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El breatharianism, inedia o respiracionismo es una manera de vivir alimentándose, solamente, de la energía que contiene el aire y el sol. A esta fuente de energía se la denomina prana y, según sus seguidores, sus nutrientes equivalen a los del agua y cualquier alimento sólido. Se la denomina respiracionismo porque basa todos sus principios en la respiración consciente, canal y medio para alimentarse. Es el nexo que, según sus benefactores, los mantiene vivos, nutridos y sanos. El respiracionismo no es meditar, aunque lo parezca y tenga muchas similitudes. Y te lo adelantamos, no es una técnica que debas seguir porque pondría en peligro tu vida.
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Desconfía de los métodos radicales
Resulta muy difícil encontrar una técnica recomendada para mejorar nuestra vida y nuestra salud que no cuente con el aval científico y médico. Nos encanta dar consejos, mucho más si estos revelan los motivos por los que nos sentimos tan bien. Sin embargo, algunas recomendaciones pueden ser mortales. El respiracionismo es una de ellas porque es una técnica que debe aplicarse con mucho conocimiento previo del método y de tu organismo y que, como máximo, podrías realizar durante 20 días. No es una forma de ‘alimentarse’ o una dieta que te ha dado buenos resultados, es un método peligroso que no tiene ningún respaldo científico.
Una persona sana podría estar sin comer un máximo de 20 días. A partir de esta fecha lo más probable es que nuestro cuerpo no resista la situación y entre en coma producido por la falta de glucosa que nuestro organismo necesita para vivir. Los daños que puede sufrir una persona que practica esta técnica pueden ser irreversibles.
El paso de una alimentación tradicional a la propuesta por el respiracionismo suele ser un periodo de transición de tres semanas. Durante ese tiempo se elimina la comida de manera gradual hasta lograr una alimentación a base de energía vital obtenida del sol y el aire.
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Si los médicos no están a favor de esta práctica, ¿por que no ha dejado de crecer?
El respiracionismo es una técnica peligrosa que tiene consecuencias mortales. No es meditar o hacer un ayuno intermitente, se trata de dejar los alimentos por completo. Eso es lo que la teoría propone. Lo cierto es que ningún cuerpo humano resistiría sin comer, por lo que se da por sentado que las personas que practican esta técnica consumen zumos, caldos y alguna pieza de fruta, aunque no lo mencionen.
No existe ningún seguidor de esta práctica que haya permitido vigilar su alimentación al completo. En el año 2010, Prahlad Jani de 79 años y que llevaba décadas sosteniendo que su única alimentación la obtenía de sol y el aire, permitió que un equipo médico hiciera un seguimiento de su estado en un hospital de la India. Los profesionales de la salud confirmaron que, efectivamente, su estado era óptimo y que durante las hora del día que pasaban a su lado Jani no probó más bocado que los que su respiracionismo le permitía. Sin embargo, Prahlad Jani disponía de varias horas al día sin vigilancia y en la que se suponía ingería alimentos sólidos.
El respiracionismo se confunde, en ocasiones, con los beneficios que podemos obtener de una respiración consciente y de la luz solar y el aire puro. Al no contar con la aprobación de la ciencia, se vuelve una técnica peligrosa, que solo se basa en vivencias personales y de la que solo podríamos abastecernos durante 20 días.
Por lo tanto, si en algún momento te han hablado de este método para controlar el estrés, no lo sigas. Hay otras técnicas mucho más saludables que permiten lidiar con los momentos de crisis sin poner en peligro tu salud.
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