Jornadas interminables de trabajo, tareas domésticas, compromisos, decenas de mensajes sin responder… El estrés y la ansiedad están en todas partes. En este sentido, son muchas las personas que han encontrado en el yoga una valiosa vía de escape para este ritmo acelerado de vida. Los beneficios de esta disciplina, que combina cuerpo y mente, son mundialmente conocidos. Aumenta la flexibilidad, nos mantiene jóvenes, disminuye la presión arterial, mejora la respiración, quema calorías, reduce el estrés, promueve la salud cardiovascular y un largo etcétera. Sin embargo, aunque el yoga y sus infinitas modalidades cada vez reúnen más adeptos, no todos los que son fanáticos de la esterilla conocen la historia que esconde esta práctica milenaria con poderes 'milagrosos'.
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Primeras referencias
La palabra 'yoga' proviene de la palabra 'jug', la cual significa "unir, conectar, relacionar" en sánscrito, la lengua clásica de la India. Precisar con exactitud el origen histórico de esta filosofía no es sencillo. Las primeras pruebas arqueológicas de esta práctica datan aproximadamente del año 3.000 a.C. Fue el británico sir John Marshall quien descubrió en Mohenjo-Daro (Pakistán) un sello con figuras de la cultura del valle del Indo. En 1931, el arqueólogo publicó la interpretación de su descubrimiento e imaginó una supuesta criatura con cuernos, en una posición sentada con las piernas cruzadas que recuerda a la de los yoguis. Aunque la hipótesis de Marshall recibió la aprobación de buena parte de los investigadores, se desconoce si realmente este sello representa a una criatura poniendo en práctica una forma primitiva de yoga. Otros arqueólogos occidentales consideran que el origen de esta disciplina está en la colección de escrituras que constituyen los Vedas, cuatro textos más antiguos de la literatura india, base de la religión védica. En estos escritos, considerados ‘revelaciones divinas’, aparecen las primeras referencias al yoga como filosofía de vida y se aluden a conceptos clásicos como la vinculación directa con la respiración.
'Yoga sūtra'
Yoga sūtra es un texto que ha tenido una enorme influencia en las creencias y prácticas del yoga. Dicho texto fue escrito y recopilado entre los siglos II y V a.C. por el sabio hindú Patanjali. Sin embargo, en él no aparecen posturas (asanas), sino que se ordena y sistematiza la práctica del Raja Yoga (yoga mental). Provee un acercamiento de ocho pilares para el bienestar y la purificación del cuerpo, mente y alma. Para Patanjali, el yoga es "la aptitud para dirigir la mente exclusivamente hacia un objeto y mantener esa dirección sin distracción alguna". Según el autor, los ocho pilares de esta filosofía son:
1. Yamas: hace referencia a las ‘normas’ sociales, a nuestra conducta hacia los demás
- Ahimsa: no violencia, ni hacia nosotros mismos ni hacia los demás
- Satya: ser honestos y no mentir
- Asteya: no robar
- Brahmacharya: vivir con moderación
- Aparigraha: ser generosos y no dejarse llevar por la avaricia
2. Niyamas: hace referencia a la ética personal, la actitud ante la vida, los pensamientos y sentimientos
- Saucha: limpieza y orden, tanto del cuerpo como de la mente
- Santosha: permanecer feliz
- Tapas: ser disciplinado, puntual y perseverante en las acciones
- Svadyaya: estudio el ser y de los grandes sabios
- Ishvara Pranidhana: honrar lo divino
3. Asana: postura de meditación
4. Pranayama: ejercicios de respiración para controlar la energía
5. Pratyahara: centrar la atención hacia el interior y evitar las distracciones del mundo externo
6. Dharana: poder mantener la concentración en un solo punto
7. Dhyana: meditación
8. Samadhi: estado de éxtasis producido por un Dhyana intensificado, que ya no lleva esfuerzo, es natural
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