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La alimentación juega un papel fundamental en la recuperación y bienestar de los pacientes tras una cirugía de colon debido al cáncer. Y aunque el médico, en el alta, habrá dado todas las pautas generales respecto a la introducción de sólidos y la variedad de los alimentos, es frecuente que al paciente y a sus familiares les surjan muchas dudas. Como nos señalan los expertos, lo principal es adoptar una dieta que promueva la cicatrización de tejidos, evite complicaciones y proporcione los nutrientes necesarios para fortalecer el organismo. Así lo afirma la Dra. Carmen Toledano Rojas, especialista en oncología médica de HM Sanchinarro. La experta en cáncer nos da algunos consejos para comer bien y evitar que la comida siente mal.
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¿Qué alimentos son los más indicados?
En primer lugar, hay que tener en cuenta que la reintroducción de alimentos puede durar entre dos semanas y un mes, aproximadamente. "Depende del paciente y de su evolución clínica. Pero es importante que se reintroduzcan los alimentos en la dieta poco a poco. Al menos durante las primeras 6-8 semanas tras la cirugía".
Entre los alimentos que aconseja esta especialista se encuentran las frutas y verduras, así como el consumo de pasta, arroz, leche y derivados (preferiblemente desnatados y sin abusar de ellos, porque podrían provocar diarrea). Además, señala que "es más aconsejable ingerir pescados y aves".
En cuanto a las grasas, la experta recomienda incluir en la dieta "grasas monoinsaturadas como el aceite de oliva, aceitunas y aguacate, frutos secos naturales (no fritos ni tostados)". Además, menciona que se deben incluir "grasas poliinsaturadas (ácidos grasos Omega-3 y Omega-6) presentes en semillas de lino, sésamo y chía, pescados azules (sardinas, atún, salmón, caballa, etc.) y nueces".
Respecto a la fibra, la oncóloga menciona que "la ingesta aconsejable de fibra es entre unos 20-35g/día, pero esta cantidad debe reducirse tras una cirugía de colon". Durante las primeras 6-8 semanas después de la intervención, se recomienda seguir una dieta baja en fibra y luego reintroducirla gradualmente.
Otro aspecto a considerar tras este tipo de cirugía es el número de veces que se come. Según esta especialista, "lo más aconsejable es hacer seis comidas. De esta forma, reducimos las cantidades diarias por ingesta y evitamos o reducimos la posible aparición de diarrea. También es aconsejable masticar la comida con lentitud e ingerir una media de 1-2 litros de agua entre las comidas".
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¿Qué alimentos hay que evitar?
Entre los alimentos que un paciente tras una cirugía de colon debe evitar o limitar se incluyen "aquellos que contienen proteínas de origen animal como carnes rojas o embutidos y grasas saturadas". Respecto a estas, es importante no consumir las presentes en la mantequilla, nata, quesos untables, salsas derivadas de grasa animal (carbonara, boloñesa), tocino y panceta; así como carne de cerdo, cordero, vacuno (en mayor proporción en chuletas), embutidos grasos (chorizo, fuet, salchichas) y quesos". También insiste en que la leche entera es más difícil de digerir y absorber, por lo que la incluye en el listado de alimentos no recomendados para un paciente tras una cirugía de colon.
La especialista en oncología también advierte de que "el abuso de las comidas con picante, las bebidas alcohólicas o con cafeína y aquellas que tienen alto contenido en azúcares o grasas pueden favorecer la diarrea y además no son saludables". Por lo tanto, se sugiere evitar estas comidas al menos durante las primeras semanas tras la cirugía y, posteriormente, hacer un consumo controlado de las mismas.
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Para concluir, la oncóloga resume en diez puntos clave los consejos dietéticos para que estos pacientes puedan comer sano y que la dieta les ayude a recuperarse mejor de la cirugía:
- Tras la cirugía, introducir los alimentos en la dieta progresivamente y en pequeñas cantidades
- Comer despacio y masticar bien los alimentos, preferiblemente con la boca cerrada para evitar la formación de gases
- No abusar de bebidas alcohólicas o con gas, ni de sustancias picantes
- Al principio, es aconsejable dieta baja en fibra durante 6-8 semanas tras la cirugía y reintroducir progresivamente tras la 6ª semana
- No introducir nuevos alimentos sin confirmar buena tolerancia a los alimentos reintroducidos previamente
- Evitar el exceso de peso
- Es importante mantenerse bien hidratado por lo que es aconsejable una adecuada ingesta de líquidos durante todo el día
- En caso de que se le realizara una ostomía en la cirugía, la pérdida de iones como sodio, potasio o magnesio puede aumentar. En estos casos, puede ser necesario incrementar la ingesta de los mismos o tomar suplementos, pero siempre bajo control y seguimiento médico
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