¿Cómo te ayuda el deporte consciente a mejorar el rendimiento?

Todos somos conscientes de que ponemos muchas excusas cuando se trata de hacer ejercicio físico. La falta de tiempo es el gran pretexto que esgrime la mayoría de las personas para no entrenar o realizar actividad física. Y esto, independientemente de que se haya demostrado que es suficiente con entrenar 15 minutos al día (o incluso menos, gracias al método HIIT). Pero es cierto que cada día estamos más ocupados.

Por otro lado, la pereza se hace manifiesta a la hora de tomar la decisión de ir a entrenar. Y cuando sacamos un rato, en ocasiones tenemos la cabeza en todas partes menos en el entrenamiento. Es más, una vez nos ponemos a realizar una actividad física, lo más probable es que nuestros pensamientos estén my lejos del ejercicio que estamos realizando. Esto, además de aumentar el riesgo de lesión, le hace un flaco favor al rendimiento. Por lo tanto, es algo que tiene que cambiar. 

De la misma manera que existe el mindful eating o el mindfulness, también contamos con una forma de hacer deporte de forma más consciente para centrar nuestra atención en lo que estamos realizando. Jon Ibero, de Infinit Fitness, nos lo explica.

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Atención plena en el deporte y nuestro cuerpo

El deporte consciente es aquella práctica deportiva que consiste en realizar ejercicios físicos apartando de nuestra cabeza otros pensamientos que no sean los propios de la actividad. En definitiva, ser plenamente conscientes del ejercicio y movimiento que estamos ejecutando y del grupo muscular implicado en el proceso.

Esta corriente defiende, así, que para activar de una forma eficiente un grupo muscular en cuestión, hay que focalizarnos y llevar toda nuestra atención al mismo. Es decir, si estamos realizando una plancha abdominal y pensamos en nuestro core, notaremos una mayor intensidad durante el ejercicio. Lo mismo pasa si estamos haciendo un curl de bíceps: si nos focalizamos en el movimiento de contracción al subir, así como en el de extensión al bajar, en cada repetición notaremos cómo nos 'queman' los brazos más que nunca.

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Pararse y visualizar

Un patrón que desde Infinit Fitness recomendamos llevar a cabo antes de efectuar un nuevo movimiento o ejercicio es el de pararse por un instante, revisar la postura previa (en caso de que no sea la correcta modificarla), y visualizarse mentalmente a sí mismo realizando el ejercicio para después ejecutarlo: esto se traducirá no solo en una mejora técnica de la ejecución, que nos prevendrá de posibles y temidas lesiones, sino que además nos garantizará mejores progresos y resultados.

Si eres de esas personas a las que les cuesta concentrarse en lo que está haciendo y no consigues focalizar tu mente en el momento presente, desde Infinit Fitness te recomendamos probar actividades como el pilates o el yoga: entrenamientos que implican cuerpo y la mente, y que son mal denominadas de baja intensidad por quien las desconoce. Estas disciplinas cada vez tienen más adeptos, ganan puestos en el ranking de tendencias fitness, e incluso deportistas de alto rendimiento incorporan estas actividades con cierta frecuencia en sus preparaciones.

Dicho esto, y a modo de conclusión, desde Infinit Fitness queremos recalcar que el deporte consciente está recomendado, especialmente, para aquellas personas que tienen objetivos altamente definidos y que buscan los mejores resultados. Sin embargo, no pasa nada por llevar a cabo una actividad física de una forma más distendida, en la que primen la diversión, las conversaciones con compañeros o se busque pasar un rato ameno alejado de objetivos concretos. De hecho, el objetivo que se debe perseguir es mantener una vida activa, evitar el sedentarismo y verlo como un factor de riesgo de enfermedad. Por tanto, sea deporte consciente o no toda actividad física es bienvenida, beneficiosa y digna de ser llevada a cabo.

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