Si quieres comenzar a correr recuerda que los pies son la base de apoyo y en el running, además, estabilizan y generan impulso para la zancada. Según cómo apoyes el pie afectará a todo tu movimiento, por ende, también a tu estabilidad.
El pie plano carece del arco, o lo tiene disminuido, que recibe el impacto durante la pisada y el eje de este suele caer hacia la parte interna del pie. Existe una incidencia muy leve que relaciona esta característica con la pronación durante la carrera. Las lesiones más frecuentes suelen darse de a rodilla hacia abajo, aunque no es una condición sin ecuanon. Puedes hacer maratones sin siquiera sentir molestias. Lo recomendable es que un profesional te asesore sobre el grado de tu morfología y la modalidad más beneficiosa para entrenar.
El dolor puede indicar que algo estás haciendo mal
Se estima que cerca del 20 % de la personas que corren tienen los pies planos. Muchos nunca presentan molestias o dolores por esta situación. Si es tu caso, procura revisar con cuidado la manera en la que estás corriendo.
Si tienes que forzar a tus músculos tendrás más probabilidades de resentirse y lesionarlos. Trabaja todo lo que puedas los músculos que intervienen en el ejercicio. Al menos al principio, es aconsejable que un entrenador prepare tu técnica y la rutina. Cuanto mejor sea la manera en la que entrenas y la técnicas que sigues para correr mayores riesgos evitarás.
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No todas las profesiones son indicadas para correr con los pies planos
Contrario a todas las recomendaciones negativas que se suelen dar sobre el sedentarismo y el problema de trabajar sentadas tantas horas, si tienes los pies planos, es una ventaja. Cuanto más tiempo pases de pie más afectados estarán estos para entrenar, por lo que es conveniente que si te decides por este deporte no pases muchas horas del día caminando o detrás de un mostrador.
También es importante que no entrenes con mucho sobrepeso porque recaerá sobre el arco plantar y podría generar lesiones. Si buscas ejercicios para perder kilos, es aconsejable que comiences por otras actividades para evitar que los músculos que sostienen el arco de tu pie sedan o se lesionen.
En muchos casos, el uso de plantillas específicas, según cada persona, permite entrenar sin contraindicaciones graves. La frecuencia con la que corras también afectará tus articulaciones. Si lo haces a diario tienes más posibilidades de sentir dolor.
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Cómo saber si necesitas zapatillas especiales
Según las últimas estadísticas los casos en lo que un corredor con pies planos necesita zapatillas específicas son muy pocos. Si tienes dudas, estos tres factores pueden ayudarte a encontrar una respuesta.
El pie plano se puede corregir con plantillas y zapatos especiales durante la niñez y la juventud. Si este es tu caso, no hace falta una zapatilla especial, basta con que sigas las recomendaciones del médico para saber si puedes correr o no.
Las posibilidades de que los pies planos te generen dolor durante esta clase de ejercicio es muy baja. La probabilidad de que el arco del pie se derrumbe en prácticamente nula. Si te sientes muy inestable al correr o te fatigas rápido, es probable que sí necesites de un calzado especial para entrenar. Siempre y cuando esto ocurra con mucha frecuencia y no se trate de episodios aislados.
Si tras la consulta, el especialista te aconseja el uso de zapatillas especiales no desesperes. En el mercado existen muchos modelos y muy variados. Están las que permiten incorporar plantillas o las que han sido diseñadas para que no sea necesario que se las agregues.
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