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¿Qué factores pueden aumentar el riesgo de padecer trombosis venosa?

Este problema de salud consiste en la formación de un coágulo en el interior de las venas, normalmente en las piernas


Actualizado 13 de abril de 2023 - 15:43 CEST

Estamos ante un problema de salud importante, pues la trombosis venosa profunda hoy en día se considera latercera enfermedad cardiovascular más frecuente, solo situada por detrás de la cardiopatía isquémica y del ictus. Además de su alta incidencia, se caracteriza por su capacidad de ser mortal, y una elevada tasa de recurrencia.

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“La trombosis venosa (TV) consiste en la formación de un coágulo en el interior de las venas, y habitualmente nos referimos a los miembros inferiores. La TV forma parte de una entidad más amplia que se denomina enfermedad tromboembólica venosa (ETEV), donde están incluidos la trombosis venosa profunda (TVP), la trombosis venosa superficial (TVS, generalmente más benigna que la TVP) y la tromboembolia pulmonar (TEP)”, nos detalla el doctor Agustín Arroyo Bielsa, angiólogo y cirujano vascular del Hospital Universitario Vithas Madrid Arturo Soria.

“Hace ya muchos años Virchow determinó que la trombosis se puede producir por una alteración de alguno de los siguientes tres componentes: la capa interna que recubre las venas (disfunción endotelial), el flujo sanguíneo (estasis venosa) o la coagulación (hipercoagulabilidad o trombofilia)”, nos cuenta el especialista.

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Factores de riesgo

Le planteamos al doctor si hay determinados factores que pueden incrementar el riesgo de padecer este problema de salud. “El riesgo de ETEV aumenta con la edad de forma general. Y un antecedente de ETEV aumenta las posibilidades de padecer un segundo episodio”, nos cuenta. Pero matiza que, además, existen factores de riesgo más concretos. En principio todos aquellos relacionados con:

  • Lainmovilización o encamamiento prolongado (por ejemplo tras un ictus; aquí podemos incluir también los viajes largos, el famoso síndrome de la clase turista).
  • Cirugías recientes.
  • Traumatismos y fracturas.
  • Embarazo, terapia hormonal, y toma deanticonceptivos orales.
  • Cáncer.
  • Factores de riesgo genéticos; estados hereditarios de trombofilia que requieren de análisis genéticos para su detección.

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¿Cómo se manifiesta?

El especialista diferencia entre la trombosis venosa profunda y la superficial para detallar los síntomas que nos pueden alertar de la presencia de este problema de salud. Así, la TVP da un dolor agudo de la extremidad acompañándose de una hinchazón o edema, que dificulta la deambulación. Es muy característico que la extremidad adquiera un tinte azulado, debido a la estasis sanguínea. Mientras, la TVS suele dar un dolor más localizado en alguna parte de la pierna, con una zona de enrojecimiento e inflamación local.

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Posibles complicaciones

Estamos ante un problema de salud que requiere de valoración y atención médica, pues puede tener consecuencias de gravedad. Así, de forma aguda, la complicación más temible, y que puede ser mortal, es que parte de ese coágulo que se ha formado emigre y se aloje en el pulmón; es lo que se conoce como tromboembolismo pulmonar.

Mientras, el doctor nos cuenta que, de forma crónica, una extremidad que ha sufrido una TVP suele dejar una secuela, ya que, aunque el trombo desaparezca, las válvulas venosas suelen quedarse dañadas. “De manera que la vena de esa pierna tendrá cierta dificultad para cumplir su misión de drenaje de la sangre hacia el pulmón. Será fácil que tienda a hincharse la pierna con el ortostatismo. El edema crónico puede ir provocando una serie de cambios tróficos en la piel, hasta llegar a la complicación más preocupante que es la úlcera venosa. El conjunto de trastornos crónicos posteriores a una TVP se conoce como síndrome postrombótico”, comenta el doctor Arroyo Bielsa.

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Cómo debemos actuar ante una trombosis venosa

Una vez que el médico valora la situación y confirma el diagnóstico, el tratamiento es la anticoagulación, habitualmente temporal. “Se trata de medicación encaminada a hacer la sangre “menos espesa”. Para ello disponemos de las heparinas de bajo peso, del famoso sintrom, y desde hace unos años, de nuevos anticoagulantes, más cómodos, pero que no tienen incluida su financiación en el Sistema de Salud Pública en esta indicación. Otras medidas importantes son posturales y utilizar una media de compresión elástica para disminuir la hinchazón o edema”, concluye el especialista.

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