Remedios caseros para cuidar la piel de la barriguita durante el embarazo
Las alteraciones metabólicas y los cambios hormonales propios de la gestación propician la aparición de manchas, estrías, picores o sequedad
El embarazo es una etapa mágica cargada de sorpresas, especialmente para las madres primerizas. Se trata de un período en el que se experimentan muchas sensaciones nuevas y en el que el cuerpo de la mujer se transforma para atender a las diferentes necesidades del futuro bebé. A lo largo de este emocionante proceso, se suceden alteraciones metabólicas y cambios hormonales en el interior del organismo de la madre que se reflejan de manera externa. La piel es un órgano particularmente susceptible a estas alteraciones, por lo que suele ser habitual que las gestantes experimenten a menudo cambios y trastornos en la epidermis, sobre todo en la zona abdominal, como manchas, estrías, ronchas, picores o sequedad. No obstante, se pueden paliar estas molestias y afecciones con una serie de pautas y sencillos remedios caseros para mimarnos tanto externa como interiormente.
Leer: Varices vulvares en el embarazo: qué son y cómo prevenirlas
Extra de hidratación
Los cambios en la piel durante esta etapa están influidos por diferentes factores, como el tipo de piel de cada mujer (mixta, seca o grasa), que va a influir de manera determinante. Independientemente de este factor, mantener la epidermis hidratada es determinante para evitar la manifestación de incómodos picores, así como minimizar la aparición de estrías.
Los masajes regulares con aceites contribuyen a tener una piel más suave y flexible. El aceite de oliva, rosa mosqueta y aceite de ricino son idóneos para la prevención de estrías. El aloe vera, conocida como la 'planta milagrosa', actúa como antiinflamatorio y regenerador de tejidos, y antiséptico natural. Además, contiene vitaminas y aminoácidos que contribuyen a la cicatrización de heridas, mejora la circulación tras su aplicación y tiene propiedades relajantes.
El zumo de limón y la clara de huevo, que contiene aminoácidos y proteínas, también son aliados para acabar con las estrías. En el caso de la clara de huevo, basta con batir las claras de dos huevos y aplicar sobre la zona dañada hasta que se sequen por completo. Después, aplica un poco de aceite de oliva para mantener una buena hidratación. Si optas por el limón, únicamente deberás restregarlo sobre las estrías y dejar que su acidez actúe.
Alimentos estrella
La alimentación determina la buena salud de la piel y la protege desde el interior. Además de tener siempre una botella de agua en la mano para asegurar una correcta hidratación, la elección de los platos será fundamental para controlar los cambios que se producen en la epidermis. En este sentido, los alimentos ricos en silicio regeneran las fibras de colágeno y elastina de los tejidos, mejorando la flacidez de la piel. Podemos encontrar este oligoelemento en cereales integrales, verduras como judías verdes, puerros y hortalizas de hoja verde, frutos secos como almendras y cacahuetes, así como frutas como plátano, aguacate y coco. Las legumbres, los huevos y la soja en sus infinitas versiones también son unos grandes aliados para el mantenimiento de la piel.
Por último, los productos ricos en vitamina C y cobre estimulan la producción de colágeno nuevo y mejoran el colágeno ya formado, previniendo la aparición de estrías. Así, una refrescante limonada o un buen zumo de naranja pueden ser una brillante opción para ayudar a nuestra piel en verano.
Leer: No poder beber líquidos: una enfermedad rara que afecta solo al embarazo