No encontramos más que buenas razones para incluir el salmón en nuestra dieta, porque como alimento nos ofrece una gran cantidad de nutrientes altamente beneficiosos para nuestra salud. Pero es que, además, si hablamos de salmón noruego, acaba de ser considerado como el alimento más sostenible entre los productores de proteínas del mundo, y así aparece publicado en el Índice de Producción de Proteínas Coller FAIRR 2019. Se trata de un informe que analiza el nivel de sostenibilidad de los principales productores de carne, pescados, lácteos y mariscos a nivel mundial. Además, es el único que recoge tanto cuáles son las deficiencias en la producción como cuáles las mejores prácticas.
Nos encontramos en un momento crítico de la historia en el que nos debe importar saber qué consumimos, de dónde procede y cómo ha sido su camino en todos los aspectos para llegar hasta nosotros. Hablamos de alimentación, pero también de ropa, cosmética, etc. porque la búsqueda de la sostenibilidad en el consumo es ya una prioridad para cuidar del planeta.
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Qué hace del salmón noruego el más sostenible
Para empezar, el modelo noruego de pesca destaca sobre los de otros países en cuanto a cuidar el bienestar de los peces y el uso de antibióticos. Además, para demostrar que así es, es necesario que haya detrás de cada paso una intención clara de actuar con transparencia y una evidente interés en ser sostenibles y en que así conste.
Junto a lo ya dicho, las empresas noruegas dedicadas a la pesca cuidan de manera visible los factores de riesgo como el desperdicio de producto, la contaminación, la emisión de gases invernadero, la deforestación, el uso de agua dulce, la pérdida de la biodiversidad, la seguridad alimentaria y las condiciones de trabajo.
Las bondades del salmón en la alimentación
El salmón entra dentro del grupo de pescados azules, que se recomienda incluir en nuestra dieta para que sea equilibrada, saludable y completa. Es un pescado con un alto contenido en omega 3, y consumido con regularidad puede ayudar a reducir el riesgo de padecer enfermedades de tipo cardiovascular. Estos ácidos grasos omega 3 contribuyen a aumentar la fluidez de la sangre y a que disminuyan los niveles de colesterol y triglicéridos y de esta manera se puede evitar la aparición de coágulos o de trombos.
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El interés por los beneficios del salmón para la salud cardiovascular comienza en los años 70, cuando se observó que la incidencia de enfermedades cardíacas en los esquimales de Groenlandia.
Pero sus beneficios no acaban ahí. Distintos estudios apuntan a que el consumo de salmón puede reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas como el Alzheimer, además de la depresión, asma, diabetes, degeneración macular, artritis reumatoide o esclerosis múltiple.
Es cierto que el salmón es un pescado con un alto índice de grasa, pero al tratarse de grasas saludables podemos comerlo con tranquilidad, combinado con otros pescados, tres veces por semana. Además, dentro de una dieta saludable solo puede reportarnos beneficios para nuestra salud sin hacernos aumentar de peso.
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