portada pareja© Gtresonline

Lo que debes hacer para convertirte en una pareja resiliente

Fortalecer esta capacidad es clave para fortalecer una relación. Aprende a conseguirlo con una serie de consejos


Actualizado 4 de marzo de 2020 - 12:49 CET

El amor nunca fue un sentimiento exento de disgustos, pero la complejidad que ha adquirido en las sociedades modernas lo ha convertido en fuente constante de problemas. El miedo al compromiso, junto con las dificultades para poner punto y final a una relación, son algunas de las cuestiones más frecuentes en consultas de los terapeutas. Existen diferentes circunstancias que nos pueden llevar al límite y hacer que nos cuestionemos si no tenemos la fuerza y la voluntad necesarias para continuar adelante. En este punto tenemos dos opciones: dejarnos vencer y sentir que hemos fracasado o sobreponernos y salir fortalecidos, apostar por la resiliencia.

Para ti que te gusta

Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte

Navega de forma ilimitada con nuestra oferta

1 año por 49€ 9,80€

Este contenido es solo para suscriptores.

Celebramoscon un 80% de descuento.

Suscríbete 1 año por 49€ 9,80€

TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

Acotando el concepto de 'resiliencia'

¿Qué significa 'ser resiliente'? Se podría definir como la capacidad de superar situaciones dolorosas, traumáticas y que implican un cambio forzoso y agresivo de aquello que creíamos dado por hecho en nuestra vida, como superar la muerte de alguien cercano, un desahucio, la pérdida de una carrera profesional, problemas económicos graves... Convertirse en una pareja resiliente puede ser a veces difícil, pero vale la pena intentarlo para luchar por la persona que amas.

Debes tener claro que la resiliencia no es una cualidad innata, pero sí podemos desarrollarla a lo largo de la vida. Hay personas que lo son porque han tenido en sus padres o en alguien cercano un modelo a seguir, mientras que otras han encontrado el camino por sí solas. Esto indica que todos podemos serlo, siempre y cuando cambiemos algunos de nuestros hábitos y creencias. De hecho, las personas resilientes no nacen, se van formando, lo que significa que han tenido que luchar contra situaciones adversas o que han sentido en alguna ocasión el fracaso y no se han dado por vencidas. Al encontrarse al borde del abismo, han dado lo mejor y han desarrollado las habilidades necesarias para enfrentarse a los diferentes retos de la vida. ¿Cómo puedes conseguir ser un poco más resiliente con tu pareja? Lo primero que debes haces es tomar consciencia y autoconocerte. Desarrolla la habilidad de hacerte preguntas duras y sé honesta contigo misma. La motivación es muy importante.

© iStock

Se tiene que establecer entre vosotros cierta complicidad. Ambos debéis tener ganas de solucionar el problema, de superar las diferencias o las dificultades porque esto es lo que os llevará a la acción. Salir del conflicto mientras aprendéis de él. Además, debes tomar la iniciativa para adquirir recursos, habilidades, nuevas ideas y expectativas que te permitan traer el equilibrio otra vez a la relación. 

Hay que salir de la zona de confort para pasar a la acción

Ambos debéis tener ganas de solucionar el problema, de superar las diferencias o las dificultades porque esto es lo que os llevará a la acción. Salir del conflicto mientras aprendéis de él. Además, debes tomar la iniciativa para adquirir recursos, habilidades, nuevas ideas y expectativas que te permitan traer el equilibrio otra vez a la relación. ¿Qué puedo hacer para mejorar la situación? ¿Qué puedo aprender de todo esto? Ser creativo también es muy importante. Si observas la situación desde fuera y buscas alternativas para mejorar la situación, conseguirás llegar muchas metas. Sitúate como una observadora ante el conflicto y no te rindas. Sé persistente porque los cambios son paulatinos y debemos ser pacientes. Además, mantén los pasos anteriores y pon atención a los avances por pequeños que sean. Lo habrás escuchado muchas veces, pero salir de la zona de confort es clave para avanzar. Lo cómodo es no hacer nada, evadir los problemas, pero esto no mejora nada, muchas veces lo empeora todo.

Adquirir la posición de lo que ocurre sin culparte, haciéndote responsable evitando el victimismo también es muy importante para entender las diferencias. En pareja no siempre pensar distinto es algo negativo. Entender la postura del otro ayudará a complementaros y reconocer que necesitáis el apoyo del otro. Ser coherente con tus valores hará que lo que haces sea por un buen común. Tienes la capacidad de superar lo que quieras. Si crees que no, echa siempre un vistazo atrás y recuerda alguna situación que hayas superado. Si no tuviéramos problemas, no creceríamos como personas y no aprenderíamos nada de nuestra pareja. En momentos terribles es cuando se pone a prueba la compenetración entre los dos. Que consigáis salir de estas situaciones juntos sin duda marcará una vivencia que, a largo plazo, os hará más fuertes.