La cerveza: un sector plenamente comprometido con la sostenibilidad

La cerveza -en especial, la artesana- es uno de los fenómenos 'gastro' que más auge ha cobrado en los últimos años. Se trata de una de las bebidas de moda, su consumo se ha disparado y tiene una gran presencia en la sociedad, un contexto que ha llevado a este sector a emprender ciertas medidas a favor de la sostenibilidad ambiental en nuestro país. El cambio climático es ya una de las mayores preocupaciones a nivel mundial y la lucha contra los plásticos de un solo uso ha alcanzado la categoría de reto viral. Unos hechos que ponen de manifiesto que la conservación y protección del entorno natural se ha convertido en una prioridad en todos los ámbitos, también en el cervecero.

"Como cualquier actividad, la elaboración de cerveza genera impacto ambiental a lo largo de toda la cadena de valor. Dado que la cerveza halla en la hostelería y el turismo su principal canal de distribución es precisamente hacia ese punto donde se dirige una parte importante de nuestros esfuerzos: impulsamos buenas prácticas, como el empleo de materiales reutilizables y reciclables, ya sean en envases o en otros artículos de utilidad para el canal como merchandising o elementos de promoción en el canal de venta para que estén fabricados con materiales de origen renovables", destaca Jacobo Olalla Marañón, director general de la Asociación de Cerveceros de España, en su Asamblea 2019.

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Líneas de actuación

Las estadísticas abalan el compromiso del sector con el medio ambiente. En la Asamblea 2019 quedó patente que las compañías elaboran su producto con ingredientes naturales cultivados con técnicas sostenibles, lo que implica un gran impulso de la agricultura local. Además, el 76 % de la producción cervecera española está cubierta por sistemas de gestión ambiental. Por si fuera poco, desde el año 2008 se ha reducido un 31 % la intensidad del consumo de energía y un 19 % el consumo de agua por cada litro de cerveza elaborado. Unos datos muy positivos que el sector insiste en mejorar en los próximos años.

Así, con el fin de reducir el impacto generados en la producción y el consumo de cerveza, acaba de elaborar su primera Memoria de Sostenibilidad Ambiental en la que ha establecido cinco compromisos principales con un horizonte de cumplimiento de aquí a 2025:

• Circularidad del envase. Uno de sus objetivos principales es alcanzar que un 80% de los envases de vidrio de un solo y el 90% de los de metal sean reciclados. Asimismo, destaca el proyecto de crear una botella reutilizable estándar para todo el sector para el formato de un tercio de litro que facilite su reutilización.  
• Eficiencia energética. con el objetivo de favorecer la transición energética, se compromete a consumir un 100% de electricidad procedente de fuentes renovables.
• Reducción de la huella de carbono. A este aspecto, se establece la reducción de un 15% en el ratio de emisiones de gases de efecto invernadero en los centros de producción y generados en los procesos logísticos y de distribución.
• Mejora de la eficiencia en el uso de agua. En este apartado, el objetivo es la reducción de un 10% del ratio de consumo de agua bruta, así como el vertido de agua residual
• Innovación y sensibilización ambiental. El sector pretende hacer de este punto un valor fundamental asociado a la producción y consumo de cerveza. Así, establece promover mediante la colaboración público-privada la creación de un fondo de I+D para la reducción de los impactos ambientales del sector.