A partir de cierta edad, algunas personas antes y otras más tarde, empezamos a padecer algunos cambios, provocados principalmente por el sistema hormonal. Las hormonas son unas sustancias importantes y fundamentales en todos los procesos metabólicos de nuestro organismo, son vitales para el funcionamiento correcto de nuestro organismo.
Estas hormonas son segregadas en el organismo por diferentes glándulas. Son importantes al marcar los cambios de cada persona, con la edad, aumentan las cantidades de unas y otras.
Así, en el periodo de crecimiento, la somatropina (entre otras) nos hará crecer. En la pubertad, las hormonas de origen sexual están en plena efervescencia, en la juventud y en el periodo de fertilidad, también existe la implicación de muchas de ellas. Cuando llegamos a la menopausia, se deja de segregar unas hormonas y se segregan otras. Estas hormonas, están todas unidas y encadenadas, nos provocan los cambios físicos, pero también son culpables de muchos cambios emocionales.
Con la edad, las glándulas empiezan a volverse más “perezosas” y segregan menos cantidad de hormona, lo que hace que algunos procesos metabólicos también sean más lentos y es cuando empiezan estos cambios tan importantes. En la menopausia, pero ya en la pre-menopausia, se pueden empezar a notar los temidos sofocos, sudores nocturnos o mareos.Es cuando una hormona producida por la hipófisis disminuye su producción, se trata de la FSH o folículo estimulante, así los ovarios dejan a su vez de producir estrógenos y no maduran.
Lo principales cambios físicos y emocionales que se empiezan a notar, algunos que hemos de intentar prevenir, como son el:
– Aumento de la sequedad cutánea
– Pérdida de masa muscular y aumento de flacidez cutánea
– Aumento de la sequedad de la zona sexual
– Algunos síntomas de incontinencia urinaria
– Cambios de humor, trastornos depresivos, ansiedad
– Pérdida de calcio en los huesos
– Dificultad por el hígado de transformar las grasas, aumentar los niveles de colesterol, lo que puede derivar a problemas cardiovasculares
– Aumento de masa grasa, disminución del nivel basal, lo que dificulta adelgazar
Estos cambios así explicados, parece que asustan, como si de una enfermedad se tratara. Por suerte tenemos a nuestro alcance tanto los conocimientos como los medios necesarios para paliar estos síntomas y volver a alcanzar el equilibrio. De hecho en cada cambio en el vida de las personas hay desequilibrios. Así, los niños pequeños, algunas veces se sienten mucho más inquietos o los adolescentes tienen brotes de acné y importantísimos cambios de humor igualmente.
Me estoy centrando en las mujeres, ya que parece que nos preocupa más, pero los hombres también sufren cambios, como la caída de pelo, aumento de flacidez, pérdida de masa muscular, depósitos grasos abdominales, aumento de la fatiga y problemas de erección.
Fitoestrógenos
Como he comentado, estos problemas son debidos al parón ovárico. Los estrógenos dejan de producirse. Algunos médicos recetan la THS (terapia hormonal sustitutoria), se trata de suplementar con las hormonas que dejamos de producir vía externa, engañando en cierto modo el organismo y evitando estos efectos, aunque hasta hace poco temida por su supuesta relación con el cáncer de mama, ovarios y útero. Actualmente se está volviendo a dar ya que no se ha podido demostrar científicamente esta relación.
También se habla de la terapia hormonal bio-idéntica, son sustancias que tienen la misma composición y estructura química que las hormonas naturales, lo que no quiere decir que sean de origen biológico sino que son iguales a las biológicamente naturales e iguales. La industria farmacéutica hasta ahora esta utilizando las extraídas de los caballos. Las hormonas bioidénticas son, estrona, estriol, estradiol, progesterona, testosterona, dehidroepiandrosterona y pregnenolona.
