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Si no tienes pareja y quieres encontrarla, ya no tienes excusa para conocer a alguien especial. Porque, según la dating coach María Pasión, autora del libro Ligar es fácil, si sabes cómo... (Ed. Alienta), no es tan complicado seducir. Solo tenemos que aplicar los trucos que ella ha reflejado en su manual de psicología de pareja para lanzarnos a la maravillosa aventura de conocer a un buen compañero o compañera con quien pasarlo bien. La experta asegura que ligar no es un don con el que se nace, sino una habilidad que puedes perfeccionar a través de trucos y consejos. Con ella hemos hablado y esto es lo que nos ha explicado sobre el arte de la seducción.
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¿Por qué afirmas que ligar es fácil?
Ligar es una condición que podemos perfeccionar y aprender. Hay trucos para ligar más y mejor. Lo importante de ligar es hacerlo de acuerdo al tipo de criatura que eres en la solterología (esto viene en un test en el libro) y que puedas entender lo que se te da bien y lo que no.
Hay personas que ligan gracias a lo que saben hacer, otros a lo que saben decir, y también están los que lo consiguen gracias a su capacidad para sorprender, pues no hay dos ligones iguales. Lo que importa es que sepas aprovechar tus dones para que aprendas a ligar a tu medida y al ritmo que más te guste.
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Muchos solteros de 'edad' piensan que ya se les acabó la oportunidad de ligar. ¿Piensas que se puede encontrar pareja en esta época tengas la edad que tengas?
En el libro explico las diferencias de ligar en diferentes edades. Una soltera de 20 lo hará de una forma que un soltero de 50, pues las prioridades y aprendizajes de cada etapa son distintas. También lo que se busca a los 20 es distinto a lo que se quiere cuando se es más mayor. En esencia lo que defiendo es que ligar es conectar con el otro. A veces ligas para tener pareja, a veces lo haces para pasarlo bien con alguien en la cola del museo, y a veces, los más expertos, pueden llegar a ligar sin querer hacerlo.
También pienso que ligar va mucho más allá de lo físico. El que liga a través de lo que sabe hacer, de lo que sabe contar, y de lo que comunica, consigue conectarse mejor con los demás. Toda persona que trabaje vendiendo su marca o su producto también liga cuando consigue hacerse con un nuevo cliente. ¡Va más allá del terreno amoroso! El mundo está ávido de nuevas formas de ligar y de conectar que sean auténticas, divertidas, frescas y atrevidas.
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¿Lo tienen más fácil los jóvenes acostumbrados a las redes sociales?
Hay dos maneras de ligar. Está la forma analógica, que necesita de un encuentro presencial, de que te cruces con esa persona que te despierta algo nuevo, y que remueva tus ganas de conocerla más, y de despertar su curiosidad. Esto es clave a la hora de ligar, jugar con el factor sorpresa, con el desvelar capa por capa, de poder entender el ligar como un juego donde todo está por descubrirse y que se disfruta lentamente. Y también está la forma digital. Esto incluye apps, chats y redes sociales. Los jóvenes están más acostumbrados a ligar en estos medios, y más, si son nativos digitales.
Lo interesante es que con la pandemia hemos conseguido que las personas que ligaban de modo analógico se vean seducidos por las tendencias digitales. Cualquiera puede ligar hoy en día gracias a la tecnología. Para esto se han diseñado diferentes sitios para poder ligar y, una vez dentro, puedes toparte con ligones de 40 o de 60 que son unos cracs ligando por apps, que saben que es más fácil encontrar parejas y posibles ligues afines gracias a los filtros, y a las ayudas que tienen las apps de dating actuales.
¿Podrías adelántanos unas ideas básicas para ligar en estos tiempos?
Apuesta al caballo ganador. Mi gran consejo aquí se llama el caballo ganador es como tú. ¿Qué quiero decir con esto? Si eres chica, que estuvo casada y no tiene hijos, si apuestas por un chico que estuvo casado y sin hijos estarás en la misma categoría para poder jugar en igualdad de condiciones, apostar y disfrutar. Si tú eres un chico divorciado con tres hijos, si apuestas por una chica que no se ha divorciado nunca y tampoco tuvo hijos puede que estés apostando por una relación que requiera de muchos ajustes (demasiados para mi gusto). Busca un caballo como el tuyo y cuando lo encuentres… ¡apuéstale!
