El próximo 9 de octubre se cumplirán 53 años del fallecimiento de Joseph Pilates, pero su legado sigue muy vivo. Más de cinco décadas en la que la disciplina que él mismo implementó no ha hecho más que ganar adeptos con el paso del tiempo. Tanto es así que el informe anual del American College of Sports Medicine sobre tendencias de fitness, lo situó como una de las 10 más practicadas en todo el mundo en el 2018. El alemán consiguió crear un sistema de entrenamiento que comenzó llamándose 'Contrología', puesto que estaba enfocado a ponderar el control mental sobre el físico. Finalmente, adoptaría el nombre de Pilates y se convertiría en una de las prácticas más trendy, pese a que en un principio la concibió para luchar contra su raquitismo, asma y fiebre reumática. Si estás pensando en probarlo, hay ciertas cosas que puede que te interese saber antes.
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¿Qué tipo de entrenamiento es?
El pilates propone un entrenamiento en el que cuerpo y mente trabajen conectados entre sí. ¿Cómo se consigue? Con la respiración como ancla y ejercitando el centro de gravedad del cuerpo –core- como base, dado que los músculos que lo componen son los encargados de sujetar todo nuestro peso. De este modo, fortaleceremos la musculatura transversal (abdomen), los multífidos (espalda) y el suelo pélvico. Cabe destacar que el pilates se nutre de otras disciplinas tales como el yoga, la gimnasia sueca, el ballet clásico o las artes marciales.
¿Qué diferencias hay con el yoga?
Ambas disciplinas comparten beneficios porque están enfocadas a lograr calmar el estrés y mejorar nuestro bienestar físico-mental, pero son varias las diferencias que podemos encontrar entre ellas. El pilates está centrado en la fuerza, en la tonificación muscular, así como en el control del equilibrio y flexibilidad del cuerpo. Mientras tanto, el yoga trabaja más la parte espiritual, el balance, la coordinación motora y la resistencia. Además, otros beneficios del yoga son que refuerza el sistema inmunológico, mejora las digestiones y regula correctamente la presión arterial. En conclusión, el pilates está más enfocado a sanar/mejorar la parcela física y el yoga la psicológica.
¿Se adelgaza haciendo pilates?
Es una de las preguntas más recurrentes. Y la respuesta es sí. Es un ejercicio es muy completo a nivel muscular porque se tonifica todo el cuerpo. El hecho de que con él no rompamos a sudar, como sí sucedería con un ejercicio aeróbico, da lugar a confusión. En pilates potenciaremos la masa muscular y aceleraremos la actividad endocrina, o lo que es lo mismo, nuestro cuerpo gastará calorías incluso en reposo, dependiendo de la intensidad del ejercicio.
¿Cómo empiezo a practicarlo?
Lo ideal para principiantes es aprender a controlar la respiración de manera correcta mediante ejercicios sencillos como inhalar y exhalar varias veces de manera profunda. Una vez logrado, lo ideal es iniciarse en la práctica con sesiones de 50 minutos, una o dos veces por semana. Se pueden hacer en centros especializados o gimnasios, pero ante la coyuntura actual con la pandemia hay decenas de vídeos en YouTube con clases de pilates.