Aunque muchos continúen tachándolo como una moda, cada vez son más las personas que intentan promover un estilo de vida más sostenible y responsable con el planeta y el medioambiente. La batalla contra el plástico, especialmente aquellos de un solo uso, y la de generar la menor cantidad de residuos posibles, reutilizando y aprovechando al máximo cada recurso, suma cada día más adeptos. Llevar un estilo de vida Zero Waste - (cero desperdicios) que consiste en no desaprovechar nada de lo que entra en nuestra casa- no es sencillo en un mundo hiperglobalizado y con una arraigada cultura del consumo rápido. Además, este objetivo requiere un cambio de hábitos importante, y aprender a eliminar malas costumbres y a reducir la creación de residuos innecesarios totalmente a cero es un proceso que requiere paciencia y tiempo. No obstante, cada vez son más los pequeños establecimientos que contribuyen a ello y que permiten que ese objetivo sea mucho más fácil de cumplir.
En la ciudad de Barcelona, por ejemplo, existe ya el primer supermercado Zero Waste. Un pequeño establecimiento que lleva operando desde finales de 2017 y que cuenta con una amplia y fiel clientela. En Yes Future, positive market, el primer comercio de estas características de la capital catalana, existen más de 300 productos entre de producción ecológica, de proximidad, y de proveedores que trabajan a pequeña escala o en cooperativas. "Comprar productos orgánicos y apoyar a los pequeños productores nos conectan con nuestra comida y con un estilo de vida más saludable, comprar evitando generar residuos innecesarios nos hace ser más conscientes de cuidar la tierra y reconectarnos con el lugar donde vivimos", explican los responsables de Yes Future. "El futuro de nuestro planeta depende de las personas y para nosotros es clave trabajar en una cadena de suministro respetuosa con ellas, desde nuestros productores o proveedores hasta el consumidor final", comentan.
Leer más: Buceando entre plásticos: las imágenes más escalofriantes del fondo marino
- Leer más: El vertedero que se esconde en el fondo del Mediterráneo
Entre la amplia gama de variedades se encuentran especias, legumbres, cereales, frutos secos, miel y un largo etcétera de productos que se venden al peso. También disponen de utensilios de limpieza para la casa y de surtidores de detergentes biodegradables y respetuosos con el medio ambiente. El plástico es una palabra que no existe en el vocabulario de este bonito proyecto. Aunque la idea es que los consumidores acudan al establecimiento con sus propios recipientes, bolsas de tela u otros contenedores reciclables, en la tienda disponen de varias opciones ecosostenibles para aquellos que necesiten llevarse el producto a casa. Una bonita manera de reducir el impacto de residuos en el medio ambiente que además ayuda a proteger el planeta en el que vivimos. Además, fomenta la compra a granel, tan utilizada por nuestros abuelos, que permite que se adquieran únicamente las cantidades de producto necesarias que se vayan a consumir.
- Leer más: A granel, la tendencia que hace la compra más sostenible