Skip to main contentSkip to footer
mujer tomando infusion© Adobe Stock

¿Cuáles son los errores más comunes cuando preparas una infusión con plantas medicinales?

Si los cometes, puedes no disfrutar de buena parte de sus beneficiosas propiedades


Actualizado 23 de febrero de 2022 - 11:07 CET

Si sueles recurrir a las infusiones de plantas, seguro que sabes que te pueden ser muy útiles para mejorar los síntomas de algunos problemas de salud comunes. Manzanilla, té, menta… “Las tisanas o las infusiones son bebidas preparadas que tomamos por su efecto beneficioso para la salud, usando hierbas, especias, plantas o partes de plantas, que se han añadido en agua hirviendo o se han preparado en cocción. Pueden ser de una sola o de variedad de plantas”, nos cuenta la farmacéutica Meritxell Martí, con quien hemos aprovechado para repasar los que son los errores más comunes que podemos tener a la hora de preparar una infusión. Algunos de ellos son más habituales de lo que pensamos, por lo que conviene tenerlos presentes. Toma nota.

Lee también: Estas son las infusiones que te ayudan a cuidar tu piel

  • Cocer las plantas antes de infusionarlas. No es lo mismo una decocción que una infusión. En el primer caso se cuecen las plantas, y con ello extraemos los activos, generalmente se ponen en agua fría y las plantas a cocer de 10 a 15 minutos y luego colar. Pero si vamos a hacer una infusión, lo que hay que hacer es ponerlas en agua hirviendo, dejarlas reposar o infusionar. Es necesario colarlas y es importante saber qué planta vamos a tomar para saber cómo hay que prepararla si cocción o infusión.
  • Dejarlas poco rato en agua hirviendo. Hay que dejarlas el tiempo suficiente, generalmente un mínimo de 4 minutos aproximadamente, pues con ello conseguimos que se extraigan los ingredientes efectivos. Si es poco tiempo, no se absorbe todo, se ve porque la tisana tiene un color mucho más tenue.

Lee también: Las 9 plantas medicinales en las que más confían las farmacéuticas

mujer preparando una infusión© Adobe Stock
  • Prepararlas con agua fría o templada. Si lo hacemos así, tampoco se liberarán los activos, solo se mojarán las plantas o hierbas. Para su preparación correcta, hay que añadir los extractos herbáceos en agua hirviendo o casi, de 90º a 100ºC.4. Dejarlas demasiado rato hasta enfriar el agua. Si las dejamos demasiado tiempo, el efecto es sobre dosificado.
  • Mezclar tisanas incompatibles. No es buena idea mezclar hierbas con efectos incompatibles, por ejemplo, una planta energizante con una relajante, por ejemplo mate o ginseng con melisa o pasiflora.
  • La temperatura de la tisana también hay que tenerla en cuenta, pues están pensadas no solo para tomar la infusión, sino también por el efecto de una bebida templada o ligeramente caliente, que es reconfortante.
  • No se deben recalentar, ya que se pierden los efectos beneficiosos. Es preferible volver a prepararla. Cuando la tisana lleva mucho tiempo preparada, los activos suelen depositarse en el fondo y muchas veces hacen poso.

Lee también: Jengibre, té verde... Sabemos cuáles son las infusiones más saludables

preparar una infusión© Adobe Stock
  • Añadir demasiada cantidad de hierbas o plantas. Algunas personas creen que es más beneficioso cargar la tisana. Sin embargo, puede ser hasta perjudicial, pues si las plantas tienen un efecto, se podría sobredosificar y acabar y siendo dañino para la salud. Es por ello siempre es preferible consultar al experto si compras la planta a granel o seguir las instrucciones del fabricante si ya es una tisana en bolsita medida.
  • Creer en la inocuidad de las tisanas y tomarlas en algunos momentos como pueden ser el embarazo, la lactancia o dársela a niños, sin pensar que pueden ser tanto o más activas que algún fármaco, por lo que no deberíamos tomarlas sin cuidado. Algunas pueden incluir cafeína en su composición o algunas plantas que de por sí ya son incompatibles en el embarazo, como podría ser el perejil.
  • Añadir demasiado azúcar en la tisana. En lugar de ser sano, se torna un vaso rico en calorías, y si lo tomamos por la noche, puede hacer subir el azúcar sanguíneo, y hacernos subir de peso. Una alternativa para endulzar es añadir un poco de miel.

Lee también: ¿Qué señales nos lanza nuestro cuerpo para decirnos que tomamos demasiado azúcar?

infusión© Adobe Stock
  • Añadir leche en las tisanas. Si se quiere perder peso, puede añadir calorías sin que nos demos cuenta. En opinión de la experta, no tiene mucho sentido, es simplemente una cuestión de sabor, no de beneficio de la tisana.
  • Preparar las infusiones por la noche para ir a dormir. Beber mucho antes de acostarnos obligará a que nos tengamos que levantar durante la noche para ir al baño, ya que las infusiones van a estimular la diuresis. Aunque solo sea por el llenado de la vejiga urinaria, es preferible tomarla como mínimo una hora y media antes de acostarse. Si esa tisana era relajante o para estimular el sueño, no va a conseguir ese efecto si se toma justo al acostarse.