Cómo la recogida de basuras se ha convertido en un 'proceso inteligente' en algunas ciudades
La gestión de basuras es uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan nuestras ciudades de cara a reducir el gasto energético y la contaminación
Mientras que los niveles de basura aumentan de manera indiscriminada en nuestras ciudades, también lo hacen, como consecuencia, los gastos de recogida. Por un lado, para evitar la contaminación que supone el aumento de residuos tenemos que concienciarnos a nivel individual de la necesidad de reducir la basura que generamos en nuestro día a día; por el otro, es necesario que empresas y gobierno trabajen de manera conjunta para desarrollar sistemas de recogida inteligente que sean más efectivos y que reduzcan el gasto que esta actividad conlleva.
Uno de los sistemas más complejos y eficaces, en Noruega
Descubrir que se hace más allá de nuestras fronteras es una manera de aprender otras formas de mejorar las cosas y ver de qué manera podemos aplicarnos lo aprendido en nuestro propio beneficio. La ciudad de Bergen, en Noruega, ha implantado un sistema subterráneo de recogida y gestión de basuras que supone un entramado de más de 7.000 metros de tuberías que confluyen en tres puntos centrales donde se procede a gestionar y reciclar la basura correctamente.
El tratamiento de la basura es eficaz y la ciudad se mantiene más limpia gracias a este sistema que cuenta con sensores volumétricos con tecnología láser que permiten pesar los residuos e impulsarlos por las tuberías a toda velocidad. Esto y el resto del proceso se han conseguido gracias a big data, dispositivos conectados e inteligencia artificial. El sistema llega a detectar incluso a los usuarios del servicio, que son identificados y pagan impuestos en función del uso que hacen de él.
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Rutas eficaces en Granada y contenedores inalámbricos en Barcelona
La ciudad de Granada cuenta también con sensores volumétricos que sirven para detectar cuándo hay que recoger las basuras y dónde. Esta información llega a los camiones de basura y les muestra la ruta más óptima para proceder a la recogida. Este sistema aporta eficacia, reduce gastos y permite que la ciudad esté más limpia y con menos ruido y tráfico.
En Barcelona cuentan con diferente soluciones inteligentes. Una de ellas es un sistema inalámbrico en los contenedores que permite saber cuándo superan el 80% de su capacidad y se puede proceder al vaciado. También trabajan en proyectos que permitan integrar robots que faciliten la separación de residuos.
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El proyecto Life Ewas en Sevilla
Este proyecto es un encargo de la Unión Europea y se pretende implantar en diferentes ciudades para mejorar la gestión de residuos a través de un modelo sostenible gracias a las nuevas tecnologías. El sistema con el que trabajan se llama eGarbage y permite recibir información en tiempo real del estado de los contenedores a través de agentes remotos. Con él se reducen los costes de recogida, aumenta la higiene del servicio, se optimizan las rutas, se descongestiona el tráfico, y cuenta con un sistema de aviso de incendio en tiempo real.
El sistema cuenta con una plataforma para que los usuarios gestionen la información a tiempo real a través de la web y del móvil, facilitando la concienciación y la colaboración ciudadana. El fin último es poder contribuir al objetivo marcado por la Unión Europea de reducir para el 2020 los gases de efecto invernadero.
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