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Presente en nuestras cocinas, sin duda el laurel se gana por méritos propios ser un buen aliado de nuestros platos. Y es que es una planta medicinal muy conocida en la gastronomía por su sabor y aroma característico, siendo muy utilizada para darle sabor a las carnes, pescados y sopas. Llamado, tal y como nos confirma la farmacéutica Mar Sieira, Laurus nobilis spp, es un árbol de pequeño tamaño, de hasta 15 m y dioico, es decir, tiene un pie de planta masculino y otro femenino. Sus hojas, que son perennes y bastante aromáticas, son redondas y verdes de jóvenes, pero a medida que envejecen se tornan de un color más oscuro y toman una forma característica terminada en punta. El fruto es una baya de forma ovoide-globosa de entre 10 y 15 mm, que toma un color negro en la madurez.
Sabemos que sus usos ceremoniales, medicinales o culinarios aparecen referenciados en numerosos escritos de médicos y farmacólogos helenos. Tanto es así que los emperadores romanos son representados con sus coronas laureadas como símbolo de victoria y poder, manteniéndose además en esta época la creencia en sus atribuciones medicinales, mágicas y gastronómicas.
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Apunta sus beneficios
Centrándonos en sus usos medicinales, podemos afirmar que se emplean sus hojas y especialmente los frutos, que son ricos en cineol, linalol, eugenol y terpineol, además de glicéridos como ácido oleico, linoleico, palmítico y láurico.
En medicina tradicional, Mar Sieira nos explica que el laurel presenta las siguientes propiedades:
- Puede ayudar a aliviar los cólicos, problemas estomacales y a eliminar los gases intestinales, combatiendo así la aerofagia.
- Es analgésico.
- Es relajante y puede favorecer el sueño, calmar el estrés y aliviar el síndrome premenstrual.
- El laurel es astringente y, por tanto, excelente para la diarrea.
- Puede ayudar con los dolores reumáticos y articulares, y para los enfermos de artritis.
- Puede ayudar en los cálculos renales y controlar la presión arterial.
- Combate el mal aliento.
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Cómo sacarle partido
La experta nos detalla las formas más útiles para aprovechar sus beneficios.
-Así, su aceite es antiparasitario y antirreumático cuando se aplica por vía tópica, "pero como siempre, ha de vehiculizarse en otro aceite para disminuir su capacidad de irritación sobre la piel especialmente en personas que tengan alguna hipersensibilidad al laurel”, nos detalla.
-En forma de infusión también puede ser utilizada en el tratamiento de problemas digestivos como gases, dolor estomacal y flatulencias. Para prepararlo, hay que colocar las hojas de laurel en el agua hirviendo y dejar reposar alrededor de 10 minutos y beberlo después. Se puede tomar 3-4 veces al día.
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Ten cuidado en estos casos
Eso sí, hay que tener ciertas precauciones con esta planta tan utilizada:
-El consumo de las hojas de laurel no es recomendable en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
-En cantidades excesivas, el laurel puede causar somnolencia, puesto que esta planta posee efecto calmante y es capaz de desacelerar el sistema nervioso, además de causar alteraciones gastrointestinales, cólicos abdominales y dolor de cabeza cuando es consumida en grandes cantidades.
-Su consumo excesivo también puede disminuir mucho los niveles de azúcar en la sangre, causando hipoglucemia. Por esta causa, es importante consultar con tu médico o farmacéutico antes de comenzar a utilizarlo, especialmente si crees que puedes sufrir de algún desarreglo metabólico.
