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¿Por qué me duele la tripa? Sin duda, ya el título del último libro de Ángela Quintas es toda una declaración de intenciones. Y es que todos, en alguna ocasión, hemos tenido problemas digestivos o dudas sobre qué dieta es la más adecuada. Muchas preguntas que encuentran respuesta en el nuevo libro la experta en Nutrición, publicado por Planeta, con el que pretende resolver, de forma sencilla, muchas dudas relacionadas con la alimentación y con la salud. Nos ayuda a entender qué es la microbiota, cómo actúan las bacterias, qué alimentos te sientan bien y por qué, cómo combatir el colon irritable o la hernia de hiato, qué debes saber de los probióticos antes de usarlos o qué platos te ayudan a adelgazar sin pasar hambre. Y sobre todo, tiene clara una premisa: “Si el malestar digestivo es una constante en tu vida, creo que ha llegado el momento de ponerle remedio”. La autora se basa en su propia experiencia en consulta. “A menudo me encuentro en la consulta con muchísimas personas a las que les cuesta dar con la solución porque no han logrado encontrar la causa de su problema. Dolencias que persisten, pacientes que lo han probado todo y siguen sin saber qué o cómo comer para mejorar”, asegura licenciada en Ciencias Químicas y máster en Dietética y Nutrición Humana.
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Solo leyendo el título del libro, seguro que hay muchas personas que se sienten tentadas de adquirirlo, porque es un problema muy habitual. ¿Podemos averiguar las razones por las que nos duele la tripa en su libro?
Sí, lo que planteo en el libro es un método de reparación intestinal donde la parte más importante es diagnosticar el problema y ver si te sientes identificada con los síntomas de alguna de las patologías. Si es así, podrás llegar a la conclusión de porqué te duele la tripa.
¿Por qué piensa que cada vez hay más personas con este síntoma, el dolor de tripa?
Cada vez tenemos más intolerancias, consumimos más productos ultraprocesados, antibióticos, es decir, que no tenemos en cuenta nuestra microbiota.
¿Cuáles son las razones o las causas más habituales con las que se encuentra, según su experiencia, como responsables de esos dolores de tripa?
Casi siempre suele ser por una disbiosis, producida por una alimentación deficiente o con exceso de productos poco saludables, antibióticos…
Hay personas que, además, somatizan sus problemas, y cuando tienen un momento complicado, sienten que les duele la tripa, ¿es esto normal?
El 80% de la serotonina se produce en nuestro intestino y nuestro intestino es nuestro segundo cerebro, no hay que olvidar que tenemos tantas neuronas como las que podemos encontrar en el cerebro de un perro. Es normal que cuando estamos nerviosos produzcamos alteraciones en nuestra microbiota. El estrés es una de las primeras causas que genera esas alteraciones.
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¿Piensa que somos cada vez más conscientes de la importancia que tiene la microbiota en nuestra salud?
Sí, hasta hace pocos años no se conocía y no se le daba ninguna importancia; el hecho de saber que en nuestro intestino conviven distintos tipos de bacterias ya se nos hacía un tanto extraño. Ahora ya conocemos la importancia que tiene tener una microbiota sana, para no solo no tener dolores ni molestias, sino que nos haga sentirnos mejor.
¿Por qué hasta ahora era un concepto que ni siquiera habíamos escuchado y cada vez cobra más relevancia?
Cada día se publican más estudios en los que se está viendo que en muchas enfermedades como puede ser la esclerosis múltiple, el Alzheimer e incluso en la depresión existe una alteración en la microbiota. Cada vez hay más gente con intolerancias, alergias, sintomatologías relacionadas con el aparato digestivo.
Habla de que tenemos que 'mimar' a las bacterias de nuestra flora intestinal, ¿cómo debemos hacerlo?
Las bacterias que forman parte de la microbiota son tan imprescindibles para nuestro organismo que sin ellas no podríamos vivir, así que desempeñan una labor acorde con su importancia.
-Equilibra las funciones digestivas de nuestro cuerpo.
-Consigue que el sistema inmunitario funcione correctamente.
-Protege nuestro organismo de los gérmenes patógenos.
-Contribuye al desarrollo de la mucosa intestinal.
-Colabora en la síntesis de sustancias fundamentales.
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Hay personas que se acostumbran a vivir con molestias estomacales, ¿es un error hacerlo?
Claro que sí, ¿por qué vamos a vivir con dolor si tiene solución? El dolor no es un estado natural del cuerpo, sentirse bien sí lo es; por lo tanto, hay que buscar la manera de llegar a ese bienestar.
