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Estamos ante una planta medicinal, la Uña de gato (también llamada Uncaria tomentosa), que tiene su origen en Perú, país en el que se ha utilizado de forma tradicional por los pueblos indígenas, que consumen como refresco el líquido que emana de su tallo fresco. “Como una parra tiene unas espinas grandes encorvadas que crecen a lo largo de esta parra lo que le da el nombre tan característico”, nos cuenta la farmacéutica Meritxell Martí, alma mater de Farmacia Meritxell en Andorra.
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¿Cuáles son sus propiedades?
Tal y como nos cuenta la farmacéutica Luz García Toro, directora de comunicación de Arkopharma, destaca su efecto antiinflamatorio, especialmente interesante en problemas de las articulaciones. “Destaca también un efecto antioxidante que está siendo hoy objeto de estudio y apunta resultados esperanzadores en la prevención de los riesgos cardiovasculares y enfermedades degenerativas”, nos detalla. Y hace mención a que la ESCOP (European Scientific Cooperative On Phytotherapy) publicó recientemente la monografía de esta planta resumiendo los estudios científicos publicados y los datos sobre la eficacia y la seguridad de la corteza de uña de gato en casos de procesos inflamatorios leves.
“Dicha monografía confirma su eficacia en caso de inflamación, pero son objeto de estudio ahora mismo muchas más propiedades de esta planta que están pendientes de confirmar. Entre ellas, destacan las propiedades citostáticas (que pueden ser interesantes en los tratamientos anti cáncer), antivirales, inmunoestimulantes y antirradicales libres”, detalla.
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© Adobe StockAliada de tus defensas
"Esta planta también contribuye a aumentar las defensas del organismo, por su contenido en un alcaloide llamado isopteropodina y el ácido clorogénico, que potencian la acción del sistema inmunitario del organismo, mejorando nuestras defensas", nos cuenta por su parte la farmacéutica Mar Sieira. ¿Cómo se puede consumir? La puedes ingerir en forma de cápsulas preparadas, o bien en infusión, nos detalla.
¿Está contraindicada en algún caso?
Por su contenido en taninos y principios amargos, puede producir molestias gástricas a las personas con especial sensibilidad. “Por ello, se recomienda su consumo en forma de cápsulas o comprimidos y tomarlos después de las comidas (siempre con el estómago lleno)”, nos cuenta Luz García Toro, que añade que es importante siempre seguir las recomendaciones del farmacéutico y, por supuesto, recurrir siempre a preparados de uña de gato de venta en farmacias. “Solo así podemos garantizar la seguridad y eficacia del preparado”, apunta. Además, es importante constatar que, por ahora, no hay datos sobre la seguridad de su uso en momentos como el embarazo y la lactancia, por lo que, como medida de precaución, no se recomienda su uso en estos casos sin control médico. Y aunque no se han descrito problemas, se desaconseja su uso en personas que han recibido un trasplante y están tomando medicamentos inmunosupresores.
