Hay algunos ingredientes en cosmética que son populares por atenuar las marcas del envejecimiento. Uno de ellos es el retinol, un derivado de la vitamina A, y que empezó a emplearse en dermatología para el tratamiento del acné. Su función es mejorar el proceso de renovación de la piel y activar la síntesis de colágeno. Todo ello permite devolver parte de la juventud perdida a tu piel. Hablamos de belleza, sí, ¿pero cómo afecta el retinol a la salud de la piel?
Es un principio activo seguro, aunque no todas las pieles responden igual y su aplicación no puede hacerse a la ligera. De hecho, Reme Navarro, farmacéutica de MiFarma by Atida y creadora de Skinfy, recuerda que cada piel es única y que cada una de nosotras debemos encontrar las rutinas más apropiadas para nuestro tipo de piel y no dañarla.
Y es que un uso inapropiado de retinol podría causar irritación, enrojecimiento, descamación y sequedad extrema que podría durar incluso semanas. Por ello, Reme Navarro nos ofrece estos consejos para un uso seguro del retinol.
Espera a utilizarlo en otoño
El retinol es uno de los activos con los que debemos tener cuidado en verano. Este ingrediente es la forma pura de la vitamina A y se encarga de acelerar la renovación celular y unificar el tono de la piel. “Si bien es cierto que podemos seguir utilizándolo durante estos meses, tenemos que tener mucho cuidado con él y aplicarlo sólo por la noche, en días alternos y en concentraciones más bajas que en los períodos con menos sol”, afirma Andrea Ortiz, farmacéutica y nutricionista experta en cosmética y dermofarmacia de Maan24.es y advierte “si nunca has utilizado productos con retinol, evita empezar durante el verano, ya que inicialmente puede producir descamaciones e irritación”.
Siempre de forma progresiva
El retinol no mejorará tu piel en un día, ni si te aplicas una gran cantidad. De hecho, al tratarse de un principio activo cuya acción es muy potente, puede causar daños en tu piel. Por ello, los expertos te recomiendan utilizarlo de forma progresiva. "Una de las claves es comenzar con una concentración entre el 0,05% y el 0,20% de retinol puro", indica la farmacéutica Reme Navarro.
Opta por fórmulas respetuosas con tu piel
El retinol puede fabricarse de muchas formas. Pero una de las formulaciones más respetuosas con la piel es aquella en la que el componente principal es la vitamina A en forma de retinil y cuya concentración es del 0,3%. Esta es la composición más apta para pieles principiantes y que no dañará tu piel.
Aplícalo en días alternos
Para evitar reacciones alérgicas u otros problemas para la salud de tu piel, no te apliques el retinol todos los días. Hazlo, preferentemente, por la noche y en días alternos durante las dos primeras semanas. De esta manera, sabrás si tu piel tolera bien este ingrediente.
Protégete del sol
La farmacéutica Rema Navarro recuerda que es preferible iniciarse en el uso del retinol durante una época del año donde el sol no sea muy fuerte. De ahí que aconseje incorporarlo en las rutinas de noche, ya que actúa renovando las capas de la piel. En caso de que lo utilices durante el día, será obligatorio el uso de protector solar porque la piel está más expuesta.
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Aprobación de un profesional sanitario
Cuando tu piel es madura, lo ideal es que consultes con un dermatólogo para que te indique qué cuidados necesitas para atenuar las marcas del envejecimiento. En el caso del uso de cremas con retinol, por ejemplo, usa siempre, como decíamos, la concentración más baja. Y no compres productos con una concentración mayor sin la aprobación de un profesional.
No necesitas mucha cantidad
El tamaño de un guisante es lo correcto y extenderlo por toda la cara, no más cantidad hace que funcione mejor o más rápido, podríamos además dañar la barrera protectora de la piel y empezarían a actuar bacterias y microorganismos dañinos que penetren en la epidermis, nos cuentan desde Nezeni Cosmetics.
Para si notas mucha irritación
Cada piel es un mundo. La clave es encontrar la cantidad necesaria para disfrutar de sus efectos sin irritar; por tanto, si se nota que está demasiado sensible, se puede parar y esperar unos días. Al retomarlo, debe hacerse de nuevo con la cantidad más baja, para volver a acostumbrarse. En cualquier caso, es importante también consultar a un dermatólogo o a un farmacéutico especializado en la piel, insiste Clara Motos, farmacéutica de DosFarma.