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Si saltas a la primera, te sientes irritable, contestas mal, no soportas las críticas y estás casi siempre de mal humor, es posible que no puedas controlar la agresividad. A veces, puede ser debido a un estado de ansiedad o estrés mal gestionado, a crisis vitales o, incluso, a las hormonas. Sea como fuere, la agresividad que hiere a los demás o a ti misma no es una opción. Eso no quiere decir que no tengas derecho a enfadarte. Puedes y debes sentirte así, pero tienes que saber cómo canalizar ese enfado para no agredir al entorno. Si dudas si te comportas de una forma agresiva, responde a estas preguntas de la psicóloga María Dueñas, co-autora de 'El Gran Libro de los Tests' que pueden ayudarte. Pero recuerda que este test no es una herramienta de diagnóstico, sino una forma orientativa para conocerte mejor. Siempre que sientas la necesidad o que no puedes controlar tus emociones, debes acudir a un profesional para que te ayude.
Test de personalidad agresiva
Consejos para evitar la agresividad o el mal humor
Antes de responder, intenta respirar profundamente y contar hasta diez. Esto te ayudará a controlar mejor tus impulsos y a calmarte. Además, la respiración baja la frecuencia cardiaca, reduce el estrés y te ayudará a ver las cosas con mayor perspectiva, con más distancia, con lo que podrás reaccionar sin tanta agresividad.
Intenta identificar qué es lo que te está molestando. Sé honesta contigo misma. Quizá debas 'rascar' más en tu interior para conocer cuál es la verdadera causa. Puede ayudarte anotarlo en un papel para poder resolverlo mejor.
Si has tenido una 'bronca' con tu pareja o con alguien del trabajo, intenta contarle el problema a una amiga. En ocasiones, verbalizar lo que te ha ocurrido y escuchar la opinión de otra persona te ayudará a tomar distancia y a relativizarlo todo.
Si llevas una temporada de mal humor y todo te sienta mal, para. Puede ser que el trabajo te esté estresando o que tengas alguna preocupación. Bajar el ritmo, tomar consciencia, una vez más, anotarlo en un papel y centrarte en cuál es la causa te ayudará a verlo con mayor objetividad. Si ves que se te escapa de las manos, ponte en contacto con un profesional.
