En plena fiebre por el running, no hay nada más gratificante que recorrer kilómetros por una buena causa. Son muchas las organizaciones que preparan iniciativas solidarias con las que recaudar dinero y poder ayudar a los más desfavorecidos. Una de ellas es Oxfam Intermón, una ONG que trabaja en el desarrollo, acción humanitaria, comercio justo y sensibilización, con el objetivo de erradicar la injusticia y la pobreza. Desde 2011, la organización celebra el Intermón Oxfam Trailwalker, un apasionante desafío que consiste en recorrer 100 km en un máximo de 32 horas que transciende lo puramente deportivo. Como novedad para la edición de este año, la número nueve, la organización estrena una distancia de 50 km que permite acoger a un mayor número de participantes, quienes podrán invertir hasta 16 horas para llegar a la meta.
50 o 100 km y una causa
A pesar de que las cifras kilométricas asuntan, finalizar la prueba es mucho más sencillo de lo que pueda parecer. Para completar el reto, los corredores participan en equipos de cuatro personas con los que compartir kilómetros y ayudar en los momentos bajos. Además, cada bando contará con dos compañeros más de apoyo, que se encargarán de esperar a los participantes en cada punto de control con comida, ropa limpia y palabras de ánimo para que puedan continuar la carrera.
Este desafío, que no competición, tiene como objetivo recaudar donativos dirigidos a los millones de personas que no tienen acceso a agua potable. Desde la primera edición en nuestro país, ya han participado más de 2.400 equipos y han recaudado más de 5 millones de euros.
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Planifica tu 'trailwalker'
Antes de embarcarse en la aventura, es importante planificar detenidamente la marcha con todos los miembros del equipo. Los cuatro marchadores deberán consensuar bien los ritmos y descansos con el equipo de apoyo, que serán los que les facilitarán los sustentos (desayuno, comida, cena y bebida).
Durante la marcha entre los puntos de control es importante que cada corredor lleve en la mochila productos de alimentación e hidratación. "Actualmente existen muchas bebidas desarrolladas para consumir durante el ejercicio. Tienen dosis bajas de hidratos y permiten mantener los niveles de azúcar en la sangre. Para asegurar su eficacia a nivel de hidratación es igual de importante que contenga minerales, mejorando así la absorción intestinal de sodio y agua. Se aconseja tomar cada media hora, aproximadamente, medio litro de agua, puesto que es conveniente beber antes de que aparezca la sensación de sed", recomiendan desde Oxfam Intermón. Además, aconsejan realizarse una prueba médica deportiva antes de someterse a un gran esfuerzo como el trailwalker.
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¿Cómo alimentarse para este desafío?
La Facultat de Ciències de la Salut de Blanquerna ha elaborado un listado de consejos para alimentarse correctamente antes y durante ese desafío. Para antes de la prueba, los especialistas recomiendan seguir una dieta equilibrada, asegurándose de que cada comida contenga alimentos como arroz, patata, pasta o pan y fruta, así como garantizar una óptima hidratación a través de agua, caldos e infusiones.
Dos horas antes del pistoletazo de salida, los marchadores deben comer un bocadillo con proteínas, tostadas o cereales, acompañado por una fruta y una bebida que puede ser una infusión, un café, un zumo o agua. Durante el Trainwalker, los expertos señalan que hay que realizar una comida cada cuatro horas que incluya productos como arroz, patata, pasta o pan. Mientras que para picar entre comidas, aseguran que es fundamental realizar pequeñas ingestas de alimentos como fruta, frutos secos, fruta desecada o barritas de cereales que permitan recargar pilas y llegar a la meta.
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