Síntomas del cáncer de colon, la enfermedad por la que ha fallecido la infanta Pilar
La sangre en las heces y la anemia suelen ser los síntomas de esta patología, el tumor con mayor incidencia en España y que afecta al último tramo del tubo digestivo
El cáncer de colon y recto (CCR) es uno de los tumores con mayor incidencia entre la población española. Según la Alianza para la Prevención del Cáncer de Colon, en España es el tumor maligno más frecuente, si sumamos hombres y mujeres, diagnosticándose cada año más de 40.000 nuevos casos. Esta enfermedad es, además, la segunda causa de muerte por cáncer en España y en Europa. A nivel nacional, en el 2014 murieron 9244 hombres y 6205 mujeres por CCR. De acuerdo a la Unión Europea de Gastroenterología (UEG) un europeo muere por este cáncer cada 3 minutos.
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Para conocer esta enfermedad, por la que ha fallecido la infanta Pilar, la hermana del Rey Juan Carlos, te explicamos cuáles son las señales y las pruebas que permiten su diagnóstico precoz.
El colon es la última parte del tubo digestivo. Mide en torno a un metro y medio y se extiende desde el final del intestino delgado hasta el ano. El colon se puede distinguir, según su situación, en colon ascendente, trasverso y descendente. La función de los dos primeros es la de absorber agua y electrolitos (sales minerales). La del colon descendente es almacenar los desechos (las heces) hasta su expulsión a través del ano.
El colon, además, tiene diferentes partes. Una de ellas es la mucosa, donde se producen la mayoría de las lesiones o pólipos. Estos grupos de células o 'verrugas' anormales son las que se pueden convertir, con el tiempo, en un tumor maligno.
Diferencias entre el cáncer de colon derecho e izquierdo Además de una prevalencia diferente (un 70% de los tumores se originan en el colon izquierdo y un 30% en el colon derecho), los síntomas de los pacientes también pueden variar según la localización del cáncer. Así, mientras que los pacientes con cáncer de colon izquierdo suelen sufrir desde el principio rectorragias o sangrado anal, y dolores tipo cólico que advierten de la presencia de la enfermedad, los pacientes con cáncer de colon derecho no sufren estos síntomas hasta que el tumor no está en un estadio mucho más avanzado. “La sintomatología en colon derecho produce menos dolores cólicos y aparece más despacio y de forma más solapada”, señala el doctor Viéitez, quien destaca también importantes diferencias en el cribado. El aspecto de la lesión preneoplásica, es decir, de la lesión que aparece en el colon unos años antes de que se desarrolle el cáncer, varía bastante en función de la ubicación en el lado izquierdo o derecho del tumor. Así, los pólipos que aparecen en el colon derecho suelen ser planos y su detección es mucho más complicada que la de los pólipos que aparecen en el colon izquierdo, que tienen un aspecto mas típico y prominente hacia la luz intestinal. De hecho, estas dificultades diagnósticas provoca que el cáncer de colon derecho se detecte normalmente más tarde que el cáncer de colon izquierdo.
Síntomas del cáncer de colon
Los primeros síntomas de esta enfermedad no siempre son reconocibles. Hay que tener en cuenta que un pólipo puede tardar años en crecer y tener la capacidad de dar señales, así como de hacer metástasis a otras partes del cuerpo.
Además de la sangre en las heces, quizá el síntoma más conocido por la población, el cuerpo puede lanzar otros avisos que puedan hacerte sospechar la presencia de esta enfermedad:
Dolor en el abdomen: sobre todo, si se concentra en el lado superior izquierdo del abdomen (bajo la última costilla), y va acompañado de cambios en el ritmo intestinal (diarreas y estreñimiento).
Problemas para defecar: que pueden ser debidos a una oclusión intestinal, un bloqueo en el intestino que impide total o parcialmente la expulsión de las heces y que suele requerir atención médica. Esto puede ser debido al tamaño de los pólipos.
Cansancio: la pérdida continua de sangre por las heces puede producir anemia y esta, a su vez, cansancio.
Pérdida de peso: consulta siempre con el médico si experimentas una pérdida de peso significativa sin ningún motivo.
Gran parte de los casos de esta enferemdad podrían evitarse si se actúa sobre los factores de riesgo vinculados al estilo de vida. En este sentido, se ha demostrado que evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol, asociados a un programa de actividad física regular y una alimentación equilibrada, rica en frutas y verduras y baja en carnes rojas y alimentos procesados, pueden disminuir el riesgo de presentar esta enfermedad.
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La presencia de antecedentes familiares, especialmente cuando aparece en familiares cercanos y a edades jóvenes, constituyen un factor de riesgo que debe alertar sobre la necesidad de consultar al médico, quien le indicará la pauta de actuación y las medidas de prevención más recomendables.
Según explica la Alianza para la Prevención del Cáncer de Colon, el 90% de los casos de cáncer de colon y recto se presenta en personas mayores de 50 años. El diagnóstico precoz, entre las mujeres y los hombres de 50 a 69 años sin antecedentes personales o familiares de cáncer, se realiza recogiendo en casa una pequeña muestra de heces, que posteriormente se analizará para saber si hay sangre.
Obtener un resultado negativo en la prueba indica que es muy poco probable que tenga cáncer de colon, y habrá que repetir la prueba cada dos años. En cambio, si el resultado es positivo, es imprescindible evaluar el colon mediante una colonoscopia, la prueba que se realiza para la confirmación del diagnóstico y que permite extraer biopsias así como eliminar los pólipos. La colonoscopia se realiza con sedación y el riesgo de complicaciones es muy bajo.
Actualmente, y según la Alianza para la Prevención del Cáncer de Colon, las 17 Comunidades Autónomas cuentan con un programa de cribado, más o menos consolidado. Es importante recordar que los programas solo son efectivos si la población los conoce y participa activamente en ellos.
Tratamiento
El cáncer de colon puede abordarse de diferentes maneras: con cirugía, radioterapia y quimioterapia, así como otros tratamientos como la inmunoterapia, un tratamiento que utiliza determinados fármacos capaces de estimular el sistema inmunológico del propio paciente para que ataque al tumor.
Por último, hay que recordar que si se detecta a tiempo puede curarse en el 90% de los casos. En este sentido, los programas de cribado tienen como principal objetivo la detección de las lesiones precursoras (los pólipos) y el tratamiento de los mismos, así como el diagnóstico del cáncer en estadios precoces, antes de la aparición de los síntomas, facilitando un tratamiento mucho más fácil y eficaz de la enfermedad.
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