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No nos cansamos de repetir los grandes beneficios que el acto de caminar a diario ejerce sobre nuestra salud. Y es que no hay un modo de ejercitarse más económico, más sencillo y que pueda practicar cualquier persona independientemente de su edad y condición física.
Si caminas lo suficiente lograrás, entre otras cosas, mantener un peso saludable, tonificar el cuerpo, activar la circulación, aumentar la densidad ósea, reducir el colesterol, regular los niveles de azúcar en sangre y dormir mejor.
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Cuánto hay que caminar al día
Hasta hace no mucho tiempo se estimaba que para estar saludable había que caminar unos 10.000 pasos al día. Pero una investigación reciente publicada en el International Journal of Obesity afirma que para adelgazar, regular la glucosa en sangre y prevenir enfermedades cardiovasculares habría que caminar 15.000 pasos al día. El director del estudio, el Dr. William Tigbe aclara que esa cantidad de pasos equivalen a unas 3,5 horas al día caminando a paso tranquilo. Visto así, parece un objetivo imposible de alcanzar, pero no hay que desanimarse.
Al parecer una persona sedentaria ya camina unos 5.000 pasos sin esforzarse mucho. Así que con un poco de empeño, es posible alcanzar la cifra de pasos soñada. Para empezar, camina a un ritmo ligero y el número de pasos subirá.
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Trucos para lograrlo
- Ayúdate con una aplicación: si descargas en tu smartphone alguna de las distintas Apps que te ayudan a contar pasos, como Accupedo o Runtastic, podrás saber cuánto caminas al día y hacer tus propios cálculos. Además, seguro que te resulta muy motivador comprobar cómo alcanzas los objetivos.
- Vuelve andando del trabajo (o bájate una parada antes): piensa en cuánto tiempo de diferencia hay entre ir al trabajo en cualquier tipo de transporte e ir andando. Muchas veces la diferencia no excede los 15 minutos y tu salud agradecerá muchísmo que hagas ese trayecto caminando. Si no es posible, prueba a bajarte una parada antes del metro o del autobús, y ya estarás añadiendo cerca de 1.000 pasos a tu cómputo diario.
- Camina 30 minutos más: puedes hacerlo en cualquier momento del día (a la hora del almuerzo, al salir del trabajo, antes de cenar…). Camina media hora por gusto, sin necesidad de ir a ningún sitio en concreto, y no solo aumentarán los pasos que das, también verás que es una excelente manera de eliminar el estrés acumulado.
- Di adiós al ascensor: sabemos que es más fácil decirlo que hacer, porque un ascensor es algo muy tentador, sobre todo si estás cansada o si tienes que subir muchos pisos. En solo 5 minutos subiendo o bajando escaleras habrás acumulado algo más de 1.000 pasos.
- Aprovecha el fin de semana: reserva parte de tu tiempo libre para el descanso, pero invierte otra parte en caminar descubriendo tu ciudad, o dando paseos por el campo, que además te ayudarán a oxigenar tu mente. Una tarde de compras tampoco está mal para recorrer las calles o los pasillos de un centro comercial. Lo único importante es que camines.
- ¿Tienes que ir al lavabo? Mejor en otra planta: o dicho de otra manera, busca siempre el camino más largo para llegar a los sitios. Ve al baño más lejano, a la cafetería dando un rodeo, y acércate a la mesa de tus compañeros de trabajo si tienes que decirles algo, en lugar de usar el teléfono. Y seguirás sumando pasos y pasos...
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