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No se trata de una dieta para perder peso, sino más bien, de un cambio importante en los productos alimenticios con el objetivo de minimizar las dolencias de enfermedades como la de Crohn o el colon irritable. La dieta FODMAP consiste en eliminar alimentos fermentables. Es sumamente restrictiva, en una primera etapa se disminuye el consumo de estos alimentos y luego, ya en una segunda fase, se los retira de la dieta por completo.
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Solo las personas que sufren de problemas intestinales saben que, lo complejo y sacrificado de implementar esta dieta, vale el esfuerzo. Cuando se comienza con esta alimentación se lo hace de manera gradual, muchas veces la sustitución o eliminación de un producto es transitoria. Se comienza por reducir la frecuencia con la que se ingieren estos alimentos para terminar por quitarlos de la dieta si fuera necesario.
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¿Cuáles son los productos que se eliminan en la dieta FODMAP?
FODMAP es un acrónimo para los oligosacáridos fermentables, los disacáridos, los monosacáridos y los polioles que están, de manera natural, en muchos productos. Cuando se realiza esta dieta se excluyen alimentos vegetales ricos en hidratos de carbono que, a su vez, se dividen en oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles. Estos alimentos cortan la fermentación natural que se produce durante el proceso digestivo. Se los llama corta fermentables o de cadena corta. Estas sustancias no hacen mal al organismo, solo en algunas personas llegan sin digerir al intestino grueso generando gases, hinchazón, dolor abdominal y hasta diarrea.
Los FODMAPs se dividen en cuatro grupos: Los fructo-oligosacáridos, como el trigo, la cebolla y el ajo.Los oligosacáridos, como las legumbres. Los disacáridos, en los que se encuentran los productos lácteos y los monosacáridos, como la miel, la fruta y los jarabes. Como notarás, la lista de productos que se evitan con esta dieta es muy amplia, por eso es importante que siempre se haga bajo supervisión médica.
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Esta es la tabla de alimentos prohibidos en una dieta baja en FODMAP:
- Frutas: aguacate, albaricoque, breva, caqui, cereza, ciruela, ciruela pasa, conservas de fruta,, frambuesas, frutas desecadas, guayaba, dátiles, lichi, manzana, melocotón, mango, melón amarillo, mora, nectarina, pera, sandía y zumos de fruta.
- Lácteos y sustitutos: leche (vaca, cabra y oveja), bebida de soja, yogur, helado, nata, quesos blandos como el de Burgos, la ricota, el requesón, y el queso mascarpone.También la mantequilla, los postres elaborados a base de lácteos y los productos realizados con leche.
- Verduras y hortalizas: alcachofa, ajo, brócoli, cebolla, coliflor, champiñones, espárragos, escarola, hinojo, maíz dulce, puerro, pimiento rojo, remolacha, repollo, setas y salsa de tomate.
- Legumbres: garbanzos, lentejas, judías blancas, guisantes, habas, soja y productos de soja.
- Cereales: trigo y centeno (en mucha cantidad), arroz integral y productos integrales, cereales, espelta y amaranto.
- Frutos secos: almendras, pistachos, avellanas, cacahuetes y anacardos.
- Carnes: hamburguesas, embutidos de cualquier tipo como las y las empanadillas.
- Edulcorantes y salsas: miel, sirope de maíz o fructosa, ágave, sorbitol, jarabe de sorbitol, manitol, xilitol, isomaltulosa, Eritritol, Lactitol, productos “sin azúcar” o “light” y salsas tipo barbacoa o ketchup.
Una dieta individualizada y personal
Si algo caracteriza a esta dieta es que no todas las personas son intolerantes o se ven afectadas por los mismos alimentos. Al ser tantos los productos que intervienen y afectan la sintomatología debe ser implementada de manera progresiva para constatar cuáles son los alimentos que producen reacción.
La mayoría de los profesionales comienza por reducir la frecuencia de alimentos por grupo. De esta manera, si nuestro cuerpo no presenta rechazo a un producto no hace falta quitarlo de nuestra alimentación.
La dieta que no siempre adelgaza
Muchos pacientes han bajado de peso cuando aplican esta dieta, aunque no es la meta. Sin embargo, al eliminar tantos alimentos puede generarse una sensación de hambre constante y llevarnos a comer más de lo habitual.
Llevar un registro de lo que comes, la cantidad y el momento del día suele ser de mucha ayuda, especialmente las primeras semanas. Los expertos recomiendan evitar los productos procesados y ultraprocesados, porque podrían contener FODMAP enmascarados o encubiertos. Bebe mucha agua porque necesitarás compensar la falta de líquido de algunos alimentos eliminados de tu dieta.
En muchos casos, esta dieta, se aplica para paliar los síntomas de los problemas intestinales, por lo tanto, la decisión de cuándo comenzar y finalizar debe tomarla un médico.
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