Más frecuente en mujeres que en hombres
El cansancio, la apatía, la irritabilidad y el nerviosismo son los síntomas más comunes de la astenia primaveral. Según la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA) hasta el 85% de la población la padece con el cambio de estación. Es más frecuente en mujeres que en hombres y suele desaparecer después de unas semanas, cuando nuestro cuerpo se acostumbra a la llegada de la primavera.
Leer más: Dónde encontrar las vitaminas y minerales necesarios para prevenir la astenia primaveral
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Alimentos ricos en triptófano
Cuidar la alimentación es fundamental para evitar los desequilibrios hormonales y psíquicos que puede provocar la astenia. Evitar las grasas, especialmente las saturadas, el exceso de azúcar, café y bebidas con alcohol ayuda a nuestro organismo a evitar el cansancio generalizado propio de este trastorno. El triptófano es un aminoácido presente en algunos alimentos que favorece y propicia el buen humor. Está presente en huevos, lácteos, pescado, legumbres, cereales integrales, piña, papaya, mango, naranja y uvas, entre otras frutas, además de en los frutos secos y el aguacate. Estos alimentos también contienen vitamina C, E, magnesio, calcio y hierro.
Leer más: Cómo influyen los cambios de estación en nuestra salud física y mental
Levadura de cerveza
De entre todos los beneficios que aporta la levadura de cerveza a nuestro organismo destaca el elevado contenido de vitamina B2 que puede aportarnos. Esta vitamina, más los minerales con los que también cuenta la levadura de cerveza, producen un aumento de la energía. Lo que la convierte en una buena opción para personas que tienen anemia o algún déficit nutricional. Puedes incluirla en el desayuno, ensaladas, pastas o sopas, y es apta para que la consuman los niños.
Leer más: ¿Por qué necesitas tomar más vitamina B en primavera?
Apuesta por la maca
La maca, tradicionalmente, se utiliza como energizante aunque también se la ha empleado para aumentar el deseo sexual y como reguladora del sistema endócrino. Esto ayuda a controlar las hormonas y nuestro estado anímico. Es rica en vitaminas y minerales, pero tienes que tener en cuenta que en ocasiones puede interferir en la conciliación del sueño. Por eso, es importante que la consumas de manera adecuada y sin excederte. Por la mañana temprano, en ayunas o después del desayuno es la mejor opción.
Té verde en tus infusiones
El poder antioxidante del té verde es muy conocido. Pero no hay que dejar de lado otras propiedades que son tan beneficiosas como esta. Así, estimula el metabolismo ayudándonos a recobrar la energía que suele faltarnos durante la astenia. Y tiene propiedades que favorecen la reducción de estrés aportando vigor y vitalidad. Se aconseja tomar dos tazas de té verde al día durante un período prolongado.
Leer más: Consejos para plantar cara a la astenia primaveral
Ginseng, un extra de energía
El ginseng se utiliza, desde hace siglos, en la medicina china porque aporta un extra de vitalidad y energía. A nivel cognitivo ayuda a mejorar la memoria, la concentración y a reducir el cansancio mental, síntomas tan propios de la astenia primaveral.
Ser feliz
No importa lo apática que te sientas, tumbada en el sofá será más difícil vencer la dejadez y el cansancio que esta época del año suele producir. Si no te sientes con ánimo para hacer algo nuevo, recurre a esas cosas que sabes que te divierten y te hacen feliz. No puedes quedar con tus amigos en persona, pero sí por videollamadas. Conéctate con tus seres queridos, aprovecha el tiempo libre para encontrar hobbies o perfeccionar los que ya tienes.
Leer más: ¿Te falta energía? ¡Afronta la primavera con optimismo!
Hidratarse, fundamental
Una correcta hidratación revitaliza el organismo. Si, además del cansancio producido por la astenia, hace calor, tu cuerpo necesitará más más líquido aún. Procura hidratarte con productos naturales, sin azúcares añadidos y conservantes. El agua es la mejor opción para recuperar vitalidad.
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Haz deporte
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar, al menos, 40 minutos diarios de actividad física. Que la cuarentena nos impida ir al gimnasio no significa que no puedas entrenar en casa. Practica cardio saltado a la comba o haciendo bicicleta estática. Existen muchas rutinas de entrenamiento para hacer casa que te aportan vitalidad, energía y disminuyen la sensación de apatía.
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La importancia de dormir bien
El descanso es fundamental siempre, pero en períodos de estrés o cambios en la rutina, dormir al menos 7 horas garantiza la reparación que el cuerpo necesita. Intenta acostarte con regularidad a la misma hora para crear el hábito.
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Frutos secos en tu dieta
Los frutos secos aportan magnesio, fósforo, calcio, hierro y potasio, además de zinc y selenio. Tienen propiedades antioxidantes y aportan energía y fibra. Consumirlos diariamente revitaliza y aporta nutrientes esenciales.
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