Las plantas que recomiendan las farmacéuticas para las piedras en la vesícula

¿Tienes piedras en la vesícula? O quizá, has sabido de alguien que ha tenido que ser intervenido de este órgano por un cólico causado por esta afección. Sea como sea, queremos hablarte de cómo la medicina natural puede cuidar de la salud de la vesícula y prevenir la formación de colelitiasis, o la presencia de uno o varios cálculos en la vesícula biliar, y que sufre entre el 10-20% de los adultos. Generalmente, se trata de una dolencia asintomática, pero cuando da la cara puede producir mucho dolor. La farmacéutica Mar Santamaría, de Promofarma, te explica cómo puedes reducir el riesgo de formar estas piedras y qué plantas medicinales pueden ayudar a expulsarlas. 

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¿Qué es la bilis?

La bilis es un líquido necesario para contribuir a la digestión de las grasas que tomamos de la dieta y también para eliminar ciertas sustancias de desecho. Está compuesta básicamente por sales biliares, pigmentos, colesterol y electrolitos.

Por otro lado, la vesícula biliar es como un saquito de almacenamiento de bilis, que conecta con el hígado (donde se produce) y ayuda a expulsarla, como decíamos, hacia el intestino delgado para contribuir así a una buena digestión y asimilación de los nutrientes de naturaleza liposoluble o grasas (incluyendo algunas vitaminas).

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¿Qué plantas nos ayudan a evitar las piedras en la vesícula?

Hay plantas que tienen una o ambas propiedades interesantes para el correcto funcionamiento de la vesícula biliar. Así hablamos de plantas coleréticas, es decir, que activan la producción de la bilis; y/o colagogas, cuando fomentan su liberación hacia el intestino delgado.

La principal función de estas plantas, y por eso las utilizamos, es la de reducir el riesgo de formación de cálculos biliares en la vesícula o en las vías biliares, cuando la bilis se concentra demasiado y se depositan pequeñas masas sólidas que pueden llegar a obstruir el flujo de la bilis hacia el intestino e, incluso, provocar un cólico biliar (inflamación y dolor).

Cómo tomar estas plantas

Todas estas plantas se pueden tomar en forma de infusión, por ejemplo. Pero suelo recomendarlos más en forma de complementos alimenticios ya preparados, con los extractos vegetales bien estandardizados, ya sea en formato de cápsulas, comprimidos o en forma líquida para beber. Lo habitual es que incluyan una mezcla de diferentes extractos de plantas, no una sola (aunque sí existen suplementos a base de un solo extracto). Por un lado, existen complementos muy enfocados al apoyo específico de la salud hepática, con varias de las plantas que hemos mencionado anteriormente.

Otros, en cambio, tienen un efecto más general de soporte a la digestión, junto a otras plantas eupépticas o digestivas, carminativas (contra las flatulencias), fibras prebióticas para favorecer el crecimiento de los microorganismos intestinales beneficiosos, vitaminas, etc.

Finalmente, también encontramos plantas coleréticas y colagogas dentro de complementos denominados como “detox”. En realidad, lo que hacen es contribuir a la función normal de los órganos detoxificantes, especialmente el hígado, de aquí la terminología “detox”. También se emplean en el contexto de dietas de adelgazamiento con el mismo propósito, el de fomentar la eliminación de sustancias de deshecho del organismo. En cualquier caso, mi recomendación es contar siempre con la supervisión por parte de un profesional de la salud.

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¿Puede haber contraindicaciones? 

Como contraindicaciones generales de las plantas con propiedades coleréticas y colagogas, debemos mencionar que no deben tomarse si hay obstrucción de los conductos biliares, inflamación aguda de las vías biliares o de la vesícula, o hepatitis. Eso es porque en caso de estasis o estancamiento de bilis que no pueda fluir al intestino, con la inflamación asociada, la toma de estos extractos podría provocar un empeoramiento del problema.

