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El juego es un aspecto esencial para el bienestar de nuestras mascotas. Forma parte de su desarrollo tanto físico como cognitivo y es una excelente manera de afianzar nuestros lazos con ellos. Sobre todo, en su etapa de cachorro, los perros disponen de mucha energía, pero además de gastarla corriendo al aire libre es importante que cuente con algunos juguetes para entretenerse por su cuenta o poder interactuar con ellos. Los hay específicos para calmar su ansiedad cuando se quedan solos en casa o también para estimular su inteligencia. Sin embargo, es muy importante saber elegirlos en función de las necesidades de cada animal y, sobre todo, para que no supongan un peligro para él. Estos son los factores que hay que tener en cuenta para elegir los juguetes más adecuados.
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Según su edad
- Cachorros: los perros de poca edad necesitan hacer mucho ejercicio para minimizar su ansiedad. Están aprendiendo a comportarse y muerden casi todo lo que encuentran a su alcance para aliviar el dolor cuando les están saliendo los dientes. De este modo, los juguetes más apropiados para ellos son aquellos más blanditos (de peluche, felpa o látex) puesto que todavía no tienen mucha fuerza en las mandíbulas y no dañarán su débil dentadura.
- Adultos: a partir de cierta edad, las necesidades de nuestros compañeros peludos cambian por lo que lo ideal es ofrecerles piezas más resistentes y duraderas de caucho que lo aguanten casi todo. Además, deberán ser juguetes interactivos que les ayuden a no sentirse solos cuando no estemos en casa (por ejemplo, los que hacen ruido cuando se muerden, huesos pensados para masticar y comer o juguetes rellenables con pienso o comida).
- Senior: en la última etapa de su vida, los canes pueden ver mermada su capacidad cognitiva por lo que los más adecuados para ellos que estimulen su inteligencia y les ayuden a prestar atención, como los rellenables. Además, es recomendable que estén hechos de materiales algo más blanditos pare evitar lesiones en sus mandíbulas debilitadas.
Según su tamaño
No es lo mismo un perro pequeño que uno grande. Estos últimos tienen más fuerza y tenderán a romper rápidamente cualquier juguete que les demos. Así para las razas de mayor tamaño deberemos buscar objetos grandes, con peso y rigidez para que no puedan despedazarlos y evitar que se los puedan tragar. De este modo, los de vinilo (material muy resistente) pueden convertirse en una excelente opción.
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Según su actividad
Si nuestra mascota es un auténtico torbellino y no para quieta ni un instante, lo ideal para ella serán aquellos juguetes con los que pueda disfrutar corriendo al aire libre y nos ayuden a estrechar vínculos con ellos. Así, algunos con los que lo pasarán en grande son los que tienen forma de cuerda -de manera que el perro pueda tirar de un extremo y nosotros de otro-, además de los discos voladores y pelotas que puedan perseguir (estupendos también para enseñarles a recibir órdenes).
Juguetes de calidad
Es conveniente invertir algo más de dinero en juguetes de buena calidad que no se rompan fácilmente, no sean tóxicos y resulten atractivos a los canes. También es importante comprobar que no les quepan en la boca porque se los podrían tragar con facilidad. Del mismo modo, hay que evitar darles cualquier cosa que encontremos por casa para que se entretengan, como calcetines, zapatos o trapos viejos, sobre todo si son cachorros, puesto que no son capaces de distinguir lo nuevo de lo usado y mordisquearán todas las prendas que encuentren a su alcance.
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