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Dietas milagrosas, batidos mágicos, irresistibles suplementos… Son muchos los productos que invaden la publicidad y que prometen sorprendentes y rapidísimos resultados para depurar nuestro organismo. La fiebre por el fenómeno detox ha arrojado mucha desinformación en torno a la 'limpieza' de nuestro cuerpo pudiendo dar lugar a equívocos en lo que a nuestra salud se refiere. Uno de los órganos vitales en el que la inmensa mayoría de personas deposita más empeño en tratar de depurar es el hígado, responsable de filtrar todo lo que ingerimos. De hecho, se trata de la primera barrera de depuración de las sustancias que entran en nuestro organismo. Por eso, es el primer órgano que se afecta cuando tomamos más fármacos de lo normal, setas venenosas o tóxicos como el alcohol.
Sin embargo, ¿qué hay de cierto en la 'sobrecarga' y 'limpieza' de este órgano? El Dr. Sami Aoufi Rabih, presidente de la Asociación Española de Hígado y Riñón (AEHR), resuelve nuestras dudas. "El hígado trabaja continuamente, sin descanso, y no se sobrecarga a no ser que tomemos más sustancias tóxicas de las que es capaz de filtrar en un momento dado. Sin embargo, no se puede limpiar de ninguna manera. Hay que darle tiempo a que depure el exceso de tóxicos que le hemos suministrado", asegura el experto. No obstante, aunque el mejor método para limpiarlo es no ensuciarlo, evitando el alcohol y los alimentos procesados, el profesional matiza que determinadas rutinas pueden contribuir a mantener este importante órgano de forma óptima. ¿Una de ellas? Una cena saludable.
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¿Qué alimentos o hábitos provocan esa sobrecarga?
A día de hoy en España, la causa más frecuente de daño hepático es el alcohol. Pero hay un tercio de la población que tiene hígado graso y esto se está convirtiendo en una parte importante de cirrosis. Con respecto a la alimentación, debemos evitar las grasas en general y seguir una dieta lo más natural posible.
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¿Qué podemos hacer por él? Hábitos saludables, alimentos concretos, complementos alimenticios…
No se recomienda ningún complemento alimenticio, salvo en pacientes que tengan una enfermedad crónica que les provoque la carencia de dicha sustancia. Para reducir el hígado graso, debemos practicar ejercicio aeróbico durante al menos 150 minutos a la semana. Y, sobre todo, evitar los tóxicos como el alcohol.
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¿Cómo sería una cena saludable pensada en 'limpiar' nuestro hígado?
Como ya he comentado, no existe la limpieza hepática, sino la protección hepática. Como por la noche no se van a realizar actividades y el metabolismo baja, el cuerpo no va a precisar grandes cantidades de alimentos que nos aporten energía. Una cena saludable constaría, por tanto, de ensalada o fruta, alimentos ligeros que no permanecen mucho tiempo en el estómago como la carne. Esto es bueno para el hígado y el resto del organismo en general.
¿Es cierto que el hígado se regenera de noche?
No, el hígado, como otras partes del organismo, se compone de células que se mueren y se regeneran, pero esto ocurre a cualquier hora del día.
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