Otra contraindicación es la alergia conocida a cualquiera de las plantas mencionadas, por ejemplo, la alergia a la familia botánica de las compuestas (alcachofera, achicoria, manzanilla, cardo mariano,…)

Algunas molestias leves se asocian a su uso, especialmente en personas sensibles o si nos pasamos un poco de dosis, como molestias abdominales y gástricas leves, náuseas o diarrea ligera al principio de tomarlo.

Hay que tener en cuenta, también, que la mayoría de los suplementos no son aptos durante el embarazo y la lactancia, o en personas que toman determinados medicamentos, por lo que es necesario consultar siempre con un/a profesional

Jengibre

El consumo de jengibre puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor asociado con las piedras en la vesícula, y también puede estimular la producción de bilis, lo que ayuda a prevenir la formación de nuevas piedras. Además, el jengibre tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que ayudan a mejorar la salud en general.

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Achicoria

También tiene efecto colerético, colagogo y digestivo, además de contener la fibra prebiótica inulina, que promueve el crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino.

Genciana 

Esta planta medicinal se puede utilizar para aumentar la producción de bilis y evitar que esta se solidifique y acabe formando piedras en la vesícula. Además, también es buena para el hígado y ayuda en la expulsión de gases. 

Cardo mariano

Su fruto seco tiene unas sustancias muy interesantes, que siguen hoy en día siendo estudiadas. Su compuesto estrella es la silimarina que, de hecho, es un conjunto de sustancias presentes en la planta, con un notable efecto hepatoprotector y antioxidante.

Otros flavonoides de interés que contiene es la quercetina y el kemferol, además de ácidos grasos saludables. Es muy interesante como apoyo a la función del hígado y de la vesícula, y es mejor tomarlo en forma de complemento con el contenido de silimarina estandardizado.

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Diente de león

Se utiliza como hierba medicinal debido a sus propiedades diuréticas y antioxidantes. También se ha demostrado que puede ayudar a reducir las piedras en la vesícula debido a su capacidad para estimular la producción de bilis.

Estas piedras se forman cuando la bilis se solidifica y se acumula en la vesícula biliar. En este sentido, esta planta ayuda a reducir las piedras de la vesícula al aumentar la producción de bilis y mejorar su flujo. También se cree que tiene propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir la inflamación asociada con las piedras en la vesícula.

Boldo

Su extracto es rico en alcaloides con propiedades coleréticas y colagogas. También tiene función hepatoprotectora (de soporte a la función del hígado) y abundantes compuestos antioxidantes. No está recomendado su uso en mujeres embarazadas, lactantes, tampoco en niños, ni adolescentes.

Alcachofa

¿Quién no la conoce bien? Es una planta de la familia de las compuestas, de interés a nivel alimenticio. El extracto de hojas contiene sustancias de acción colerética. Por este motivo, ayuda a la digestión de las grasas y a la función normal de la vesícula biliar. Destaca por su contenido en ácidos fenólicos (ácido clorogénico, cinarina y ácido cafeico), lactonas y flavonoides antioxidantes.

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¿Qué otras recomendaciones evitan las piedras en la vesícula?

Las recomendaciones para cuidar de nuestro hígado y vesícula biliar coinciden con las recomendaciones generales para la salud del sistema digestivo: dieta equilibrada, rica en fibras (hortalizas, fruta, legumbres y granos integrales) y baja en azúcares refinados y exceso de grasas saturadas y de proteína animal.

Evitar comidas muy copiosas y con demasiadas grasas difíciles de digerir. Optar siempre por fuentes de grasas saludables, y estas tomarlas a diario, como el aceite de oliva virgen extra, los frutos secos y el pescado azul de pequeño tamaño. Es decir, volver a los preceptos de nuestra querida dieta mediterránea.

Los alimentos ricos en magnesio también son recomendables (nueces, almendras, avellanas, plátano o una pequeña porción de chocolate del 85%).

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