Harvard. Según él, la inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, comprender y gestionar nuestras emociones, así como también la habilidad de percibir y comprender las emociones de los demás.
La inteligencia emocional un concepto muy importante en el ámbito de la psicología y el desarrollo personal, ya que juega un papel crucial en el bienestar emocional y el éxito en la vida.
De hecho, como señala la coach y psicóloga Pilar Guerra Escudero, "las personas con poco desarrollo de su inteligencia emocional procesarán el mundo que les rodea de forma errónea". Esto puede conducir a malas interpretaciones y ocasionar, muchas veces, sufrimientos innecesarios.
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Beneficios de tener inteligencia emocional
Las personas con un mayor desarrollo de la inteligencia pueden atravesar por las mismas adversidades que el resto. Es decir, su vida no tiene que ser más fácil a priori, sin embargo, esta cualidad sí puede hacer que no se vuelva más complicada aún, ya que tendrán un mejor manejo del estrés, mayor capacidad para aceptar aquello que no se puede cambiar, más resiliencia para adaptarse. Además, sus relaciones sociales y laborales serán más ricas, lo que contribuye, también a un mayor bienestar emocional.
Estos son algunos de los beneficios de tener un buen desarrollo de la inteligencia emocional:
- Mejor autogestión: una persona con alta inteligencia emocional es capaz de manejar el estrés de manera efectiva, controlar sus impulsos y tomar decisiones más acertadas en momentos de tensión.
- Relaciones más satisfactorias: la empatía y la habilidad para comprender las emociones de los demás fortalecen las relaciones interpersonales, fomentando la confianza y la comunicación efectiva.
- Liderazgo efectivo: los líderes con inteligencia emocional inspiran y motivan a sus equipos, creando un ambiente de trabajo más productivo y armonioso.
- Resolución de conflictos: la habilidad de manejar emociones conflictivas y mantener la calma facilita la resolución pacífica de disputas y problemas interpersonales.
- Mayor bienestar psicológico: una adecuada inteligencia emocional se asocia con niveles más bajos de ansiedad y depresión, promoviendo una mayor satisfacción con la vida.
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Cómo desarrollar la inteligencia emocional
Los expertos en psicología insisten en que hay los padres tienen que ayudar a sus hijos a desarrollar su inteligencia emocional desde niños. Sin embargo, nunca es tarde para aprender
- Autoconciencia: presta atención a tus emociones y su origen. Reconoce tus patrones emocionales y cómo estos influyen en tus acciones y decisiones.
- Control emocional: practica técnicas de relajación y respiración para manejar el estrés. Identifica los desencadenantes emocionales y busca formas saludables de expresar y canalizar esas emociones.
- Empatía: escucha activamente a los demás, tratando de comprender sus sentimientos y perspectivas. Ponerte en el lugar de los demás te ayudará a fortalecer tus habilidades empáticas.
- Comunicación asertiva: expresa tus emociones de manera clara y respetuosa. Aprende a comunicarte efectivamente sin herir los sentimientos de los demás.
- Resolución de conflictos: practica la negociación y la búsqueda de soluciones win-win. Aprende a ceder cuando sea necesario y a buscar acuerdos beneficiosos para ambas partes.
- Pide ayuda: todo lo anterior puede resultarte difícil si nunca has desarrollado estas cualidades. Por ello, puede ser necesario que pidas ayuda a un psicólogo, si sientes mucho malestar, o a un coach, para que te ayude a gestionar las emociones, a desarrollar tus habilidades sociales y a resolver mejor las situaciones de estrés y los conflictos.
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