Todos tenemos gases. Y a la mayoría se nos hincha un poco el vientre después de comer. A veces no lo suficiente como para desabrocharnos un botón. Pero algunas personas, no tienen que desajustarse el cinturón, sino que pueden necesitar una talla más de pantalón. En estos casos, la razón más plausible por la que se produce esta distensión abdominal es por una mala digestión debido a una intolerancia o porque comemos muy rápido y mal, debido a los nervios y al estrés, y tragamos mucho gas. Según explica la doctora Natalie Egan, del Hospital Brigham, la mejor forma de abordar este trastorno es a través de la dieta, es decir, tener mejores hábitos alimenticios. Y si queremos salir del paso cuando ya han aparecido estas flatulencias, podemos recurrir a infusiones de unas plantas que la especialista nos recomienda.
Empezamos por la menta, una de los remedios herbales más eficaces para mejorar la digestión, puesto que alivia el dolor estomacal y los cólicos que se pueden producir cuando acumulamos mucho gas.
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Alcavarea, la gran desconocida
Muchos desconocen los efectos de esta planta, que tanto puede ayudar a evitar la formación de gases como aliviar los calambres y el ardor estomacal. La alcaravea se utiliza, fundamentalmente, como especia. Su sabor es parecido al del anís, aunque pica un poco más.
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Cardamomo, muy estimulante
Esta semilla, otra inconfundible por su aroma y sabor, ligeramente picante, es un buen remedio para estimular el sistema digestivo. Una infusión de esta planta te ayudará a combatir los gases después de comer y a evitar esa pesadez estomacal que puede aparecer tras una comilona.
Cilantro, aromática y digestiva
Su aroma es inconfundible, y es una de las plantas más aromáticas para añadir a tus guisos. Pero además, está indicada para eliminar los gases e, incluso, para reducir su formación.
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Manzanilla, la reina de la sobremesa
¿Quién no se ha tomado una manzanilla después de comer? Y es que esta planta tiene efectos carminativos, lo que significa que ayuda a reducir el malestar estomacal que se produce por la distensión abdominal tras las comidas.
Anís, tu aliado para el vientre hinchado
Además de tener propiedades carminativas, también contribuye a reducir los calambres y pequeños cólicos que se pueden producir cuando sufres flatulencias, con lo que tomarte una infusión de anís si te has pegado el atracón o si has comido rápido por falta de tiempo relajará tu estómago.
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Cúrcuma, poder antiinflamatorio
Esta especia tiene múltiples beneficios. Sabemos que es muy útil en una dieta antiinflamatoria (aunque no hace milagros), pero también ayuda a mejorar la digestión. De hecho, el té de cúrcuma, una rareza en nuestro país pero que cada vez está ganando más adeptos, ayuda a digerir mejor los alimentos, con lo que tendrás menos gas y menor sensación de plenitud.