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Aunque se trata de un ejercicio muy fácil de realizar, el burpee está de moda y marca una tendencia. Esto se debe a que no precisa de más elementos que nuestro cuerpo, y una vez entendidos los pasos no requiere mayor preparación técnica y, sin embargo, estaremos trabajamos casi todo nuestro cuerpo, poniendo a prueba nuestra resistencia y quemando grasa a cada minuto.
Un ejercicio que nació hace casi un siglo
Este ejercicio se llama así por el apellido de su creador, el Doctor H. Burpee. En los años 30 desarrolló esta serie de ejercicios para medir el estado físico de sus pacientes. Quienes completaban una serie de cuatro repeticiones de burpees y mantenían unas pulsaciones concretas, certificaban estar en plena forma.
Fue casi dos décadas después cuando el Ejército de los EE.UU. incorporó este ejercicio para validar el acceso de los reclutas: si eran capaces de realizar 41 repeticiones en un minuto estaban dentro.
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Cómo hacer un 'burpee'
Para realizar un burpee tienes que seguir estos movimientos:
- Colócate en cuclillas y posa las palmas de las manos en el suelo, siempre a la altura de los hombros.
- Date un impulso y despliega las piernas hacia atrás, con la espalda recta, manteniendo la puntera de los pies sobre el suelo.
- Realiza una flexión, flexionando el codo, y vuelve.
- Realiza el paso 2 pero a la inversa: da un impulso para plegar las piernas.
- Ahora realiza un salto vertical.
Quema grasa en poco tiempo y es una técnica muy depurada
El burpee es capaz de combinar el ejercicio cardiovascular y el muscular. En una sola repetición estamos incrementando nuestra capacidad aeróbica, quemarás grasa, y en su lugar potenciarás el músculo en muy poco tiempo. Esto sucede porque hace trabajar varios grupos musculares y en conjunto está apelando directamente a tu corazón.
Este ejercicio es perfecto para bajar de peso, ya que cuando entrenamos con burpees estamos acelerando el proceso y podemos llegar a quemar hasta un 50% más de grasa que con otros ejercicios. Y es que hace acelerar tu metabolismo y aumenta el gasto calórico, incluso cuando han pasado horas tras realizarlo.
Todo tu cuerpo está implicado en el trabajo del burpee: hombros, pectorales, brazos, abdominales, glúteos… Por eso se trata de un ejercicio tan completo, que hace innecesario complementarlo con otros. Además, aumenta tu capacidad anaeróbica, mejorando tu resistencia pulmonar y cardiaca.
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Ciudado con las lesiones
Sin embargo, el burpee es tan beneficioso como perjudicial si no logras una buena técnica, por ello es muy importante que te asegures de que realizas este ejercicio de forma adecuada y de que tu postura es la correcta en todo momento.
Se trata de un trabajo que recae especialmente en caderas y tobillo, y una mala posición puede desencadenar, además, lesiones en los hombros y espalda. Para asegurarte, puedes separar las partes de las que se compone el ejercicio, y realizarlas con cuidado, manteniendo atención a la postura, y cuando tengas la seguridad de que por separado están funcionando, júntalos en un único movimiento.
Si empiezas un entrenamiento y todavía no tienes un nivel avanzado, comienza con pocas repeticiones de burpees, más vale mantener buena técnica que esforzarte demasiado, deteriorar la postura, y poder lesionarte. Ve poco a poco, comienza con 4 repeticiones y ve notando cómo tu cuerpo va pidiendo más.
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