¿Qué va a pasar si me he contagiado de coronavirus SARS-CoV-2? ¿Cómo tengo que actuar si mi caso es leve y no necesito atención hospitalaria? ¿Qué requisitos debe cumplir mi hogar? Para todo ello, el Ministerio de Sanidad, junto con la participación del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, varias sociedades médicas, entre ellas, SEMERGEN, el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos y el Consejo General de Enfermería, entre otros, elaboró un protocolo en el que se establecen los criterios para que un paciente confirmado de COVID-19 y sus familiares sepan cómo actuar.
Todas estas medidas están encaminadas a las personas que no presentan síntomas o que estos son leves. Este aislamiento domiciliario permitirá descongestionar los centros hospitalarios ante esta pandemia.
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¿Qué requisitos se deben cumplir en caso de aislamiento en casa?
En este sentido, la guía señala que los casos leves de coronavirus pueden recibir atención domiciliaria siempre que cumplan unos requisitos:
- Ausencia de factores de vulnerabilidad previos para padecer enfermedad grave:
- Enfermedades crónicas: cardiovascular (en especial hipertensión), pulmonar, renal, diabetes.
- Alteración del sistema inmunitario. Edad avanzada, embarazo o edad pediátrica.
- Ausencia de criterios de gravedad (por ejemplo, disnea o dificultad para respirar, expectoración, hemoptisis o expectoración de sangre, vómitos o diarrea con deshidratación, confusión o letargia).
- No convivir con personas con factores de riesgo.
- Disponer de una estancia en la vivienda para su aislamiento.
Además, deberán ser casos tanto en investigación como probables o confirmados pero con síntomas leves y también casos probables o confirmados de COVID-19 que tras recibir el alta hospitalaria aún requieren atención sanitaria y medidas de aislamiento.
El manejo domiciliario del coronavirus también puede ser una opción en el caso de que un ingreso hospitalario sea inviable, por ejemplo, si la capacidad se ve limitada por la situación epidemiológica o por un rechazo del paciente a ser ingresado.
La organización de la atención domiciliaria será establecida por las comunidades autónomas de acuerdo a sus niveles asistenciales conjuntamente con salud pública.
El personal sanitario que asista a estos casos en casa debe llevar un equipo de protección individual que deberá desechar posteriormente en el centro de salud del que dependan.
¿Qué condiciones debe tener la vivienda y el lugar del aislamiento?
Según el protocolo de Sanidad, si el paciente recibe atención domiciliaria, deberá permanecer en el mismo lugar durante todo el aislamiento y en caso de que necesite salir a lugares comunes, deberá hacerlo con mascarilla quirúrgica y lavarse las manos cuando salga de la habitación. Además:
- El resto de la casa deberá estar bien ventilada.
- La habitación que se destine al aislamiento, con ventilación directa a la calle, sin corrientes de aire que provengan de sistemas de calor o refrigeración.
- Se deberá disponer de un baño para uso exclusivo del paciente, o en su defecto, deberá ser limpiado con lejía doméstica tras uso.
- También se recomienda disponer de un intercomunicador (como los utilizados para la vigilancia de los bebés) para comunicarse con los familiares, sin necesidad de salir de la habitación. Aunque esto se puede realizar a través del móvil.
- En el interior de la estancia o habitación deberá colocarse un cubo de basura, con tapa de apertura de pedal, y en su interior una bolsa de plástico que cierre herméticamente para los residuos.
- Se recomienda disponer utensilios de aseo de uso individual y de productos para la higiene de manos como jabón o solución hidroalcohólica.
- Las toallas deberán cambiarse periódicamente siempre que se encuentren húmedas.
- La persona enferma deberá seguir en todo momento las medidas de higiene respiratoria: cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar con pañuelos desechables o el codo flexionado, lavándose las manos inmediatamente después.
- La persona enferma no deberá recibir visitas durante el periodo de aislamiento.
- También es necesario disponer de un teléfono que garantice la comunicación permanente con el personal sanitario.
- El equipo sanitario podrá decidir si el paciente debe ser trasladado al hospital en caso de empeoramiento de los síntomas.
Cómo deben protegerse las personas que habiten en la casa
Además de evitar, en la medida de lo posible, que el paciente salga de la habitación donde permanezca en aislamiento, si lo hace, utilice mascarilla y lavarse las manos, las demás personas también deberán respetar unas medidas para evitar contagiarse:
- Todos los habitantes deben lavarse las manos con agua y jabón o solución hidroalcohólica después de cualquier contacto con el enfermo o su entorno inmediato.
- El protocolo de Sanidad establece que se informará a los miembros de la familia y convivientes de que, si el paciente es un caso en investigación y se convierte en un caso confirmado, serán considerados contactos.
- Todos ellos realizarán autovigilancia ante la aparición de síntomas de infección respiratoria aguda como fiebre, tos, dolor de garganta, dificultad para respirar, y consultarán con los servicios de salud si éstos aparecieran.
¿Quién cuida al paciente?
Los expertos sanitarios recomiendan que sea una única persona la que atienda al paciente en el domicilio y que no tenga factores de riesgo que compliquen un posible contagio.
Tanto el paciente como el cuidador deben llevar mascarilla quirúrgica y, en el caso del último, guantes desechables.
El cuidador deberá lavarse las manos frecuentemente después de cualquier contacto con el enfermo o su entorno inmediato.
Tratamiento de los residuos del paciente
Otro de los aspectos que considera el protocolo es lavar la ropa personal, de cama, toallas de los enfermos con jabones o detergentes habituales a 60-90 grados centígrados y dejar que se seque completamente. Asimismo:
- Esta ropa deberá colocarse en una bolsa con cierre hermético hasta el momento de lavarla y hay que evitar sacudirla antes.
- La bolsa con los residuos podrá descartarse con el resto de los desechos domésticos siempre que estén introducidos en una bolsa cerrada herméticamente.
- Los cubiertos, vasos, platos y demás utensilios reutilizables se lavarán con agua caliente y jabón o preferiblemente en el lavavajillas. Tras el contacto con los residuos siempre se deberá realizar higiene de manos.
- Las superficies que se tocan con frecuencia (mesitas de noche, somieres, muebles del dormitorio), el baño y el inodoro se deben limpiar con material desechable y desinfectarlos diariamente con un producto que contenga lejía (1 parte de lejía y 99 partes de agua) preparado el mismo día que se va a utilizar.
- La persona encargada de la limpieza deberá protegerse con mascarilla y guantes.
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