Tal vez se encuentran con que el diagnóstico del problema no es siempre una labor sencilla, ¿no es así? ¿Es normal que se demore tanto el diagnóstico?
La verdad es que son varias cosas; primero se demora el diagnóstico. Una vez diagnosticado, puede ser por ejemplo intolerancia a la fructosa, suelen dar al paciente una lista de alimentos que no puede tomar, pero no le dicen qué tienen que comer o cómo y cuándo tienen que comerlo. Lo que ocurre es que hay mucha gente que, o bien abandona, o hacen, a su manera, una dieta que conlleva a un déficit de nutrientes.
La inflamación abdominal es uno de los problemas más habituales a los que se enfrentan muchas personas, ¿tiene fácil solución?
Bien, lo primero que hay que ver es cuál es la causa de esa inflamación intestinal. Si la causa es por una disbiosis, por una alteración en la microbiota, lo que hay que hacer es analizar el problema, cuales son los síntomas, hacer un cambio en la dieta y ayudar con prebióticos y probióticos
¿Hay personas que pueden llegar, incluso, a temer el momento de la comida, pues comer significa hincharse?
SÍ, cuando tenemos una alteración en la microbiota y hay una disbiosis muy fuerte puede ser que aparezcan gases, dolor abdominal, malestar, y nos da la sensación de que no podemos comer nada, que todo nos sienta mal y nos hinchamos como globos. Si el intestino no funciona correctamente el cuerpo reacciona de esta manera.
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El estrés tampoco ayuda, ¿no es así?
No, El estrés es una de las causas principales que genera que nuestra microbiota no sea estable.
Habla también de la candidiasis intestinal. Tal vez siempre relacionamos esta bacteria con problemas vaginales, ¿también puede afectar a nuestro intestino?
Todas las mujeres tenemos un reservorio de Cándidas en nuestra vagina, el problema surge cuando las cándidas crecen sin control, colonizan zonas de nuestro cuerpo donde no deberían estar y dejan de vivir en simbiosis o crecen demasiado en el aparato digestivo, la piel, los órganos sexuales o la boca. Los síntomas son:
-Ganas de comer dulce en forma de azúcares o hidratos de carbono a todas horas.
-Intolerancia a olores muy fuertes de perfumes o ambientadores o al humo de los cigarrillos.
-Fatiga y somnolencia.
-Irritabilidad y cambios bruscos de humor.
-Dolor en las articulaciones.
-Debilidad muscular.
-Cansancio.
-Ansiedad.
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El sobrepeso es otro de los grandes problemas de nuestro tiempo, ¿qué estamos haciendo mal para que, cuando tenemos a nuestro alcance una despensa cada vez mejor y más saludable tengamos más problemas de sobrepeso y obesidad?
Los problemas de sobrepeso y obesidad están muy relacionados con la disbiosis intestinal. ¿Qué estamos haciendo? Pues estamos comiendo mal. Cada vez recurrimos con más frecuencia a comida rápida, ultraprocesados. Se nos está olvidando ir al mercado a por alimentos frescos y cada vez son más envasados. Nos olvidamos de comer cada tres o cuatro horas, hacemos picos de insulina constantemente…
¿Piensa que comemos peor que nuestros padres o nuestros abuelos?
La verdad es que muchas veces sí. Reducimos o nos olvidamos de ingerir proteína, pocos alimentos frescos y de temporada. Es cierto que ellos, dependiendo de la época en que vivieron, pudieron tener falta de algún nutriente, pero hoy en día, nosotros, tenemos acceso a todo.
Hay una serie de mitos muy arraigados en relación con la alimentación, ¿cuáles son para usted los más llamativos?
Sí, uno es el de “si como poco adelgazaré más rápido”. Esto es totalmente irreal. No comer nunca es una opción para adelgazar. Se bajará peso, eso sí, pero una cosa es bajar peso y otra adelgazar. Si se come poco, el cuerpo no cubrirá sus necesidades básicas y se producirá una caída importante de la masa muscular, con lo cual, habrá efecto rebote.
Cada vez se diagnostican, también, más casos de alergias e intolerancias, ¿hay una explicación?
Cada vez somos más escrupulosos y muchas veces pecamos de exceso de higiene, tenemos más estrés, alimentos ultraprocesados vs frescos y aditivos alimentarios. Este aumento de la prevalencia de alergias e intolerancias alimentarias tiene mucho que ver con nuestro estilo de vida, con los cambios en los hábitos. Todos estos factores pueden modificar la expresión de distintos genes que podrán heredar las generaciones futuras.
