Dicen que la cara y los ojos son el espejo del alma. Pero ¿te has parado alguna vez a analizar tu escritura? Por ejemplo, observa tus ‘a’ ¿son abiertas, cerradas? Mira ahora tus 'o', ¿cómo las escribes? Ahora estampa tu firma en un papel y detente unos instantes a examinarla. ¿Serías capaz de entrever aspectos de tu personalidad a través de sus trazos? Quizá tú no. Pero hay especialistas que sí lo hacen. Es más, afirman que el espejo real de nuestro interior es la letra. Pues bien, si te interesa el desarrollo personal y quieres mejorar aspectos de tu personalidad, puedes hacerlo a través de tu forma de escribir. Esto es lo que sostiene el doctor Joaquim Valls, neuropsicólogo y creador de la programación neurocaligráfica (PNC). Este método se basa en tres maneras de abordar el cambio.
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Valls asegura que si cambiamos nuestra forma de escribir podemos llegar a experimentar una transformación en nuestra vida interior y, por supuesto, exterior. Indica que tras nueve meses aplicando su método, podemos estar más cerca de alcanzar el bienestar. ¿En qué se basa? En primer lugar, en trabajar la caligrafía. “La letra forma parte de nuestro inconsciente. Si la reeducamos estamos actuando sobre un área del cerebro que también participa en nuestras emociones y nuestra personalidad”, señala el autor del programa. Así, con tan solo 15 minutos de práctica diaria podemos limar aquellos aspectos de nuestra forma de ser que nos pueden generar más malestar, por ejemplo, la timidez, la dificultad para entablar relaciones o la falta de confianza en uno mismo.
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¿Somos lo que somos, o lo que nos dicen que somos?
Este programa de transformación también aborda otro aspecto importante de nuestra personalidad: las creencias limitantes. “Podríamos decir que acabamos siendo ‘autosugestiones’. Es decir, somos lo que nos han dicho que somos nuestros padres, abuelos, en la escuela, nuestros amigos. Todas esas ideas acaban almacenadas en el hipocampo y van construyendo el ‘relato’ de nuestra vida. Pero ¿y si podemos reeducar la memoria para lograr ser aquello que anhelamos? Lo intentaríamos, ¿verdad?
Durante su curso, el doctor Joaquim Valls, que además es autor de varios libros de coaching, entre ellos, ‘Manualmente’ (Ed. Cúpula), propone escribir una serie de frases reafirmantes por la mañana, grabarlas y escucharlas al dormirnos, cuando nuestro cerebro se encuentra en un estado de semiconsciencia. De esta manera, esas nuevas ideas de nosotros mismos van calando y consiguen sustituir las creencias limitantes que otros nos han inculcado. Esta sería, la segunda fase.
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Reinvéntate con la escritura
La tercera parte de su método consiste en escribir, cada semana, una redacción. Pero no cualquiera ni de cualquier forma. El objetivo será centrarnos en la psicología positiva, es decir, buscar y resaltar todo lo bueno que tenemos alrededor. “De esta manera, conseguiremos reeducar el inconsciente, no el de Freud, sino el cognitivo”, afirma Valls. Esto se basa en que nuestra capacidad de atención es selectiva. Por tanto, si solo prestamos atención a aquello que nos puede generar desasosiego, acabará por primar en nuestro día a día. El objetivo es fijarnos en el cuadro completo, no en las ‘manchas’.
Asimismo, la forma en la que las escribiremos también cuenta. Tras un análisis de nuestra grafía, del que saldrán reflejados aspectos que incluso ignoramos de nuestra personalidad, el coach propondrá una serie de cambios en determinadas letras, así como en nuestra firma para trabajar el inconsciente y comenzar el camino hacia la transformación.
Resumiendo, este programa intenta reeducar la personalidad a través de la escritura; incidir en la memoria, mediante las autosugestiones, y controlar nuestra atención, por medio de las redacciones. De esta manera lograremos ser más positivos, centrados en el presente y conseguir un mayor bienestar.
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