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Gripe y resfriado: los mitos que no te debes creer (y los que sí)

Salir con el pelo mojado no te produce un resfriado. Pero sí puede activar un virus. Desmentimos este y otros mitos en torno a la gripe y el catarro


Actualizado 27 de enero de 2020 - 16:02 CET

Quien no ha asociado, en algún momento en su vida, haber salido a la calle con el pelo mojado con haberse 'pillado' un buen catarro. Pero lo cierto es que no hay datos científicos que avalen la relación directa entre la humedad y el frío y el resfriado o la gripe. Lo que sí puede ocurrir es que el mal tiempo sumado a llevar el pelo mojado puede activar el virus, si este estaba latente en el organismo. Así lo han recordado los expertos de Cigna que, además, han recopilado este y algunos otros mitos sobre el resfriado y la gripe, dos dolencias muy típicas en esta época de frío.

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Los mitos de la gripe y el resfriado

Un catarro mal curado puede acabar en gripe. Falso. Si no te acabas de curar el resfriado es que hay otra afección que lo está impidiendo, por ejemplo, una neumonía, una bronquitis o, incluso, la gripe. Pero eso no quiere decir que las sufras por no haberte curado bien el catarro. Por otro lado, la gripe y el resfriado están provocados por virus distintos. Y aunque los síntomas son muy parecidos, no son exactamente iguales.

La vitamina C previene el catarro. Lamentablemente, tenemos que decir que también es falso. De hecho, te recomendamos que reconsideres tomarte ese zumo de tres naranjas en el desayuno si piensas que con ello vas a tener las defensas altas para combatir cualquier infección de las vías respiratorias superiores. La naranja es un alimento muy saludable y no te pedimos que la dejes de tomar, pero sí que la consumas entera para beneficiarte de todas sus propiedades. En zumo estás tomando todo su azúcar.

Los antibióticos 'curan' la gripe o el resfriado. Totalmente, falso. Además, se trata de un mito muy peligroso. A pesar del esfuerzo de los profesionales sanitarios por informar a la población del uso prudente de estos medicamentos, aún hay mucha gente que sigue creyendo que para curarse bien necesitan tomar antibióticos. Pero los antibióticos no acaban con los virus, sino con las bacterias. Tampoco hay ningún medicamento que cure la gripe o el resfriado. Los fármacos que actualmente se dispensan en farmacia actúan frente a los síntomas.

Si estás enferma, no debes hacer ejercicio. Tampoco se trata de una afirmación cierta. Aunque tampoco es falsa. Siempre que no sufras fiebre alta, el ejercicio físico no está contraindicado. Lo que ocurre es que la congestión nasal y demás síntomas asociados dificultan la buena respiración e incomodan la realización de los ejercicios. Asimismo, si vas al gimnasio, debes procurar extremar las medidas de higiene, por ejemplo, lavándote las manos a menudo, para evitar contagiar a tus compañeros. Lo que sí debes tener en cuenta es que practicar una actividad física regularmente reduce las posibilidades de caer enferma.

Si estás enferma, no debes tomar lácteos. Tampoco hay ninguna evidencia científica que constante que los productos lácteos, como la leche, produzcan flemas, como se dice popularmente. Lo cierto es que este tipo de alimentos solo pueden causar problemas si eres intolerante a la lactosa o tienes alergia.

Para curarte antes tienes que 'sudar' la fiebre. La sudoración es un mecanismo de nuestro organismo para combatir el aumento de la temperatura corporal. Pero no es bueno taparse en exceso cuando se está enfermo, puesto que este sudor se acaba enfriando sobre la piel y hace que haya un efecto rebote, aumentando la temperatura corporal. Lo mejor contra la fiebre es tomar baños de agua tibia para refrescar el organismo.

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Lo que sí funciona para curarte

Hay otras creencias y remedios populares que, aunque parezca mentira, sí funcionan para mejorar los síntomas y acelerar la curación. Por ejemplo:

Una sopa caliente no es un cuento. Varias investigaciones avalan que la mezcla de vitaminas y nutrientes del caldo de pollo con verduras posee un efecto antiinflamatorio que ralentiza el crecimiento de los leucocitos implicados en la liberación de mucosidades y contiene agentes medicamentos parecidos a las sustancias farmacológicas modernas contra el resfriado. Si además se añaden especias como la pimienta o el curry, así como alimentos como el nabo, el perejil, el apio, la cebolla, la zanahoria y el ajo, los beneficios son mayores.

Otros remedios. Beber abundantes líquidos como agua o infusiones, no consumir sustancias tóxicas como tabaco o alcohol, quedarse en casa para no contagiar a los compañeros cuando hay fiebre, así como guardar reposo para que el organismo se concentre en lo que debe, curarse, son otros remedios efectivos contra el resfriado y la gripe.

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