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“Vivir de la luz” es un documental que puedes ver en la plataforma Vimeo, en el que una serie de personas explican y analizan, desde distintas perspectivas, la relación espiritual, física y psicológica que tenemos con la comida. Los testimonios se enfrentan al concepto más arraigado de bienestar y que, poco a poco, estamos cambiando. Comer, trabajar, vivir, es decir, la búsqueda de la felicidad en espacios comunes y conocidos por todos.
Aunque la película aborda diferentes experiencias y, no deja de ser una propuesta para dar a conocer las controvertidas teorías respiracionistas de Jasmuheen (famosa gurú australiana), dan luz sobre algunas cuestiones tan prácticas como mundanas. ¿Cómo vivimos? ¿Qué buscamos en la vida? ¿Qué deseamos? Son algunos de los planteamientos que plantea al espectador este documental.
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Cuida lo comes y, especialmente, quién lo dice
Jasmuheen es una mujer australiana de 63 años que cambió radicalmente de vida. Como ocurre en otros casos de personas reconvertidas a un modo de vida opuesto al que llevaban, dejó el mundo de la finanzas y los números para adentrarse en un universo espiritual. A los pocos años de haber comenzado este cambio personal confesó que su alimentación consistía en comer sólo aquello que necesitaba y que le bastaban 300 calorías diarias para sobrevivir. Del escepticismo inicial se pasó a la preocupación de que estas afirmaciones pudieran generar en la sociedad una creencia errónea y perjudicial.
Si el consumo promedio de calorías, para que nuestro organismo trabaje correctamente y pueda cumplir las funciones básicas, se estipula en 2000 calorías diarias, ¿cómo puede alguien decir que vive con menos de la sexta parte recomendada? La voz de alarma se extendió tan rápido que a Jasmuheen pronto le propusieron comprobar sus palabras a cambio de cuantiosas sumas de dinero. Una de las premisas de esta mujer australiana es vivir con y de lo que verdaderamente necesitamos. Apoyada en este lema rechazó toda propuesta monetaria y su método quedó sin una certera comprobación médica y científica.
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Cuando buscamos respuestas en la espiritualidad y sentimos que ese es el camino que queremos transitar, uno de los problemas más frecuentes es la falta de referentes. No porque no los haya, sino por aquello de que “del dicho al hecho hay mucho trecho”. Las propuestas son comprensiblemente tentadoras pero los líderes encargados de difundirlas no siempre se rigen bajo patrones racionales.
El doctor y profesor Antón Luger, experto en sistema metabólico, explica en el citado documental que ha reemplazado la frase ‘es imposible’ por ‘no lo creo’. Su participación es, probablemente, lo más sensato de la película porque cuestiona de manera científica, aunque también personal y espiritual, la idea principal de la película.
Alimentarse y meditar
Son términos que hemos aprendido a unir y a entender tanto por separado como en conjunto. Es lo que popularmente denominamos conexión cuerpo mente y que podemos desarrollar a través de actividades como la meditación, el yoga o el tai chi. Las técnicas de respiración y el ejercicio físico fortalecen el espíritu y el cuerpo, ayudan a prevenir enfermedades y otorgan flexibilidad física y también mental.
De la película “Vivir de la luz” se deduce, de manera metafórica, que eres tu principal alimento, responsable de lo que ingieres, bebes, crees y sientes. Estos documentales son controvertidos y, en muchas ocasiones, carecen de una base científica que aporte credibilidad a sus propuestas. Sin embargo, si los observamos en calidad de espectadores quisquillosos, cuestionadores y racionales (la mejor manera de mirar una película así) puede convertirse en un aliciente para la búsqueda espiritual y el empoderamiento personal.
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