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medir azucar© Adobe Stock

Ojo a estas señales: pueden indicar que tus niveles de azúcar están altos

Conviene tener controladas estas cifras, pues si se elevan puedes tener importantes consecuencias para la salud


Actualizado 17 de mayo de 2022 - 14:06 CEST

Sabes que debes mantener tus niveles de glucosa bajo control para evitar problemas, como puede ser la aparición de una diabetes tipo II, una enfermedad cuyas cifras van al alza. Pero, ¿nos puede avisar nuestro cuerpo de que tenemos los niveles de azúcar altos? “En general sí, aunque depende del nivel de glucosa en sangre (glucemia) o dicho de otro modo del grado de elevación de glucosa en sangre”, nos comenta el doctor Guillermo Martínez, especialista en Endocrinología y Nutrición en el Centro Blue Healthcare, en Madrid, centro miembro de Top Doctors.

¿Cuáles son las señales más habituales que nos pueden alertar de ello? El especialista detalla que si la glucemia está por encima de 200-240 mg/dl puede aparecer alguno de los siguientes síntomas:

  • Sed excesiva.
  • Aumento de la frecuencia y volumen de orina.
  • Apetito desaforado a pesar de lo cual se pierde peso.

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mujer bebiendo agua© Adobe Stock

 

Efectos de tener la glucemia alta

No hay duda de que esto es algo que tenemos que controlar, pues hay consecuencias importantes que aparecen por el hecho de tener elevados los niveles de azúcar. “Cuando los niveles de glucosa están muy elevados (por ejemplo, 250-300 mg/dl) se corre el riesgo de sufrir una descompensación aguda de la diabetes, lo que antes se llamaba ‘coma diabético’. Actualmente, es raro que se llegue a estos extremos, pero puede aparecer un cuadro llamado cetoacidosis diabética, que obliga a un tratamiento urgente con insulina y el paciente debe hospitalizarse para su tratamiento”, detalla el endocrino. Y añade un dato importante: “Más a largo plazo, pueden aparecer daños que afectan sobre todo a las arterias de pequeño calibre que están en la retina y en el riñón, produciendo retinopatía diabética que puede degenerar en ceguera y nefropatía diabética, que puede degenerar en enfermedad renal crónica y necesidad de diálisis y trasplante de riñón”.

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Factores de riesgo

Nos planteamos si hay personas con más riesgo de padecer este problema. “Las personas con obesidad tienen más riesgo de sufrir diabetes mellitus. También las personas que están en tratamiento crónico con cortisona a dosis altas, así como las personas que tienen antecedentes familiares de diabetes, especialmente en el caso de la Diabetes Mellitus de Tipo 2”, nos comenta el doctor.

Y concluimos con una pregunta fundamental: ¿Cuáles son las claves para mantener los niveles de azúcar bajo control? El doctor lo tiene claro: “Los tres elementos esenciales del tratamiento son la dieta, la actividad física y el tratamiento farmacológico. Las personas que tienen obesidad deben intentar normalizar el peso cuanto antes. Los fármacos utilizados son variados desde los que se toman por vía oral (como la metformina), hasta los que se deben inyectar por el propio paciente (como la insulina o los análogos del GLP-1). El control de la glucosa en sangre, bien mediante tiras de glucemia capilar o con los dispositivos más modernos de monitorización de la glucemia intersticial (que no requieren pinchazo en el dedo) es aconsejable, y en los pacientes que necesitan insulina para un control adecuado de su enfermedad, imprescindible”, concluye.