"Un chequeo médico es una valoración de estado de salud de una persona que, o bien no tiene ninguna enfermedad o las que padece las tiene bien controladas", nos explica el Dr. Manuel Landecho, especialista en Medicina Interna, de la Unidad de chequeos médicos de la Clínica Universidad de Navarra.
El chequeo médico es un aspecto fundamental de la medicina preventiva y su objetivo es detectar de forma temprana cualquier enfermedad, principalmente, las oncológicas y cardiovasculares, antes de que se produzca el daño.
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¿Cuándo hay que empezar a hacerse un chequeo?
Es aconsejable que una persona sana se realice un chequeo médico a partir de los 40-45. "Es mucho más fácil mantener la salud que recuperarla", asegura el internista. Además, continúa, casi todos enfermamos por patologías 'predecibles', asociadas, de alguna manera, a nuestro estilo de vida, a los antecedentes personales o familiares. Como son predecibles, algunas veces son prevenibles. O, en ocasiones, es mejor tratarlas cuanto antes para prevenir las secuelas", señala.
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¿Qué pruebas se realizan en un chequeo médico?
Dependerá del tipo de paciente y de la edad, así como de sus antecedentes familiares y de sus hábitos, por ejemplo, si se es consumidor de alcohol o se fuma. En general, las pruebas más habituales, como nos cuenta el especialista en chequeos médicos de la CUN son:
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Anamnesis: consiste en una entrevista que el médico realiza para conocer la historia clínica del paciente.
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Una exploración física
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Medición de la tensión arterial.
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Analítica completa de sangre y orina.
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Pruebas cardiológicas en función de los antecedentes del paciente (se realizará una prueba de esfuerzo o una valoración anatómica).
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Prueba de imagen abdominal (el tipo de prueba dependerá de la edad, el estado de salud y los antecedentes del paciente).
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Si el paciente ha fumado mucho, se le puede realizar una radiografía de tórax o un TAC si el especialista lo considera oportuno.
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Algunos centros incluyen otras pruebas encaminadas a detectar del aparato respiratorio como una espirometría.
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A las mujeres mayores de 45 años se les realiza una mamografía.
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A partir de los 50 es conveniente realizarse una colonoscopia.
¿Qué pruebas debe realizarse una mujer a lo largo de la vida?
Como indica el especialista en Medicina Interna, el Dr. Landecho, "pruebas 'necesarias' solo son aquellas que evalúan los síntomas del paciente". Ahora bien, hay pruebas que son recomendables y son aquellas que pueden prevenir enfermedades.
Cuando empieza la vida sexual de la mujer conviene hacerse revisiones ginecológicas periódicas (una cada año) con una prueba denominada Papanicolau o citología vaginal con tinción, que se practica durante el examen pélvico y cuya finalidad es la recogida de células presentes en la superficie del cérvix y del canal cervical para su posterior análisis. Esta prueba permitirá detectar desde una Infección de Transmisión Sexual (ITS) hasta un cáncer. Es aconsejable que se realice, asimismo, un examen pélvico exhaustivo que incluya una ecografía vaginal y abdominal.
Durante el embarazo, se deben hacer las propias de la gestación.
Entre los 40-45 años -35 si tiene antecedentes familiares- se debe tener una mamografía de base para poder comparar y al cumplir los 45 esta prueba debe ser anual. Consiste en una imagen de rayos X de las mamas que se utiliza para detectar lesiones malignas o benignas.
Otras pruebas para la mujer
El Dr. Landecho también indica que unos 5 años después de la menopausia, y también dependiendo de los factores de riesgo de cada mujer, es recomendable la densitometría. Es una exploración que utiliza dosis bajas de rayos-X que pasan por todo el cuerpo y toman una radiografía para determinar la masa ósea. Su finalidad es detectar o prevenir la osteoporosis, responsable directa de las fracturas óseas.
Por último, insiste en que no se deben descuidar los controles de otras partes del cuerpo, no solo del aparato reproductor. Y recuerda las pruebas que ha mencionado anteriormente: pruebas de imagen de pulmón, colonoscopia, análisis, etc. "A partir de los 60 años el riesgo cardiovascular de una mujer se equipara al del hombre".
¿Qué pruebas son necesarias en un hombre?
El Dr. Manuel Landecho comenta que en los varones no están establecidas las pruebas para detectar las Infecciones de Transmisión Sexual.
Lo recomendable en el hombre es la valoración de los factores de riesgo cardiovascular a partir de los 40 años.
Los mayores de 45 años deben realizarse una detección de PSA -Antígeno Prostático Específico (PSA)- Se trata de una glicoproteína producida exclusivamente por la glándula prostática. Todas las enfermedades prostáticas tanto benignas como malignas pueden presentar elevados los niveles de PSA. Asimismo, conviene realizarse un examen rectal digital. En él el médico inserta un dedo enguantado, lubricado, en el recto y siente la próstata a través de la pared del recto para buscar áreas endurecidas o abultadas. Se realiza para la detección del cáncer de próstata.
- Cáncer de próstata: la importancia de un diagnóstico precoz
Atenta a los síntomas
Hay enfermedades que no se detectan durante las exploraciones y pueden dar la cara en estadios más avanzados por sus síntomas. Por eso es importante que, además de las revisiones periódicas, estemos alerta aunque sin obsesionarse, de posibles síntomas que puedan indicar que algo no va bien como por ejemplo, una pérdida muy significativa de apetito y de peso, una fatiga que no cesa, un dolor que persiste, un dolor agudo en el pecho que se irradia al brazo izquierdo, dificultad al respirar o al ingerir alimentos, cualquier rastro de sangre en las heces persistente que no se asocie a hemorroides, pérdida de visión repentina, torpeza significativa y repentina en las extremidades...