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mujer mar© Getty Images

Toma nota de los 5 beneficios para la salud de nadar en agua fría

Hay que hacerlo con sentido común, teniendo presentes los posibles riesgos a los que podemos enfrentarnos, sobre todo al bañarse en aguas abiertas, como el mar, los ríos o los lagos


Actualizado 20 de julio de 2023 - 10:14 CEST

Estamos en esa época del año en la que quien más quien menos sueña con los baños en el mar. El mar es sanador y, además, realizar deportes acuáticos puede tener muchas ventajas para nuestra salud. Un ejemplo: diferentes estudios demuestran los beneficios físicos y mentales que proporciona la práctica de la natación en agua fría. Aprovéchalos, pero con sentido común y cabeza, teniendo en cuenta ciertas precauciones. Así lo explica la doctora Núria Paredes, especialista en Medicina General del centro médico MGC Mutua: “Con la llegada del verano se incrementa la práctica de deportes al aire libre, entre los que destaca nadar en el mar, lagos y ríos, estos últimos, sobre todo en zonas del norte de España, con aguas muy frías a pesar de estar en periodo estival. Ello contempla beneficios para la salud, pero también algunos riesgos, varios de ellos graves, que hay que tener presentes".

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Ayuda a adelgazar

La explicación es sencilla: cuando nadamos en agua fría, al cuerpo le toca trabajar duro, pues tiene que procurar mantener su temperatura corporal. Así, si uno de tus objetivos es quemar calorías, debes saber que se queman más que en una sesión de natación en agua cálida. De hecho, cuanto más fría esté el agua, más trabajará el organismo en convertir la grasa en energía, y si además prácticas natación, el gasto calórico se multiplica.

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Mejora la circulación

También le estás haciendo un favor a tu salud cardiovascular. Y es que al introducir el cuerpo en agua fría, el cambio extremo de temperatura hace que el cuerpo ordene al corazón bombear más sangre a los órganos. Esto supone una mejora en la circulación, que causa la eliminación más rápida de las toxinas, lo que fomenta una piel más clara y sana.

Reduce el estrés

Cualquier ejercicio te ayuda a eliminar las tensiones. Y es que, independientemente de cuál sea, se incrementa la producción de hormonas del bienestar, las endorfinas, que ayudan a eliminar el estrés y la ansiedad.

Te ayuda a dormir mejor

Tu descanso también te lo agradecerá. Y es que al nadar en agua fría con regularidad, la calidad del sueño mejora. Esto se debe a que el agua a temperatura baja estimula el sistema nervioso parasimpático, que ayuda al cuerpo a descansar y a autorrepararse. Así, ese sentimiento de relajación y calma nos proporciona un descanso más reparador.

Mejora el sistema autoinmune

Tal vez no sabías que cuando te sumerges en agua a baja temperatura, se experimenta algo llamado “shock de agua fría”, una respuesta involuntaria del cuerpo a verse sumergido en agua fría al zambullirse rápidamente. Esto produce que se contraigan los vasos sanguíneos y el corazón funcione más deprisa, causando jadeo y acelerando la respiración. Incide, además, directamente en el sistema inmune, causando una mayor producción de células sanguíneas y de antioxidantes, que ayudan a combatir enfermedades como el enfriamiento común o la enfermedad cardiaca.

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Precauciones al nadar en agua fría

Eso sí, no todo son ventajas y hay que estar muy atento a los posibles riesgos a los que podemos enfrentarnos cuando nadamos en agua fría, sobre todo al bañarse en aguas abiertas, como el mar, los ríos o los lagos. Hay riesgos que podemos resumir en los siguientes:

  • Padecer un cuadro de hipotermia, que es cuando la temperatura del cuerpo desciende por debajo de los 35ºC. "El cuerpo comienza a enfriarse en el momento que se introduce en el agua y sigue gradualmente en su bajada de temperatura, apareciendo síntomas como tiritona, piel fría y pálida, labios azules, cansancio, confusión y respiración agitada, por lo que peligra la vida del nadador", explica la doctora Núria Paredes.
  • También podemos padecer otra situación compleja, a la que hacíamos referencia antes, el llamado shock de agua fría. ¿Cómo podemos evitarlo? Metiéndonos de forma gradual en el agua.
  • Pueden aparecer sabañones. Estos no son causados por el baño en agua fría, pero pueden aparecer si se calientan demasiado rápido pies y manos, apareciendo ampollas en los dedos, incluso en las orejas. No son graves, pero pueden resultar muy incómodos y no son nada estéticos.

Teniendo todo esto en cuenta, la doctora explica que "para practicar la natación en agua fría lo importante es aplicar sentido común, realizándolo el tiempo adecuado, ir siempre acompañado y teniendo siempre en cuenta todas las medidas de seguridad. De esta forma, obtendremos todos los beneficios saludables para nuestro cuerpo".