El fin de la era de los plásticos comienza a llegar a su fin. Cada vez son más las alternativas sostenibles a uno de los materiales más contaminantes que existe y que durante muchos años ha inundado el planeta provocando graves daños al medio ambiente. La última opción procede de las investigaciones llevadas a cabo por científicos finlandeses que han sido capaces de crear un material biodegradable resistente y extensible a partir de productos naturales como la celulosa de madera y la tela de araña. Un material muy firme que podría ser la alternativa sostenible al plástico en un futuro cercano.
Un estudio reciente de los técnicos e ingenieros de la Universidad Aalto en cooperación con el Centro de Investigación Téncica VTT en y el Centro de Investigación Técnica VTT declara que al combinar fibras celulosas de madera y proteína de seda de telaraña se genera uno de los materiales más resistentes y flexibles que existen. La ventaja de este producto frente a los plásticos sintéticos es que es biodegradable y no supone una amenaza para el entorno. Si finalmente se aprobara su utilización, podría ser empleado para la elaboración de productos médicos, en la industria textil, así como en otros sectores.
Lee: Así es cómo la moda sostenible se abre camino en tu armario
Soluciones sostenibles y muy naturales
En un momento en el que prima buscar soluciones sostenibles al aprovechamiento de los recursos, es necesario mirar con atención lo que la naturaleza nos puede ofrecer sin que esto suponga un daño al entorno. El medio ambiente posee materias primas como la celulosa que además de rígida es flexible y resistente, por lo que puede ser utilizada como base para nuevos materiales.
En el estudio se ha partido de madera de abedul, un árbol propio de los bosques de la zona norte de Europa. "La pulpa del árbol se desintegra para obtener nanofibrillas que se alinean para configurar una especie de estructura firme. Esta estructura se infiltra con una matriz de seda de telaraña que es suave y disipa energía", aseguró Pezhman Mohammadi, científico investigador de VTT a la BBC.
Lee: Productos que te demuestran que tu vida puede ser aún más sostenible
A pesar de que la seda es un producto natural que procede tanto de las arañas como de los gusanos, lo cierto es que la que se ha empleado en el estudio se elaboró en laboratorio, gracias a una técnica que consiste en replicar el ADN que permite fabricar moléculas de proteína de seda.
El proyecto forma parte de un trabajo desarrollado por el Centro de Excelencia en Ingeniería Molecular de Materiales Híbridos Biosintéticos (Hyber), que además de este estudio también desarrolla otro tipo de actividades. De hecho, en la actualidad se encuentra trabajando en la producción de nuevos materiales compuestos que en un futuro próximo podrían contribuir a la elaboración en implantes, objetos resistentes y otros productos.