Su aparición es algo muy frecuente en la mujer y, la mayoría de las veces, son benignos. Preguntamos a un experto cuál es la mejor manera de prevenirlos y cómo sospechar que los tenemos
Uno de los trastornos que podemos sufrir las mujeres es la presencia dequistes en los ovarios, un problema que no es grave pero que, sí hay que controlar y, en ocasiones, tratar ya que puede afectar a la fertilidad de la mujer. Para sabar si podemos hacer algo para prevenir los quistes en los ovarios, el doctor Rodrigo Orozco Fernández, Coordinador del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Quironsalud de Málaga.
La aparición de quistes en los ovarios es algo muy frecuente. Es importante reseñar que, aunque comúnmente utilicemos la palabra "quiste", con ella queremos englobar un conjunto de entidades muy diferentes entre ellas.
Los ovarios, durante la edad reproductiva, están llenos de pequeños quistes, los folículos. Habitualmente, cada mes crece uno de estos folículos en los que se encuentran los óvulos para liberarse durante la ovulación. Esto produce el cuerpo lúteo, otro quiste relleno de líquido y de mayor tamaño que produce estrógenos y progesterona para fomentar la concepción. Este tipo de quistes son fisiológicos, es decir, normales y desaparecen por sí solos al final del ciclo.
Existen otros tipos de quistes que sí que pueden ser patológicos y generar problemas en la mujer precisando especial vigilancia y, en ocasiones, tratamiento, como pueden ser los quistes dermoides (también llamados teratomas), endometriomas, cistoadenomas, etc.
El diagnóstico de los quistes de ovario se realiza habitualmente durante la revisión ginecológica, de ahí su importancia. Una exploración ginecológica acompañada de una ecografía permite detectar con facilidad si existe algún problema en el aparato genital interno (útero, trompas, ovarios y pelvis).
Una vez que se diagnostica un quiste de ovario, es importante saber clasificarlo adecuadamente y tratar de conocer de qué tipo de quiste hablamos.
La gran mayoría de veces se trata de quistes benignos que precisan de un seguimiento individualizado hasta su resolución o estabilización en el tiempo.
Solo un pequeño porcentaje son o pueden volverse malignos; es por ello que lo más importante es ponerse en las manos adecuadas y expertas en este tipo de patologías.
¿Hay síntomas que nos puedan alertar de su aparición?
Los quistes de ovario rara vez suelen producir síntomas salvo que su tamaño sea muy importante (habitualmente mayores de 5 cm).
Estos síntomas suelen ser:
Dolor: por la propia irritación del abdomen por torsiones o roturas del quiste
Anemia: por sangrados dentro del propio quiste o al abdomen
Alteraciones en el ciclo menstrual: si el quiste se asocia a folículos persistentes
Dependiendo del tipo de quiste el tratamiento se orientará hacia una vía u otra. La gran mayoría de veces con un seguimiento personalizado es suficiente para el manejo del mismo hasta la resolución.
Otras veces, con un tratamiento médico dirigido (en ocasiones hormonal) se consigue la resolución de los quistes, habitualmente cuando son folículos persistentes.
Una menor parte de ellos precisan tratamiento quirúrgico. Gracias a los avances tecnológicos y de conocimiento científico, la gran mayoría de quistes ováricos pueden ser intervenidos hoy en día gracias a técnicas de cirugía mínimamente invasiva, por lo general cirugía laparoscópica, con mínimas complicaciones para cada paciente.
No existen modos específicos para prevenir los quistes de ovario. La recomendación más extendida es la realización de revisiones ginecológicas con exploración y acompañados de ecografía endopélvica para valoración del aparato genital interno.
Es importante que ante una molestia o signo de alarma que no se resuelva por si sola, se consulte en su ginecológico
¿Influye la dieta y el ejercicio?
Los hábitos de vida saludables tales como unadieta variada (como nuestra dieta mediterránea) así como ejercicio diario, evitar el tabaquismo, consumo de alcohol y otras drogas, son medidas eficaces para disminuir el riesgo de aparición de lesiones en nuestros tejidos.
En ocasiones, estos problemas aparecen cuando el organismo se encuentra en un estado no adecuado con exceso de estrés oxidativo y radicales libres, cuya incidencia disminuye manteniendo unos hábitos adecuados.
¿Y los tratamientos hormonales pueden producir estos quistes?
Por lo general no, de hecho, como hemos visto antes, muchos de ellos sirven para tratar y resolver algunos tipos de quistes de ovario.
Únicamente algunos tratamientos hormonales, sobre todo los que se utilizan para estimulación ovárica, pueden producir este tipo de quistes. Por ello es importante que, a la hora de utilizar estos tratamientos, cada mujer esté bajo la supervisión y control de su ginecólogo.
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