Aunque la variedad de animales de compañía es amplia, los perros y gatos encabezan la tendencia de preferencias a nivel global. Para los amantes de los animales escoger entre uno y otro y definirse como 'personas de perros' o 'personas de gatos' es complicado, sin embargo, las estadísticas hablan por sí solas. En España, por ejemplo, la tendencia es absolutamente canina. Un reciente estudio, llevado a cabo por el portal acierto.com, afirma que en los hogares españoles predomina de manera significativa la presencia de perros en lugar de la de gatos. Un dato curioso que se opone a la corriente de la mayoría de países europeos, donde los mininos son las mascotas más populares.
Beneficios para la salud
Los gatos son animales muy queridos y venerados desde la Antigüedad. La prueba más evidente de ello podemos encontrarla en la cultura egipcia, donde estaban considerados como animales sagrados. A lo largo de la historia este amor y devoción por los felinos ha continuado latente, tanto que son numerosas las investigaciones que afirman que la presencia y compañía de un gato en casa puede reportar importantes beneficios para la salud humana. Algo que ratifican desde el portal online, donde enumeran las bondades de convivir con un gato.
- Ayudan a reducir los niveles de cortisol (la hormona del estrés)
- Tienen efectos positivos sobre las personas con autismo
- Se asocian a la reducción de la presión sanguínea
- Disminuyen el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares
- Reducen la posibilidad de desarrollar asmas y alergias y refuerzan el sistema inmunitario
Tendencia inversa
No obstante, según el portal comparador, solamente en 3.000 hogares españoles se convive con uno o más gatos. En términos cuantitativos, estaríamos hablando de tan solo un 11%. Una cifra que coloca a nuestro país varios puntos por detrás de otros como Rumanía, en la que prácticamente en la mitad de los hogares hay un gato, o Letonia, donde la presencia felina es del 38%.
Esta 'tendencia perruna' provoca que el número de gatos abandonados o sin hogar crezca exponencialmente cada año. Según el presidente de la protectora El Refugio, entre 30.000 y 36.000 gatos aproximadamente son abandonados anualmente en nuestro país. Una alarmante problemática que, unida a la facilidad reproductiva de estos animales y a la mayor adopción de perros, provoca que cada vez haya menos familias dispuestas a acoger mininos en sus casas.
Además, y aunque en este sentido no sea algo tan importante como en el caso de los perros, la raza es un importante condicionante. Así, los gatos más 'solicitados' serían los persas, seguidos de los siameses. En cuanto a perros se refiere, los yorkshire terrier y los pastores alemanes son los favoritos de los españoles.
Coste económico
Los gatos requieren un mantenimiento, cuidado e inversión mucho más reducidos que el que podría tener un perro. Algo de lo que se hacen eco desde el propio portal comparador de seguros, donde alertan que las vacunas, esterilización, desparasitación y otras atenciones relacionadas con la higiene pueden suponer un ahorro de más de entre 200 y 300 euros anuales. Además, los seguros para gatos también son mucho más económicos pues, al no salir de casa, no necesitan tener cubierta la responsabilidad civil.