Skip to main contentSkip to footer
tronco ejercicio© En suelo firme

¿Sabías que con este accesorio puedes conseguir que mejore tu postura?

Consejos útiles para sacar partido al tronco de propiocepción en tu rutina de ejercicios


Actualizado 9 de junio de 2022 - 11:02 CEST

Es posible que hayas visto en alguna ocasión recomendaciones de hacer ejercicios sobre un tronco de madera curvado en uno de sus lados, es el llamado tronco de propiocepción. Pero, ¿qué es y para qué sirve? “Se trata de una base inestable de madera, un medio cilindro llamado tronco de propiocepción o woodroller, que genera una presión en la planta de los pies la cual desencadena distintos ajustes corporales que nos benefician en el entrenamiento del complejo abdominopelviperineal. Dicho de otra forma, es un proceso de reprogramación o reorganización postural que tiene efectos positivos para el abdomen, la respiración, el periné y, en general, para la postura gracias al desequilibrio generado por la superficie inestable”, nos comenta Laura Rojas, fisioterapeuta especializada en suelo pélvico y obstetricia de En Suelo Firme, con quien hemos hablado sobre las bondades de este accesorio.

Lee también: 7 consejos para mejorar la postura y la ergonomía

¿Quién debe usarlo?

Le planteamos para quién está recomendado y la experta lo tiene claro: “Acabaríamos antes si la pregunta fuera, ¿para quién no está recomendado?”, nos comenta. Y es que, en su opinión y basándose en su experiencia, el tronco es una herramienta muy útil en la mayoría de los casos. “Para todas aquellas personas que quieran mejorar su postura, despertar su conciencia corporal, su propiocepción (el sentido que informa al organismo de la posición de las partes corporales), normalizar hipertonías e hipotonías del suelo pélvico, liberar su diafragma para una respiración óptima, tonificar su musculatura abdominal profunda (el famoso core), despertar los reflejos perineales, reeducar la gestión de las presiones intrabdominales”, nos detalla Laura Rojas.

Y nos cuenta que se puede utilizar durante el embarazo (si no hay contraindicación para el ejercicio físico), también en el posparto (una vez valorada por un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico a las 6-8 semanas tras dar a luz) y en cualquier momento de la vida para el mantenimiento de la salud pelviperineal.

Lee también: Los cambios que sufren las mujeres en el suelo pélvico tras el parto

¿Cómo podemos sacarle partido?

Cuando le hacemos esta pregunta a la fisioterapeuta nos da una respuesta directa: “Fácil: siendo regulares en el entrenamiento, es decir, subiendo al tronco a diario. Lo ideal es aprender a utilizar la herramienta junto a un profesional especializado, que pueda dar las indicaciones específicas a las particularidades posturales, respiratorias y perineales de cada persona y adaptar el entrenamiento en función de sus necesidades. Realmente es una práctica sencilla, en general las pacientes necesitan poco tiempo para aprender a utilizar correctamente su tronco, después lo que hace falta es ser constantes en la práctica y darle el tiempo necesario a cada persona para sentir los cambios derivados del entrenamiento regular”.

Lee también: ¿Quieres mejorar tu equilibrio? ¡Apunta estos ejercicios!

Inclúyelo en tu rutina

Es una buena idea incluirlo, por lo tanto, en nuestra rutina diaria de ejercicio, en opinión de la experta. “Si realizamos deportes de impacto e hiperpresivos que puedan ser potencialmente lesivos para el suelo pélvico, el tronco puede practicarse antes y/o después de esa actividad, para normalizar el tono muscular, reajustar la postura y compensar la hiperpresión. Si no practicamos ese tipo de deportes también será interesante incluirla en nuestra rutina diaria, por los múltiples beneficios que tiene”, sugiere. ¿Existe alguna contraindicación para utilizarlo? La experta nos cuenta que en lesiones de tobillo o rodilla es necesario consultar antes con un especialista. Si se sufre alguna alteración particular del equilibrio, también sería recomendable consultar previamente a tu fisioterapeuta.

Nos planteamos una última duda, cuánto tiempo y cuántas veces por semana puede realizarse. “Se puede realizar a diario, en torno a 20 minutos por cada lado, redondo (plantas de los pies apoyan sobre la parte curva) y surf (plantas de los pies en contacto con la parte plana)”, concluye.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.