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El aguacate es uno de los alimentos de moda por numerosas razones. Y su popularidad no desciende, sino al contrario, porque ha demostrado ser tan beneficioso para nuestra salud como versátil y sabroso. Y la única pega que aún le encuentran muchos, su alto contenido en grasas, es precisamente una de sus virtudes.
Han pasado por Instagram y por todo tipo de artículos de prensa numerosos alimentos presentados de diferentes maneras siempre apetecibles, y que aseguraban -y con razón- estar llenos de beneficios para nuestra salud. Pero la inmensa mayoría no consiguen entrar en la cesta de la compra de un gran número de consumidores, y si lo hacen es difícil que lleguen a integrarse de verdad en nuestra forma de comer y cocinar. El aguacate, en cambio, ha sobrevivido a todo y cada vez está más presente en nuestros platos, algo que no deja de gustarnos por todo lo bueno que conlleva para nuestra salud.
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Las grasas del aguacate son buenas para tu corazón
Según un estudio publicado por la Asociación Americana del Corazón, un aguacate al día es muy beneficioso para nuestra salud cardíaca. Esto no significa que tengamos que comer necesariamente uno al día, pero sí que contemos con su presencia, en mayor o menor medida, a la hora de elaborar nuestra dieta.
En el estudio se analizan los beneficios que tiene para nuestra salud cardiovascular el consumo de ácidos grasos insaturados, como los del aguacate, sobre los ácidos grasos saturados. Se trata de un alimento que ayuda a controlar los niveles de colesterol malo en sangre. Uno de los componentes del aguacate, llamado beta-sitosterol, tiene una estructura química muy similar a la del colesterol, y al ingerirlo hacemos que los niveles de este se controlen de manera natural. Garantizar unos niveles correctos de colesterol es imprescindible para nuestra salud cardiovascular, ya que es la manera de que nuestras arterias no se saturen, especialmente las arterias coronarias. Si esto ocurre y llegan a obstruirse podemos sufrir desde una angina de pecho hasta un infarto de miocardio, del mismo modo que accidentes cerebrovasculares.
Por otro lado, el aguacate es muy rico en potasio, de hecho es el mineral que más abunda en su composición, además de en magnesio. El primero regula la actividad muscular y es imprescindible para la generación del impulso nervioso, mientras que el segundo también es necesario para mantener una buena salud cardiovascular.
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Además, es bien sabido que el aguacate es un poderoso antioxidante que previene el deterioro celular, algo que, por supuesto, repercute en nuestra salud en general, incluyendo la del corazón.
Las mejores maneras de comer aguacate
Como hemos dicho, el aguacate es un alimento muy versátil en nuestra cocina, que podemos tomar de diferentes maneras. Quizás la más socorrida y la que más se ha popularizado es untado sobre una tostada de pan, además del famoso guacamole, pero las posibilidades son infinitas: desde huevos rellenos de aguacate, hasta gazpachos, pasando por hummus, tartar, ensaladas de pasta o de quinoa, cremas frías e incluso helado.
Pocas preparaciones se le resisten, así que solo tienes que elegir tus favoritas o animarte a probarlo de todas aquellas maneras que se te ocurran.
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