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chica en la playa comiendo sandía© Getty Images

Todos los beneficios de la sandía, un alimento ideal si quieres controlar tu peso

Contiene un elevado porcentaje de agua y un buen número de nutrientes, lo que la convierten en una de las frutas estrella del verano


17 de julio de 2024 - 13:37 CEST

Estamos, no hay duda, ante uno de los alimentos estrella del verano. La sandía es una de las frutas que no faltan en las mesas durante los meses del caluroso estío, además de por su delicioso sabor por la capacidad que tiene de refrescarnos. Pero es que, además, tiene un buen número de propiedades saludables. Así, es un alimento que destaca por su riqueza nutricional, ya que aporta vitaminas (A, C, B), minerales (potasio, calcio y fósforo) y antioxidantes. Además, la mayor parte de este alimento es agua, por lo que es muy hidratante, combate la retención de líquidos y sacia, por lo que es una buena alternativa si te propones adelgazar. 

 “Lo mejor es siempre consumir fruta de temporada y la de verano concretamente, además de estar riquísima, aporta interesantes nutrientes como la vitamina A (fotoprotectora), antioxidantes y, por supuesto, mucha agua”, detalla el doctor Ángel Soriano, nutricionista y miembro de Doctoralia. “En este aspecto, la sandía es la reina, ya que contiene casi un 95% de agua y debido a su color rojo, buenas cantidades de vitamina A”, nos explica el especialista, que sitúa la sandía a la altura de otro de los alimentos estrella del verano podría ser el gazpacho, ya que aporta grandes cantidades de vitaminas, minerales, antioxidantes y grasas saludables, que nos ayudan a rehidratarnos y a protegernos de los radicales libre de la exposición al sol.

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pareja comiendo sandía en el muelle© Adobe Stock

Apunta sus propiedades saludables

Pero volviendo a la sandía, nos detenemos a valorar cuáles son sus propiedades saludables y los beneficios para la salud de esta fruta tan refrescante:

  • En verano, la hidratación es fundamental. Pues bien, la sandía nos puede ayudar a mantener ese aporte hídrico. Y es que su contenido en agua alcanza el 94,6%, lo que la convierte en una buena fuente de hidratación, aunque hay que controlar las raciones ya que, aunque en poca cantidad, también contiene azúcar.
  • Debido a su alto contenido en agua, además de rehidratar y refrescar, también tiene un alto poder saciante, por lo que la convierte en una opción de snack muy saludable, siendo una buena alternativa para tomar a mañana o a media tarde.
  • Entre los nutrientes que contiene, destaca su alto contenido en vitamina A, que destaca por su efecto antioxidante y fotoprotector. Aunque si se busca este efecto, igual se nos queda corta y tendríamos que recurrir a la famosa zanahoria.
  • Su característico color rojo se debe a la presencia de licopeno, un potente antioxidante que nos puede ayudar a combatir radicales libres.
  • Es un alimento que no te aportará muchas calorías. Y es que debido a su alto contenido en agua, contiene muy pocos azúcares y nada de grasas, por lo tanto, muy pocas calorías, apenas 20 Kcal por cada 100 g. Por todo ello, dentro de una dieta variada y equilibrada y un estilo de vida saludable en el que se haga ejercicio físico, la sandía es un alimento excelente para el control de peso. Esto es gracias a que es saciante y tiene pocas calorías, debido a la gran cantidad de agua que contiene. 

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trozos de sandía cortados© Adobe Stock

 Aporte de potasio

Otro de los principales beneficios de tomar sandía es que te ayudará a mantener en buen estado todo tu cuerpo. Y es que, como nos cuentan desde Nutritienda.com, hay que incidir en su aporte de potasio, un mineral que contribuye al funcionamiento normal de los músculos y del sistema nervioso.

Buena para tus ojos

También tenemos que tener presente que los alimentos de colores rojizos, anaranjados, morados o amarillos son ricos en una sustancia buena para tus ojos, el betacaroteno. No quiere decir que por tomar sandía tu agudeza visual mejorará, pero sí contribuye a ello. También es rica en luteína, otra sustancia que también cuida la salud visual.

¿Aliada de tu memoria?

Como decíamos, la sandía tiene una alta concentración de licopeno, un poderoso antioxidante. Según explica la nutricionista dietista diplomada Lizzie Bertrand del Sistema de Salud de Mayo Clinic en St. James (Minnesota), esta fruta también es una buena fuente de agua pura, beneficiosa para la salud cerebral. Incluso un caso leve de deshidratación puede reducir la energía mental y perjudicar la memoria.

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amigas comiendo sandía en la playa© Adobe Stock

¿Elegimos sandía o melón?

Junto a la sandía hay otro alimento igualmente vinculado a estos meses de verano, como es el melón. ¿Cuál es mejor opción? Se lo planteamos al experto, que no duda en recomendarnos que disfrutemos de ambos alimentos. “Las comparaciones son odiosas, pero puestos a comparar, las diferencias son mínimas. Tanto sandía como melón son dos maravillosas frutas que estás riquísimas y que hay que aprovechar su temporada para consumirlas”, nos dice. Añade, además, que haciendo una comparativa vemos que su contenido en agua es muy similar: 94,6 de la sandía frente a 92,4 del melón. En cuanto a su contenido en azúcares, gana el melón 6 g a 4,5 g, que da una diferencia de calorías de 27Kcal /100g para el melón y 20Kcal/100g para la sandía. “Una diferencia tanto de azúcares como de calorías poco significativa a no ser que te comas 2 kg (que hay quien se los come)”, nos cuenta el experto.

Comer sandía por la noche, ¿sí o no?

No son pocas las veces que hemos hablado de si es recomendable comer fruta por la noche, en la cena. Y nos hacemos la misma pregunta con la sandía. “Mi recomendación es tomar tanto sandía como melón en la media mañana o en la merienda, evitando tomarla de postre en almuerzo o cena, ya que su alto contenido en agua puede llenar el estómago demasiado y producir pesadez o malestar”, sugiere el nutricionista.  Por su parte, la nutricionista Marta Vallejo, nos cuenta que no son pocas las ocasiones en las que cometemos el error de querer hacer una cena ligera y optamos por fruta, pero tomando demasiadas piezas, haciendo que ese exceso calórico lo almacenemos en forma de grasa. “Lo ideal, si optamos por esto, es escoger frutas cítricas, más acuosas, como las naranjas, fresas, frutos rojos o silvestres, sandía, piña, kiwi...”, cuenta. 

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