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Son muchas las noticias que nos llegan diariamente relacionadas con el coronavirus. A la sexta ola explosiva de COVID-19 debido a Ómicron, se añade la noticia de la aparición de casos en nuestro país de Flurona, o lo que es lo mismo, la coexistencia del virus de la gripe y el coronavirus en nuestro organismo.
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Respecto a esta última, los expertos llaman a la calma y recuerdan que los casos no son graves y que no provoca un aumento de las complicaciones. Así lo ha señalado la microbióloga del Hospital Universitario de A Coruña y portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), María del Mar Tomás, quien ha añadido que tampoco se trata de una nueva variante del SARS-CoV-2 y tampoco de un virus nuevo.
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El riesgo de Flurona en los no vacunados
La experta ha matizado a Europa Press que se debe prestar atención a las personas que no han sido vacunadas de ninguno de los dos virus, ya que la existencia de ambos en un organismo sí podría dar lugar a complicaciones. Sobre su tasa de contagio, ha añadido que, en un principio, no debe haber una alta transmisión aunque ha insistido en que "las personas no vacunadas deben estar alerta".
Los síntomas de esta coinfección son parecidos a los que provoca la variante ómicron. También ha ha subrayado que, de todos los casos reportados de esta coinfección (los primeros se produjeron en mayo de 2020, según estudios publicados en la revista médica 'The Lancet') "no se ha visto un mal pronóstico".
En cualquier caso, debemos protegernos siempre para evitar infectarnos. Así, como recuerdan los expertos, además de minimizar los contactos, mantener la distancia social, el lavado de manos, etc., debemos usar bien la mascarilla, ya que puede ayudarnos a reducir el riesgo de contagio. Pero, ¿cómo saber si nos está protegiendo?
El truco para saber si tu mascarilla te protege
Como decíamos, las mascarillas se han convertido en una medida necesaria y complementaria para nuestra protección y la de nuestros allegados. Pero no todas las mascarillas protegen igual. Incluso una FPP2 o FPP3, que son las que ofrecen una mayor garantía de filtración, pueden ser ineficaces si no cumplen con el principal requisito: que esté colocada correctamente.
Hay una forma de saber si está bien ajustada para cumplir su función principal, la de evitar que respiremos los virus: si tus gafas se empañan rápidamente o notas que sale aire por los bordes si exhalas o toses es probable que también puedas respirar aire contaminado.
Así lo ha advertido la científica Claire Judith Horwell, de la Universidad de Durha, y miembro honorario en la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido, en un artículo publicado de opinión publicado en The Guardian. En él, Horwell pide a los gobiernos que informen bien a la población sobre el uso correcto de las mascarillas.
Señala que dos años después del inicio de la pandemia sabemos que han demostrado ser eficaces más eficaces frente a partículas pequeñas y aerosoles, siempre que se coloquen bien ajustadas en la cara, son las conocidas FPP2, FPP3, KN95.
Asimismo, añade que todas las mascarillas deberían llevar un clip moldeable, ya que eso es lo que nos permite un mayor ajuste que evite que el aire contaminado no entre ni salga por los huecos de la mascarilla y contribuya a propagar la infección o que nosotros nos contaminemos.
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