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Así tiene que ser la dieta de un paciente con arritmia

Los expertos apuntan a que hay que tener en cuenta que la medicación que toman puede interferir con determinados alimentos

Actualizado 5 de marzo de 2020 - 9:09 CET5 mar 2020 - 9:09 CET

Ante el diagnóstico de una alteración del ritmo cardiovascular, una arritmia, lo cierto es que hemos de tener en cuenta distintas consideraciones sobre nuestros hábitos de vida, alimentación incluida. ¿Hay algunos alimentos que un paciente con arritmia debe eliminar de su lista de la compra? “Debemos tener en cuenta que hay diferentes tipos de arritmias. La más común, especialmente en pacientes mayores, es la fibriliación auricular. Por lo general los pacientes con arritmias tienen, además, falla cardiaca u otro tipo de cardiopatía por lo cual llevar una alimentación sana y balanceada es muy importante para su salud cardiovascular”, nos cuenta la doctora Daniela Silva, directora de la Unidad de Obesidad Integral y Nutrición de Vithas Internacional Madrid.

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Así interfiere la medicación con determinados alimentos

La experta hace mención a cómo la medicación que toman puede tener cierta relación con la alimentación. “Los dos aspectos más importantes para tener en cuenta en estos pacientes son el control de su frecuencia cardiaca y asegurar un adecuado mantenimiento de los niveles de ciertos medicamentos. Estos pacientes, por lo general, están tomando medicamentos anticoagulantes (para adelgazar la sangre) y antiarrítmicos”, nos cuenta la doctora Silva. “Hoy en día hay anticoagulantes orales nuevos que no se ven muy afectados con los alimentos. Sin embargo, los niveles de medicamentos anticoagulantes, como el Sintrom, se ven afectados principalmente por alimentos ricos en vitamina K, como las verduras de hoja verde (espinacas, lechuga, etc.), el aguacate, coles y perejil. Además, para los pacientes que están tomando medicamentos antiarrítmicos no es recomendable el consumo de pomelo, pues compite con estos medicamentos en el hígado afectando sus niveles”, apunta la experta quien también nos dice que el consumo de ultraprocesados, cafeína y alcohol interfiere de forma importante con la frecuencia cardiaca, por lo cual su consumo debe minimizarse y, de ser posible, eliminarse.

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Frutas, verduras y grasas saludables, indispensable

En el momento de hacer la lista de la compra, tenemos que tener en cuenta aquellos que no pueden faltar. La doctora recomienda seguir una dieta sana y balanceada, que incluya una variedad de frutas y verduras y grasas saludables como el pescado, los frutos secos y el aceite de oliva virgen extra. “Es importante asegurar un adecuado aporte de micronutrientes como el magnesio y el potasio. Sin embargo, se debe tener cuidado, pues tanto un déficit como un exceso de estos minerales puede provocar una exacerbación de la arritmia. Para poder lograr este balance, a mí me gusta recomendar la toma de un multivitamínico diario”, nos explica.

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Nos planteamos también si ha de cambiar la forma de preparación de los alimentos? “Las verduras, como las espinacas, tienen más aporte de vitamina K cuando están cocinadas. De hecho, media taza de espinacas cocidas tiene aproximadamente 3 veces más vitamina K que una taza de espinaca cruda. Ya que la vitamina K es una de las principales moduladoras de los niveles de anticoagulantes, es importante moderar su consumo”, concluye.

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