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Uno de los ejercicios más populares para lograr un vientre plano son los abdominales. Y si hablamos de ellos, seguramente que lo primero que te viene a la cabeza es el típico ejercicio en el que se parte de una posición tumbada con las piernas flexionadas y las manos en la nuca, que consiste en elevar el tronco 'tirando' de la zona del vientre. Un movimiento que, sin embargo, puede tener consecuencias negativas si no lo realizamos correctamente o bien puede no ser el indicado si padecemos algún problema de espalda. En este tipo de flexiones de tronco se ejerce presión sobre las vértebras lumbares, llegando a provocar un desgaste del disco intervertebral, y además se pueden dañar las cervicales si nos servimos de ellas para ayudar en el impulso.
Por todos estos motivos, quizá este ejercicio no sea el más adecuado para incluir en tu rutina deportiva para marcar el vientre, ya que en vez de tonificar una zona muscular estaría poniendo en riesgo tu salud. Entonces, ¿cómo podemos trabajar el abdomen sin exponernos a posibles lesiones? Si nuestro objetivo es conseguir un vientre plano, además de incluir dinámicas para quemar grasa en nuestro entrenamiento, debemos enfocarnos en esta parte con ejercicios específicos, pero podemos optar por otro tipo de movimientos igual de intensos e, incluso, más.
Planchas
Quizá es, después del mencionado anteriormente, otro de los ejercicios más conocidos para trabajar el abdomen. Su popularidad le ha llevado a convertirse hasta en challenge viral en redes sociales y su éxito se explica porque es muy completo. Además de fortalecer la zona de la tripa, se necesita de todo el core para realizar una plancha en cualquiera de sus versiones, así como mantener el cuerpo al completo en activo. Lo más importante, y más hablando de no dañarnos, es mantener el tronco como una tabla, con la espalda bien alineada.
Jugando con brazos y piernas
Lo más seguro en estos casos, para evita cualquier tipo de dolencia lo mejor es optar por ejercicios en los que la espalda permanece apoyada sobre el suelo durante todo su desarrollo. Por ejemplo, como la conocida bicicleta, en la que se parte de una posición completamente tumbada y se pedalea en el aire; o la tijera, en el que movemos las piernas en forma de zig-zag. Para poder llevar a cabo estos movimientos nuestro cuerpo 'tira' de abdomen. Puedes probar también a hacer ejercicios en los que combinas brazos y piernas, con series en las que, por ejemplo, partes de las rodillas flexionadas y vas llevando una y otra al pecho a la vez que elevas los brazos.
- Ejercicios de suelo para fortalecer el abdomen que no son los clásicos abdominales
Presiones
Ejercicios aparentemente sencillos y más calmados, pero igual de efectivos, que consisten en hacer presión con las manos sobre las rodillas. ¿Cómo? Por ejemplo, colócate en una posición tumbada boca arriba, con los brazos extendidos a lo largo del tronco, flexiona las rodillas y apoya los pies en el suelo. Inhala profundamente, eleva una de las rodillas en dirección al pecho y párala con la palma de la mano contraria a mitad de camino. Exhala durante unos segundos mientras ejerces fuerte presión. Inhala con el cambio de pierna y completa una rutina combinada.