Los fitoestrogenos son hormonas vegetales, son unos componentes que tienen una estructura similar a la de los estrógenos naturales, con una suave actividad, por lo que son útiles en estos momentos, ya que ocupan el espacio de los estrógenos naturales. Existen varias plantas que contienen estas isoflavonas, cereales, legumbres y hortalizas, aunque es la soja la principal fuente. Así, éstas tienen una acción parecida, evitando los efectos propios de la menopausia.
Para que el tratamiento sea lo más natural, es mejor repartir la toma en más de una vez, (en dos veces) así mantenemos los niveles hormonales naturales. La soja, al ocupar el espacio de los estrógenos naturales ayuda a evitar igualmente los cambios de humor, es normal que estemos más sensibles y tengamos las reacciones rápidas y exageradas, sin darnos cuenta.
Una vez conocidas las bases de esto, voy a ser más concreta y hacer mis recomendaciones.
Mis recomendaciones prácticas
Algunos alimentos es mejor evitarlos y otros añadirlos. Evitar los alimentos demasiado grasos y muy purificados, los azúcares demasiado refinados (demasiado aporte calórico), exceso de sal (retención de líquidos), bebidas alcohólicas (su consumo se reduce en un aporte de grasas en el organismo). Pero es importante aumentar en la dieta alimentos que contengan soja, aumentar las porciones de verduras y frutas, con elevada cantidad de vitamina C, muy importante son las crucíferas con alto contenido en índoles (se le han atribuido propiedades preventivas del cáncer de mama). Aumentar el contenido proteico de los alimentos, gracias a los pescados sobre todo, evitando las partes más grasas de estos alimentos. Y pescado azul con alto contenido en omega 3, que aportara la cantidad de vitamina E necesaria. El calcio y todos los alimentos que le contienen como la leche, quesos u otro tipo de lácteos, mejor como desnatados.
Las cremas a utilizar han de ser más ricas y cremosas, aunque no hemos de ir con la cara demasiado aceitosa. Por lo que mi consejo es, durante la noche, utilizar una crema reparadora más nutritiva y, durante el día, una con filtro solar pero algo más ligera o simplemente un sérum. El filtro solar es importante, ya que si no se toma ningún tipo de hormona la producción de melanina es mas irregular por lo que pueden aparecer manchas. Y si se esta tomando la THS, también puede provocar la aparición de las mismas.
Personalmente, me gusta realizar un peeling dos veces a la semana como mínimo, ya que el proceso de regeneración cutánea esta disminuido y así estimularemos la piel como la producción de colágeno. Como la pérdida muscular va ligada a un aumento de flacidez de la piel, recomiendo que las vitaminas que tome lleven extra de aminoácidos, ya que ayudaran a incrementar la cantidad proteica.
Para evitar la descalcificación, un suplemento con calcio, magnesio y silicio, si puede ser de coral, el cual es mucho más puro. El silicio puede encontrarlo en forma gel liquida o en capsulas. Para problemas articulares, lo mejor es la glucosamina, el condroitin sulfato juntamente con el metisulfanil metano, algunas personas toman el cartílago de tiburón que en definitiva es un suplemento rico en estos elementos. Tomar colágeno o ácido hialurónico también ayuda tanto a la piel como a las articulaciones y los huesos.
Cuando queremos adelgazar y no hay manera, primero deberíamos hacernos una analítica para saber si estamos segregando suficiente cantidad de hormona tiroidea, una vez descartado esto, preguntarnos si hacemos suficiente ejercicio. ya que la disminución de movimiento nos hará acumular reservas. Cuesta más adelgazar porque se queman menos calorías, con la edad hemos de comer menos porque consumimos menos.
Para mejorar que se gasten más calorías, hay algún suplemento nutricional que ayuda, normalmente llevan plantas como drenantes, cafeína, teofilinas entre otros, en la farmacia le aconsejaran.
Se han de controlar algunas dietas, ya que el aumento de grasa puede hacer aumentar los niveles de colesterol debido a que la grasa se descontrola. En cierto modo es por ello que los depósitos como el molesto alrededor de la barriga, en las caderas y hasta en la espalda, funcionan muy bien para estos casos los envoltorios de algas.