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Hay personas que aunque puedan mostrarse 'seguras' y sepan desenvolverse a la perfección prácticamente en cualquier tipo de ambiente viven una situación de paralización en el espacio laboral. Generalmente puede deberse a algún bloqueo mental o emocional que aparece cuando una persona considera que está en un entorno hostil. Carmen Terrasa, coach especializada en el sector ejecutivo, de CTG coaching, explica que esto no es algo que ocurra de la noche a la mañana, sino que se va gestando poco a poco. "El trabajador puede comenzar sintiendo cierto estrés, ansiedad o preocupación ante momentos puntuales alimentados por creencias o juicios negativos – del 'no soy capaz', al 'tengo miedo a equivocarme' o al 'no sé cómo hacer lo que mi jefe me ha mandado'…- y/o entornos estresantes, como puede ser algún conflicto con jefes o compañeros, que nos van desempoderando y tensionando cada día un poco más hasta tener la sensación de quedarnos absolutamente paralizados", comenta.
Formas de superar bloqueos e inseguridades
La experta recalca la necesidad de trabajar estas inseguridades. Como coach propone establecer un objetivo y profundizar en la pregunta ¿qué te impide conseguirlo? Al hacerlo seguramente aparecerán creencias y juicios limitantes relacionados con las inseguridades, autoestima y autoconfianza que deberíamos intentar sustituir por pensamientos positivos y creencias que nos permitiesen avanzar en vez de bloquearnos realizando una serie de ejercicios específicos. "Una herramienta que me parece muy potente es el DAFO personal, ya que ayuda a tomar mucha conciencia de cuáles son tus fortalezas y debilidades ante la situación que se está viviendo. También enseñaría técnicas básicas de mindfulness, ya que estudios científicos han demostrado los enormes beneficios que conlleva practicarlos algunos minutos cada día, especialmente en estados de estrés y ansiedad", explica.
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Reuniones y 'situaciones de estrés'
En ocasiones huir de las situaciones que nos producen esa introversión y pánico en el entorno laboral son inevitables. Es el caso de las reuniones. Proyectar una buena imagen de cara a nuestros interlocutores es fundamental, por eso, ante el bloqueo Terrasa recomienda prepararse previamente a través de una serie de pasos, como realizar un esquema –bien mental o en papel- sobre el contenido que se va a exponer para controlar la materia, respirar profundamente antes de comenzar para relajarnos, evitar que nuestra 'radio interior' nos llene de "pensamientos negativos', sonreír, mantener el contacto con el resto de interlocutores y utilizar un tono de voz adecuado son algunos de ellos.
Para apaciguar los nervios que generan exponerse a este tipo de situaciones. Por ejemplo, pedir un aumento de sueldo a los jefes, defender un proyecto ante un superior o participar en una reunión con compañeros, la coach recomienda trabajar principalmente con técnicas de relajación y una preparación previa a través de ejercicios o dinámicas de rol entrenadas en las sesiones de coaching: "Hay que ensayar, ensayar y ensayar el discurso. A mejor preparación, menos nervios. La sonrisa también en un buen aliado, contar con apoyo de compañeros de trabajo para poder expresarse y soltar todas las emociones que se van acumulando en nuestro interior, practicar deporte regularmente ya que segrega neurotransmisores que mejorar nuestro estado anímico y a mantenernos estables ante estas puntas de estrés".
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