Utiliza tu sentido del humor para conectar mejor y hacer reír a tu match. Si no lo tienes muy afinado, encuentra ese punto en el que te sientes cómodo y despiertas simpatía también por lo que sabes hacer, sabes decir, o incluso por esos detalles que te hacen especial (hablar como el Pato Donald, mover las orejas, imitar a alguien, o por lo que has aprendido sobre setas, coches, cocina, viajes, perros o ese sinfín de saberes ocultos que no te has atrevido a compartir). Plantea preguntas para conocer mejor a tu match, sal de lo común y define preguntas que puedan despertar su imaginación.
Estas preguntas nos pueden ayudar a pensar:
- ¿Cuál es el lugar más mágico que has visitado?
- ¿Qué es lo más tierno que alguien te ha dicho jamás?
- ¿Cuál ha sido el logro que más felicidad te ha traído?
- ¿A quién te gustaría decirle gracias?
- Si tuvieras que comer un alimento toda tu vida, ¿cuál sería?
- ¿Qué es lo que te gustaría que recordaran de ti?
- Cuéntame un secreto sobre ti que casi nadie sepa.
La mejor cita es la que tiene segunda edición. Si estás ligando para conocer mejor a tu match, lo ideal es que puedas llegar a una segunda cita. Para esto es importante que no te descartes por completo en la primera quedada. Mide tus tiempos, tus palabras y lo que compartes. En una primera cita mi mejor consejo es que puedas contar quien eres, despertar curiosidad y, al mismo tiempo, dejar algo maravilloso para descubrir en la segunda cita. La mejor cita es la que se hace corta y te deja con ganas de más. Si te gustan los números, con 90 minutos tienes de sobra para este encuentro.
¿Cuáles son los errores que cometemos?
No seas deshonesto. Grandes relaciones no llegan a puerto porque las mentiras salen a flote. Si tú quieres ligar y conectar con tu match, no hace falta que digas que eres algo que no eres. Si vas mintiendo sobre tu CV, tu historia, tus gustos, tu edad o sobre quién eres, tu match te pillará en algún momento.
Ojo con los filtros. Entiendo que las redes sociales nos permiten algunos arreglos con los que algunos pueden sentirse más confiados y a gusto. El problema es que cuando has pasado imágenes filtradas sobre ti, al llegar al riguroso directo, tu match puede llevarse una ingrata sorpresa. Una cosa es lucir más bronceada, y otra muy distinta es cambiar tus rasgos faciales o tu talla gracias a efectos de edición.
Cuida tus datos sensibles. Protege tu intimidad y cuida tus datos. Tu match no tiene que saber el primer día en qué portal vives, cuánto ganas, en qué local trabajas o qué tipo de problemas has tenido con tu empresa el último año. Ya habrá tiempo para compartir esta información.
No seas un monologuista terrorífico. Puede que poseas el don de la palabra. Puede que te hayas ganado el primer certamen de oratoria en la facultad, pero en una cita la clave está en que los dos hablen, los dos narren y los dos pregunten con acierto. Tú no eres el único protagonista de esta cita. Permite que tu match te cuente, no le interrumpas cuando esté haciéndolo y préstale atención a lo que te está compartiendo.
Una vez hemos ligado, ¿cómo debemos mantener una buena relación?
Cuando has ligado lo sabes. Todas las señales te indican que ese match quiere saber más de ti y estaría encantado de saber muchas más cosas interesantes. Defiendo el Slow Dating como parte de mi trabajo. ¿Cómo lograrlo?
Ve despacio. No tengas prisa por saberlo todo, por tenerlo todo, y muy importante: no tengas prisa por forzar una relación cuando apenas estás conociendo a tu match. Agobiar a tu match es la primera causa del Ghosting (desaparecer sin decir ni adiós). Disfruta de las conversaciones, mide bien cuándo llamas, cuándo envías mensajes y cuándo no tienes que hacerlo. Permítele a tu match tener el espacio que requiere para hacer lo que le gusta y ve midiendo en qué momento es oportuno volver a quedar. La cortesía y la buena educación es la firma que hace que todo esto quede perfectamente empacado para resultar un candidato irresistible. Si algo no te gusta o no te encaja, dilo. Si algo podría mejorar, pero ese match te gusta a rabiar, díselo. No tengas miedo en confesar lo que quieres, cómo lo quieres y por qué lo quieres. Tanto si has ligado para una relación casual, como si has ligado y has visto que te encantaría tener una relación formal, la sinceridad es tu mejor carta de presentación.