Siempre se ha dicho que tener la tensión baja es más saludable que sufrir hipertensión. Sin embargo, la bajada de tensión arterial puede darse como síntoma de una enfermedad, a veces grave, por lo que es necesario estar atento a cuándo se produce. Si tan solo se debe a que eres de tensión más baja o sufres alguna bajada ocasional, la doctora María Paz Martínez Cortes, especialista en medicina interna del Hospital Vithas Almería, te explica qué puedes hacer para subirla.
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¿Cuáles son las causas de la bajada de tensión?
La deshidratación, ya sea por ingesta de pocos líquidos o por pérdidas excesivas, es una causa frecuente, así como el calor, ya que produce vasodilatación. Asimismo, tras una comida copiosa podemos tener una bajada de tensión ya que aumentará la circulación en la zona intestinal mientras hacemos la digestión. Al incorporarnos bruscamente podemos sufrir también una bajada de tensión, que suele ser transitoria, lo que se conoce como hipotensión ortostática. En ocasiones la hipotensión puede ser la manifestación de alguna situación más grave, como infecciones, problemas hormonales, cardíacos, o ser un efecto secundario de medicamentos o tóxicos, siendo necesario buscar atención médica en esos casos.
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¿Y los síntomas?
Muchas personas tienen la tensión algo baja de forma habitual y no supone un problema de salud. Pero en otras ocasiones, sobre todo cuando baja de forma brusca, podemos notar sensación de mareo, visión borrosa, sudoración, náuseas e incluso pérdida transitoria del conocimiento, lo que se conoce como síncope.
¿Qué podemos hacer para subirla?
Si nuestra tensión suele ser baja, pero no nos produce ningún síntoma y no tenemos patologías asociadas, no hay que hacer nada especial, indica la especialista en Medicina Interna. Eso sí, si nos produce molestias, como mareos, por ejemplo, y para evitar los síntomas de un descenso rápido de tensión arterial podemos beber más líquidos, preferentemente, alguna bebida con cafeína, procurar estar en un ambiente fresco y usar ropa transpirable si hace calor, ya que las temperaturas elevadas pueden afectar a nuestra tensión arterial.
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¿Nos ayuda la cafeína?
Siempre hemos oído decir que si tenemos la tensión muy baja podemos tomar café para subirla. Y es así. Como nos aclara la doctora María Paz Martínez, la cafeína presente en el café, el té o bebidas carbonatadas eleva transitoriamente la presión arterial, pero sus efectos no suelen perdurar a largo plazo. Ingerir grandes cantidades de alcohol puede generar hipotensión brusca, aunque su consumo crónico produce hipertensión.
¿Ayuda el agua fría?
Otro de los remedios a los que podemos recurrir cuando tenemos la tensión baja o nos sentimos mareadas es aplicar agua fría sobre la piel. Como nos confirma la especialista, en general producirá vasoconstricción y puede ayudar a subir la tensión. Eso sí, es recomendable hacerlo poco a poco y no tiene por qué ser precisamente en esas zonas, pero suelen ser las más accesibles.
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¿Hay alimentos que nos suban la tensión?
Algunos alimentos pueden aumentar la tensión arterial como resultado de su alto contenido en sodio. Es el caso por ejemplo de los snacks salados, embutidos y productos procesados como salsas y precocinados. Otros elevan la presión arterial mediante otros mecanismos, es el caso del chocolate, el regaliz y en menor medida algunas especias como el jengibre, el romero o la pimienta.
Remedios naturales y plantas que nos ayudan
Además del té y el café, las infusiones de jengibre, romero, pimienta o regaliz, o las combinaciones entre ellas, pueden ayudarnos a aumentar la tensión cuando la tenemos baja y nos produce malestar, en ausencia de otras enfermedades, indica la especialista. Por eso, como recomienda la doctora, siempre que tengamos la tensión muy baja y nos afecte en el día a día, debemos preguntar al médico para que si, él lo estima necesario, realice las pruebas convenientes para determinar la causa de las bajadas de tensión o la hipotensión.